Parte 1: El espejo roto.

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Ahora ciertamente ya no entendía porqué demonios estaba sufriendo. Ciertamente estaba siendo afectado sin compasión, pero tampoco entendía porqué demonios estaba tan encerrado en su cerrazón.
Miró al frente con desesperó, intentaba entender los motivos del porqué la sangre corría por las calles y no podía simplemente entender.
-¿qué te pasa?-pregunto una voz que no reconocía.
-¿No ves la sangre?-dijo con voz nerviosa y los ojos bien abiertos.
-¿de qué demonios hablas?. Alejandro, aquí no hay nadie-miró a dirección de la voz, ¿porqué le veía el cuerpo, pero no le veía el rostro?. Cuando regreso la mirada se dio cuenta de que así era y eso lo desconcertó-¿estás bien?.
-¿donde estoy?-se levanto desconcertado todavía más, cómo si sus memorias se escaparan hacía un lugar que desconocía y le dejaran la mente en blanco. Miró a sus lados y todo le empezó a dar vueltas. Una mano quiso tocar su hombro y la rechazó de golpe.
1.-Jamás muestres lo que te molesta.
2.-Sonríe aún que duela.
3.-A nadie le importa lo que te pase.
4.-No te preocupes por nada, de eso nos encargamos nosotros.
5.-aquí nadie llora, aquí nadie sufre.
Esas voces retumbaban una y otra vez en su cabeza, lo estaban confundiendo más y más.
6.- Olvida todo de ser necesario.
7.-No necesitas del sur, sólo del norte
8.-No hay necesidad de escuchar.
9.-El dinero es lo más importante.
10.-debes olvidar lo que fuiste y abrir tú cultura al norte.
11.-No necesitas ver.
Ahora no estaba viendo nada, ahora estaba a ciegas. Ahogo un gemido de angustia y comenzó a tantear el lugar. Se arrastro por la tierra para tocar algo que le pareciera familiar, pero no sentía nada, ¿qué estaba pasando?, ¿porqué justo en ese momento?.
Escucho ruidos que provenían de algún sitió así que emprendió a ese lugar, los ruidos, los gemidos, los reclamos, todo le estaba aplastando el corazón. Cuando coloco una de sus manos en sus ojos advirtió que llevaba una venda, se la quito y deseo, con todas sus fuerzas que eso sólo fuese un sueño, una mentira, pero no, esa era la verdad.
-¿porqué nos haz dejado solos?-preguntaron los de mayor edad-¿quién es él?-preguntaron los más jóvenes-No tengo confianza en ti...Ya no-decían los que en esos momentos eran los adultos.
Todos ellos le señalaban con ¿rencor?, se estaba rompiendo y eso dolía, ¿ya nadie recordaba lo que era?, ha todo esto...¿quién era...él?.
Su mente se vio en blanco y todo se comenzó a desvanecer. Cuando abrió los ojos de nuevo estaba en una habitación blanca de mediano tamaño. Se sentó en la cama con los ojos vacíos, se acerco a la venta a paso lento, como si le pesara mantenerse en pie. Él recordaba haber hecho muchas cosas, pero hoy no parecían importantes. Cuando llego a la ventana, sólo vio dolor, agonía. ¿Quién se supone que era?. Frente a él ahora estaba un espejo que lo reflejaba, este sonreía con sangre en sus ojos.
-Y es que te olvidaste lo que significa el sacrificio, le perdiste el sentido-le murmuro su yo del espejo-ahora sólo mira cómo sangro, ahora sólo mira mis manos-en sus manos cadenas y sus ojos no los podía abrir-¿te olvidaste de ellos?-pregunto mostrando un reflejo de un niño alegre que estaba a un lado de un hombre de mediana estatura, piel morena, cabello negro hasta los hombros y sus ojos rojos, este sonreía con un deje de tristeza.
-No-susurro, pero se mentía a si mismo, ¿quién era ese hombre?.
-¡deja de mentir cómo un cobarde!-grito el reflejo apretando los puños, frunciendo el ceño con rabia.-¡cobarde, cobarde!.
-¡cállate, tú no sabes nada!-golpeo el reflejo con ambas manos y se vio así mismo totalmente roto, con heridas de las cuales corría la sangre.
-¿cómo no voy a saberlo?...Si tú y yo somos lo mismo-escucho mentalmente, notando que en sus ojos había sangre, cuando vio sus muñecas se dio cuenta de las cadenas, y cuando abrió las manos se dio cuenta que estaban heridas-soy esa voz que te guardas en lo profundo de tú corazón...Yo soy...a lo que ellos llaman "Patria"
"Todos somos un espejo de luz. Que esta humeante por nuestros sueños y ambiciones, que nos impide entender, que al final, todos seremos lo mismo: luz.
Pero, ¿qué pasará si ese espejo se rompe?. ¿Qué pasara si perdemos de vista lo que significa ese espejo?, ¿qué significa esa luz?, ¿cómo la representamos?.
Cuando el espejo se entierra se debe encontrar para recordar lo que somos.
Cuando este esta humeante, pensamos que al final existe algo que nos une, para eso debemos buscar la forma de darle un significado.
Pero cuando se rompe, cuando se rompe entonces deberíamos de entender que todo tiene un límite. Si golpeas el espejo que nos representa, se truncan nuestros lazos, se vuelven confusos y entonces, es cuando utilizamos el pasado, para comprender eso que consideramos inútil, que consideramos podrido. Debemos darnos cuenta que, cuando el espejo se rompe, necesitara ayuda para volverse a sanar, quedarán rastros de la ruptura, pero debemos entender, que ese espejo es más que materia, si comprendemos eso, entenderemos que aún existe

...Esperanza".

Sin tregua.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora