Capítulo 7

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22 de marzo de 1472
William abrió la puerta de la panadería. Se encontró con guardias del palacio y gente del pueblo frente a el. Su padre adoptivo, el panadero; estaba detrás de él asustado.
-William Ledger- los guardias apuntaron sus armas hacia el.
Su padre a pesar del susto que le provocaba la situación, le paso su arco y sus flechas.
-Maten a ese monstruo. No puedo creer que Álvaro lo escondiera-una señora grito desde fuera
-Mi padre no tiene la culpa de que su hijo- William señaló a Maximiliano- sea una bestia.
-¿Yo soy la bestia?- cuestionó Maximiliano
Maximiliano se despojó de su camisa y varios rasguños y marcas estaban en todo su cuerpo.
Los guardias se acercaron más a él.
William se molesto. Tomo su arco y flechas tan rápido, no le dio oportunidad a los pobres guardias.
Pronto lanzó una flecha llena de fuego que rodeó a los aldeanos.
Salió corriendo al bosque asustado y su padre iba detrás de el.
-Hijo cuídate por favor-gritó y se detuvo.
William siguió corriendo.
Cuando los aldeanos corrieron al bosque ya era tarde. El bosque estaba en llamas, el asesino de cinco hombres, el diablo en la tierra desapareció.

[***]

23 de marzo de 1472
-Padre, me ascendieron con la condición de que entregue a William-anunció Marcus
Su padre lo miro molesto.
-No lo haré padre. El se puso en peligro por mi. Ha hecho todo por mi. No lo traicionare
-Álvaro- se escucho una voz femenina en la puerta del establecimiento
Padre e hijo voltearon. La madre de Maximiliano estaba con un cuchillo entre sus manos en la puerta.
-¿Dónde está tu monstruo?-preguntó amenazante
-Dejé a mi hermano-ordenó Marcus
La madre de Maximiliano se soltó al llanto.
-Mi pequeño esta lastimado por la culpa de esa bestia.
-Han pasado 8 años de eso- Álvaro la miro indignado
Entonces el panadero recibió una sorpresa. El hijo de esa mujer tenía un rasguño a lo largo del ojo, perdió la vista del ojo izquierdo.
-¿Qué te pasó? -Marcus se acercó a Maximiliano
-El idiota de tu hermano

[***]

23 de marzo de 1472
William corrió a lo largo del bosque. Casi era capturado por Maximiliano.
Entonces un dolor agudo en las piernas lo detuvo, y lo derribó. Un hueco en la tierra se abrió. Y un hombre delgado, ya adulto, de tez morena y pelo blanco salió del hueco. Tenía heridas y respiraba poco.
-Señor-William se acercó y se inclinó frente a el.
El señor abrió los ojos y tosió.
-Ania. Búscala- susurro
-No hable por favor-pidió Ledger
-Ania...Chara
El hombre lloro. Pronto dejo de respirar. Ledger se asusto.
Lo cargo sobre su hombro. Camino hacia su cabaña.
-No estas muerto-comentó Ledger
Puso sus manos sobre el pecho del hombre. Entonces el hombre volvio a respirar, tosió.
-¿Qué has hecho?-cuestiono el hombre
-Salvar su vida-anuncio Ledger
-No. Tenia que morir.
Ledger lo miro confundido
-Yo no soy humano. Ni tu tampoco-comento
-Yo si soy humano
-No. ¿Crees que lo que acabas de hacer puede hacerlo cualquiera?
Ledger se sento frente a la chimenea.
-Casi muero-comentó Will
-Y todo por ser tu-asevero el hombre
-¿Quién eres? ¿Por qué estoy hablando contigo?

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