La hija de Harley Quinn

parte #2

Al despuntar el alba, una siluetas deambulaban por los tejados, y frente a la luna, un nuevo villano emergió del velo de la noche. era la joven Jessica con su atuendo de Diamond Quinn aunque simplemente no sabía qué hacer como villana, estaba aburrida, así que robó productos químicos de los salones de belleza, globos eh hizo bombas de pintura caseros, su primera objetivo fueron los clubes de mafiosos, logro que todos corrieran llenos de pintura, entro saco dinero de las mesas y caja para  salir de ahí mientras dispararan hacia ella, tomo mas bombas de pintura y las arrojo lejos mientras sacaba el dinero arrojándolo a la calle viendo todos se lanzaban a recogerlo, Diamond se atragantó de la risa cuando una mano agarró su brazo.

-¡tu que haces aquí metiéndote con eso hombres!.

-eso a ti no te...oh hola batci...-.contesto con burla la joven Quinn.

la molestia se podía ver en los ojos del murciélago por la osadía de la niña-¿quien eres y que quieres?-.

-bueno querido si insistes, soy Diamond Quinn, hija de Harley Quinn, sorpresa!!!

-¡no me llames así! y si eres hija de esa demente pruébalo-.

-ella me dio su masó, me crio desde pequeña y me convirtió en lo que ahora vez-.

-eso no significa que seas como ella... que no te enseño nada bueno esa mujer.-

-muchas cosas, y si talvez no deba ser como ella, pero que bien se siente hacer el mal...-.

Jessica sacó una tarjeta Q que contenía gas adormecedor y la sopló en su cara, dejándolo inconsciente por unos minutos, y cuando despertó estaba esposado a un poste de luz, al parecer Diamond lo había llevado al muelle mientras dormía, este se sentó y se volvió hacia Damon enfurecido.

-hola amor, ¿despertaste al fin?-.

-¡¿Qué hago aquí?! ¡¿que quieres de mi?!-.

-si te soy sincera no quero nada importante, solo a ti-. la joven se sentó en su regazo mirando al mayor con una sonrisa coqueta. -ambos tenemos algo que el otro quiere, podemos hacer un intercambio...

-¿y tu que tienes que me podría ser de utilidad?-.

-tengo información muy valiosa... el acertijo planea algo muy grande, si tu me das lo que quiero cantare igual que un canario-.

-y puedo saber que es lo que quieres a cambio?-. en lo que estos hablaban este estaba forzado las esposas para liberarse.

-esto-.

Diamond se acerca a el lentamente y besa sutilmente haciendo que su piel se erice cuando se separan ella se levanta y le abre una de las esposas y la coloca en el poste rápidamente dejándolo con una mano libre.

-si te quieres liberar tendrás que quitarme la llave. Le dice mostrándola

-eso es fácil.

Ella la toma y la guarda en su sostén.

-¿eso crees? sácala y veamos.

Sin pensarlo dos veces se acerca a él y pudo sentir como metía la mano para sacar la llave cuando al fin la tenia se libero pero al voltearse ella no estaba.

-ahora se lo que se siente. Dijo Batman en voz baja.

 Diamond estaba en el techo del edificio pensando mientras observa las nubes "No me cae bien, es un enemigo de la familia estar con el es algo peligroso". En eso suena su teléfono, después de contestar llegó rápido a su casa donde estaba su tía hiedra

-hola tía Hiedra ya vine.-

-niña donde estuviste pensé que ibas a buscar a tu madre.-

-no tia no lo hice...-

-Jessica ahora eres adulta debes buscar una casa, trabajo y una vida honesta por lo menos como cuartada para que nadie te relacione conmigo o tu madre.-

-si lo se, mañana empiezo ¿si?-

-ok linda, eso espero.- dijo hiedra con un gran alivio.

Al día siguiente, salió a caminar por la ciudad con una peluca para cubrir su cabello cuando notó un letrero que decía:

Se dan clases de cocina gourmet para principiantes.

Sin pensarlo entraba y firmaba la inscripción. Todos los días iba a las clases , y por la noche se dedicaba a honrar la tradición familiar, robando tiendas, llenándolas de grafitis por diversión y enloqueciendo a la gente con gases de la risa, Batman intento atraparla, pero nunca lo logró, porque podía salir fácilmente de las situaciones mas difíciles, sabía mucho sobre estrategias de fuga, la vida encerrada le mostro todas las formas de escaparse de su tia y madre ademas aprendió todos los  movimientos de lucha y huida que pudo. Una noche mientras caminaba por un callejón oscuro Batman la sorprendió  tomándola  del brazo esposándola.

-te atrapé, payasa.-

-no te confíes, murciélago.

Levantaba las manos para demostrar que no estaba esposada, para consternación del mayor, siempre lo hacía cuando se veían.

-ay vamos Bats sabes que no eres rival para mi ¿por que no te rindes?-

-¡jamás! no mientras estas suelta haciendo un completo caos.-

-bueno ¿Qué tal un juego?-

-no.-

-Oh, vamos ¡te gustará! Se trata de una carrera hacia el capitolio donde está la batiseñal. Si llego primero, harás lo que yo quiera, pero si me atrapas antes de que lo toque, podras arrestarme y llevarme ante la justicia ¿trato?-

Se dieron la mano y Jessica corrió lo más rápido que pudo mientras era perseguida por el superhéroe, Batman la alcanzó y agarró su mano, pero esta rápidamente se soltó y continuó, cuando llegó al centro del capitolio, tocó el faro pero Batman se apresuro hacia ella y se le lanza enzima mientras sostiene sus manos.

-yo gane...- expreso el hombre con su voz fría.

-bueno, aquí esta tu premio.

Ella lo volteó y se acostó encima de este, se acercó un poco más y comenzó a besarlo, tomando su rostro entre sus manos acariciándolo con ternura, cuando una voz la  hizo levantar la vista, frente a ellos estaba el Comisionado Gordon, quien los observaba algo incomodo.