Comunistas vs Crepypastas

9. Problemas en el pueblo

Los Creepys, tras haber escapado por poco del General Tashlinkov, siguieron caminando por el bosque, hasta que vieron humo a lo lejos.

Red: Ha de ser un pueblo

Bloody: Sí, ahí encontraremos algo de comer, duelen las tripas del hambre

Clock: Pero es de día, si vamos la policía nos matara antes de acercarnos.

Angel: Ira aquel que parezca más humano

Toby: Bloody te toca a tí

Bloody: ¿Por qué?

Toby: Por que no creo que una albina, un chico gris, una de ojos negros, una que tiene un reloj en la cara, una enfermera de dos metros y medio y un hombre con la cara bicolor pasen desapercibidos. 

Bloody: Pero tú te ves normal, así que vendrás conmigo

Así Bloody se quito la máscara y su bata azul, mientras Toby se quito los lentes y sus hachas

Clock: Ten Toby (Le da un cuchillo) para que te cuides si pasa algo.

Toby: Gracias Clock

Bloody y Toby bajaron al pueblo mientras los demás les observaban. Llegaron al poblado, que en realidad eran alrededor de 20 o 25 casas de piedra de las que salía humo de las chimeneas. Se veían hombres cortando leña o usando trineos tirados por perros, las mujeres caminaban buscando algo que cocinar para hacer la comida y los niños jugaban con unas piedritas y con un viejo balón de cuero. La mayoría de los hombres cargaban unas monstruosas hachas y algunos tenían armas cortas, siendo un peligro constante para los chicos, los cuales se acercaban a una pequeña construcción con unas cajas con comida al frente. Cuando habían llegado se dieron cuenta que no tenían con que pagar por lo que tendrían que robar una caja y escapar antes de que los atraparan. Se acercaron lo más sigiloso posible a una caja de madera, no muy grande, la tomaron pero justo en ese momento un hombre les dijo:

Hombre: Ey, ladrones, dejen eso ahí o los hago trocitos

Los dos creepys se voltearon y vieron a un hombre vestido con un abrigo de piel de oso, botas de nieve y un gorro de cosaco. Tenia un bigote como de Stalin incluso del mismo color, además de dos ojos color avellana que en esos momentos echaban chispas debido al intento de robo

Hombre: NO ME ESCUCHARON, DEJEN LA CAJA O LOS MATO

Los demás hombres que estaban ahí se pusieron junto a su compatriota para apoyarlo.

Toby: ¿Ahora que hacemos?

Bloody: Pelear...