El Diario de Dos Caminos

35. Eres mío repite después de mi... soy tuyo

Y en ese abrazo no encontré solo otros brazos, 

te encontré a ti... Me encontré a mi.

Encontré lo que me estaba buscando.  Pues mi cuerpo

se entendía con el suyo, como si fueran los labios

de una misma boca, como si hubieran bailado

mil canciones, como si mil brazos antes que los tuyos

nunca me hubieran abrazado...

Mind of Brando

Si son menores de edad por favor omitir este capítulo ya que cuenta con narraciones sexuales y eróticas

Cuantas veces soñé tener este enorme, suculento, hermoso pene en mi boca, es tan grande que no puedo llegar hasta el final, por Dios verlo tan excitado me está volviendo loco; si alguien me hubiera dicho que yo estaría aquí abajo lamiendo con sensualidad el glande de este magnífico semental... diría ni en mis sueños...

Subo lentamente después de degustar su deliciosa entrepierna, mis ojos están ardiendo de deseo, no lo puedo tomar con calma, con fuerza jalo su cabello hacia atrás dejando su cuello descubierto para hacer desastres con él, juro que no puedo ser gentil... necesito morderlo, con toda la saña que generan las palpitaciones de mi pene que está tan duro como el suyo.... Solo puedo escuchar sus gemidos exigiéndome más... Eidem me toma del cuello acercando mi boca a la suya y sin ninguna consideración muerde y succiona mis labios con los suyos su gemido y su respiración excitada la puedo sentir cuando mete su suculenta lengua en mi oído, mientras que su miembro duro como una roca se frota seductoramente contra mis muslos, mi mente comienza a ponerse en blanco...

"Eidem por favor... ahhhh... repite después de mi... que eres mío... dilo mil cien mil veces con tu voz excitada, hoy no me importa perder la decencia y que conozcas lo más bajo de mi... grítame cuanto me amas... dime que sin mí no puedes vivir, tócame con tus enormes y calientes manos... júrame que eres y serás solo mioooooo..."

Mientras lame mi cuello le suplico que me diga lo que mi corazón espera escuchar con tantas ansias... lo necesito porque después de eso ya no hay vuelta atrás...

"Mi amor, mi mariposa, soy tuyo desde que entraste por aquella puerta la primera; vez ese día mi vida se unió a la tuya, Aarón te amo con la locura con que mis arrebatos me han llevado a herirte, te amo eres lo que más he deseado tener en la vida, MI AMOR TE AMO, QUIERES QUE LO GRITE AQUÍ... DELANTE DE DIOS CON SU CONSENTIMIENTO O SIN EL TU ERES Y SERAS EL AMOR DE MI VIDA, Y YO SOY TUYOOOOOOOOOOOO...TUYOOOOOOO..."

Ahora si... en este momento me dejo llevar hasta donde la pasión nos lleve... quiero fundirme...y ser uno con él...

"Eidem te amo... tal vez no te amé desde que te conocí pero te amaré más de lo que tú me amas a mi... eres mi hermoso gigante... el hombre que va llenar mis días y mis noches..."

Al escuchar esas palabras que salen de mi boca como un susurro entre tanta excitación; veo como su cuerpo tiempla de placer y la emoción de Eidem por mi piel se incrementa, me chupa como si quisiera que mi piel quede limpia de cualquier otra huella; su pasión no disminuyo ni siquiera en lo más mínimo. Su mano se deslizo hacia mis pezones... yo me encuentro en sus regazos por lo que levanta sus ojos como pidiendo permiso para lamerlos desesperadamente; mi cuerpo inmediatamente reacciona arqueándose de tanta excitación, casi sin darme cuenta mi cintura se mueve eróticamente de un lado a otro con una gran urgencia es como si fuera un imán que me atrae a él... Siento el corazón de Eidem latir tan fuertemente dentro de su pecho por un momento tuve miedo que se escapara por su boca, esto es una locura este hombre me besa tan intensamente que su lengua se mueve bruscamente y con tanta violencia que siento que ya no puedo respirar.....