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Bélgica dejó ir a su hermana junto a su cuñado que no dejaba de sonreírle mientras le pedía que fuese al taller para ayudarla con los gráficos de su libro, la muchacha estaba emocionada sin contar que toda le reunión se la había pasado hablando de su proyecto con su familia sin pensar que su novio no paraba de mirarla de manera extraña.
¿Bélgica?-oyó que Jong In la llamó desde la cocina.
Un momento Jong In, estoy recogiendo la mesa –contestó la muchacha mientras deslizaba los platos de plástico hacia una bolsa.
Jong In la miró desde la cocina un tanto serio hasta que vio que la pantalla del teléfono de Bélgica se encendió ante un mensaje y bastante curioso se acercó a paso lento mientras esta limpiaba la mesa ahora de espaldas a él.
"Cuñado"
- Bel, te envío algunos diseños que te pueden interesar, tengo un amigo que puede ayudarte con los gráficos de los que me contaste y tengo una tableta gráfica para que puedas practicar cuando quieras.
Jong In frunció el ceño, al parecer la plática que habían tenido era bastante enserio. Se acercó hacia Bélgica y la levantó del brazo tomándola desprevenida, la muchacha frunció el ceño e intentó soltarse pero se quedó presa del pánico cuando este ejerció más presión en el toque.
¿Qué pasa?-preguntó asustada.
¿Por qué Yixing y tú estuvieron hoy platicando tan juntos?-cuestionó- ¿Qué está pasando?
¿Disculpa?-Bélgica se soltó de su agarre mientras miraba su brazo y luego frunció el ceño totalmente indignada.
¡Responde Bélgica Park!-alzó la voz.
La muchacha salió disparada con la bolsa de basura entre las manos dispuesta a obviar aquel detalle, sin embargo, Jong In la siguió sosteniendo esta vez el teléfono, Bélgica tiró la bolsa al bote de basura que tenía bajo la cocina y cuando se levantó casi dio un brinco el verlo frente a ella con la mirada totalmente gris.
No voy a responderte porque no quiero ser grosera –susurró- pero estoy empezando a cuestionarme sobre tu comportamiento.
Bélgica salió empujándolo hasta que llegó a su habitación, ya ahí se sentó sobre la cama mirando por la ventana el atardecer y trató de respirar con fuerza para calmarse, por un momento recordó aquellos detalles, los intentos de suicidios, la aparición en el café, que prácticamente le prohibiera usar un tono de labial fuerte, los celos con Min Seok.
Bélgica emitió un grito cuando sintió las manos de Jong In sobre sus hombros y asustada se levantó de la cama para mirarlo, la luz se le reflejó en la cara y esta vez su expresión cambió, la muchacha no hizo nada más que quedarse viéndolo. Este se acercó a paso lento y la abrazó de lado colocando sus labios sobre su mejilla y cariñoso acarició su espalda.
