"Allá vamos.."
Suspirando abrió la puerta, sorprendiéndose al ver a su jefe.
Debía ser un hombre de unos treinta y dos años como mucho, alto y delgado, pero con músculo. Cabellos rubios perfectamente colocados y piel pálida. Ojos azules y unas tupidas pestañas negras.
Realmente guapo.
"B-buenas tardes.."
"Ah, debes ser Dipper.."
Sonriendo ligeramente se acercó al chico, se notaba que era universitario, tenía ese aire de ingenuidad y despistadez que le hacía ver, aún como un niño. Viendo que ese chiquillo era bastante atractivo, sonriendo torcidamente para su adentros se presentó.
"..Encantado, soy Bill."
"El placer es mío."
Sonriendo ampliamente le tendió la mano, recibiendo un apretón de manos decidido y fuerte.
" ..Venía a presentar mis respetos y a darle las gracias por dejarme realizar las practicas aquí."
"Oh, vamos con tantas formalidades me haces parecer un ogro.."
Viendo como ese comentario había echo reír ligeramente al menor se apoyó en la mesa, observando como el castaño movía sus manos nerviosamente y no dejaba la mirada quieta en ningún lugar, haciéndosele antojable.
"Estarás al cuidado de Gregory, lo escogí porque es el que más paciencia y tiempo tiene."
"Intentare no ser una molestia, señor."
Ligeramente avergonzado agacho la mirada. Sinceramente ese nombre le estaba escrudiñando con la mirada, cosa que le ponía muy nervioso.
"Tranquilo, para eso son las prácticas, para equivocarse y aprender."
Encendiéndose un cigarro, dejo escapar el humo de entre sus labios sabiendo muy bien que sería entretenido tener a ese chiquillo en su plantilla.
"Ve, Gregory te estará esperando."
"Gracias.."
Tras cerrar la puerta Bill, sonrió, sentándose de nuevo y dejando cigarro reposando en el cenicero, abriendo el cajón y ojeando otra vez el currículo de Dipper. No había errado en escogerle a él entre todos esos estudiantes con solo ver la fotografía que había de él supo que sería una delicia tenerle en la empresa.
Y sí, no le importaba mostrar su preferencia por el sexo masculino, es más, ese niño con ese aire de ingenuidad le había atraído.
"Dipper, ¿Eh?."
**
Tras presentarse ante Gregory y que este le mostrara casi toda la empresa pudo ver porque su jefe había echo ese comentario sobre su persona, era un joven unos cuantos años mayor que él con unas facciones muy relajadas que le hacían estar cómodo ante su presencia. Gregory le asigno una de las mesas para trabajar, se encargaría de ser el ayudante de todo aquel empleado que necesitara una mano extra para acabar los pedidos, así aprendería y no debería cargar con la responsabilidad de todo un proyecto cosa que ya no esperaba por su falta por su falta de experiencia.
Había podido ya ojear a sus compañeros y saber más o menos con quién congeniaría mejor de ellos. Siempre era de agradecer tener nuevas amistades.
"Dipper, verdad?"
Una chica que parecía algo mayor que él se le acerco con una taza de café, su largo cabello rizado rosa caía por delante de su pecho y lucía una sonrisa muy agradable.
"Sí, tú eras..¿Rose?" Viendo que la chica asentía y le tendía la taza, sonrió a modo de agradecimiento. " Espero que tengas paciencia conmigo.."
