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Bélgica rio bajito cuando aquel hombre golpeó al otro en el ordenador, Sehun la miró con el rabillo del ojo y bajó la mirada avergonzado, estaban sobre la alfombra de la sala. No había podido compartir el internet al televisor y terminaron viendo una serie de los ochenta en su computador, a Bélgica no le había importado y Sehun eso lo había aliviado.

¿Entonces?-Bélgica le habló y este la miró desconcertado.

Perdona, estaba pensando -susurró y la miró.

Su vista se dirigió al televisor y se dio cuenta que Bélgica hablaba de la serie que ya había terminado, Sehun volvió la vista al ordenador y justo cuando lo hizo quedó a oscuras el salón. Los dos se miraron por unos segundos y entonces el silencio los invadió.

¿Quieres ir a dormir ya?-le preguntó.

Bélgica jugueteó con sus manos nerviosa y asintió lentamente. Evidentemente nerviosa por lo que pudiese suceder caminó tras él y lo envidió, realmente lo sentía sereno y quiso en ese momento estarlo. Cuando sus ojos se posaron en la gran cama de dos plazas tembló ligeramente y carraspeó luego de ver a Sehun ir hacia el ropero, abrió una de las hojas y buscó en el interior.

Bélgica adivinó de lo que buscaba, caminó dándole la espalda hasta la fotografía que reposaba sobre su mesa de noche y la tomó entre sus dedos, era Sehun y una joven mayor. Sehun giró con una camiseta blanca y la miró enternecido, sabía que no preguntaría pero estaba listo para contárselo.

Es mi hermana -le susurró acercándose- falleció hace un tiempo.

Lo siento -Bélgica susurró y dejó el portarretrato en su lugar completamente nerviosa.

No, está bien -Sehun bajó la mirada hacia su mano.

Sehun miró el portarretrato y Bélgica lo notó, se quedaron en silencio unos segundos hasta que Sehun alzó la mirada, esta vez ya no había rastro de seriedad, sus cejas estaban relajadas y su mandíbula tembló un momento. Bélgica dio un paso para ir por él pero se quedó quieta cuando Sehun se sentó en la cama y la miró a los ojos con un brillo particular.

He llegado a pensar que ella me llevó a ti Bel -le susurró y luego bajó la mirada- cuando no quise tomar tu caso tuve un extraño presentimiento, recordé el día en el que murió y como mi abuela y yo nos las apañamos para superarlo... yo me hice policía por ella. No soy un super héroe, pero quiero ayudar.

Puedes estar muy contento -Bélgica se sentó a su lado y sostuvo su mano- eres el mío.

Sehun la miró con sorpresa y luego miró su mano sobre la suya. Soltó una risa fruto de sus nervios para después mirarla a los ojos.

¿Puedo darte un abrazo?-le susurró nervioso.

Bélgica rio como respuesta y lo abrazó, Sehun acostó la barbilla sobre su hombro mientras sonreía débilmente inhalando su aroma.

Cuando se separaron, fue Bélgica quien tomó su rostro entre sus delicadas manos y lo besó. Sehun se quedó quieto sintiendo sus labios tibios sobre los suyos, se dejó envolver hasta que sus manos viajaron nerviosas hasta los hombros de Bélgica y se alejó mirando sus largas pestañas.

Sus ojos siguieron el movimiento de los de Bélgica y la besó con necesidad, cuando se dejaron caer en la cama una sonrisa brotó de los labios de Sehun y este se alejó para acariciar con su nariz la suya, negó de repente dejando a Bel en completo desconcierto.

Se dejó caer a su lado en la cama y miraron el techo por unos segundos, su mano tanteó por la cama hasta hallar la de Bélgica y la presionó con delicadeza.

No Bélgica, no quiero hacer nada que no quieras -le susurró- yo no soy así.

Bélgica sintió como el aire que había tenido en los pulmones salió despacio por un hilo imaginario que salió de su boca y giró a mirar a Sehun. Se acercó a este para abrazarse a él y este lo hizo, le besó la coronilla y acostó su cabeza sobre la suya.

Gracias Bel-le susurró y esta sonrió.

A ti -le respondió.

Cuando a mitad de la noche Sehun despertó por el frío, se dio cuenta que Bélgica ya estaba completamente dormida. Sonrió al verla acurrucada a su lado, con cuidado la acomodó en la cama, buscó un par de frazadas y las colocó sobre ella mientras la miraba con ternura. No iba a dejarla, no cuando empezaba a sentir que la quería.

A la mañana siguiente Bélgica despertó con el sonido de un par de platos rompiéndose, saltó de la cama angustiada pero en cuanto llegó al salón y vio a Sehun con la escoba y un recogedor respiró con calma.

Perdona, soy un poco desastre -le dijo avergonzado- intentaba poner la mesa.

Lo hago yo -le dijo Bélgica.

No, eres mi invitada -le dijo frunciendo el ceño- ve a lavarte la cara y vuelve.

Bélgica sonrió ante la orden y caminó hacia el cuarto de baño que se encontraba cerca de la habitación, en cuanto se miró al espejo su rostro brilló. Había algo especial esa mañana y pudo sentirlo, sus manos fueron hacia el grifo y cuando optó por tomar un jabón se quedó pensando, había una serie de frasquitos y lociones que no supo para que eran. Sonrió mientras los tomaba y giró la cabeza hacia la puerta, no imaginó nunca que Sehun fuese tan cuidadoso con su imagen, realmente estaba sorprendida.

Oye... -le dijo llena de confianza desde el cuarto de baño.

Sehun se aproximó y luego de mirarla lo adivinó, sonrió bajando la cabeza mientras caminaba hacia ella y se colocó detrás, estiró la mano hacia un jabón que Bélgica jamás hubiese podido encontrar y lo estiró hacia ella.

Es un jabón muy suave -le indicó- solo ponlo en las palmas y masajea suave.

Bélgica lo oyó con gracia y cuando este fue lanzó agua hacia él, Sehun la miró sorprendido y luego se acercó a ella. Los dos iniciaron una pequeña lucha que dejó como resultado el cabello bañado de Sehun y a Bélgica con espuma por la barbilla.

Cuando ambos encontraron sus mirado, un par de risas se oyeron por el departamento, Sehun jamás había sentido algo similar. De hecho, nunca antes había invitado a alguien a su departamento, siempre había considerado que era su espacio, suyo, de nadie más. Sin embargo, estaba dispuesto a compartirlo con Bélgica y no solo ello, quería que ella también lo invitase a conocer su espacio, su mundo, no aquel que los medios habían pintado sobre ella. Él estaba seguro que detrás de todas esas cicatrices que pintaban su pasado, estaba la verdadera Bélgica, aquella que sonreía sin miedos.

¿Hola?

Como que está historia está un poco lenta, voy a adelantar la emoción.
Por cierto, no olviden seguirme en mi cuenta personal de Pandhi. Estoy como "pandhibrown" ♥.
Gracias ♥. Un beso y buen inicio de semana.

Dark Angel - K.JI/ O.SHDonde viven las historias. Descúbrelo ahora