Amor En Desamor

Capítulo 4.

Capítulo 4.

Los siguientes 3 días, los paso realmente mal. Charlie estuvo insoportable, salvo ayer que no ha aparecido hasta las 5 am y pude dormir en paz. Me voy temprano a trabajar, es viernes y me paso todo el día allí. Estaba de mal humor, realmente, ni Alondra mi secretaria soportaba mi humor. Mi hermana aparece en mi oficina

-Hola Ann- Se sienta y la miro a través de mis lentes -Que cara traes. Que tienes? Te hace falta una alegría eh?- Me dice y le gruño -Vamos a tomarnos un café, anda, es tarde-

-No tengo ganas, Camila- Le digo revisando una carpeta con diferentes estampados.

-Pelaste con Charlie?- Pregunta.

-No es eso, ok? Necesito desconectarme- Reconozco y sirve agua, me da y agradezco

-Irte de viaje, quizás te hará bien. Sola- Me dice y afirmo de acuerdo.

-Si, eso necesito. Lo haré. Chloe estará bien aquí, mamá la cuida bien- Reconozco y afirma una vez mas.

-Sola o con Poncho? Realmente iras sola?- Alza su ceja. Me rio irónica negando.

-Pasaremos su cumpleaños juntos- Le comento y bebo agua, ella abre la boca sorprendida.

-Y que inventara con su mujer o que?

-No lo se Cami, pero nos iremos juntos unos días. Quizás lo alarguemos una semana o mas. Realmente es lo único que necesito; alejarme de Charlie, del trabajo, de su obsesión y su adicción al juego- Me agarro la cabeza.

-Esto acabara mal- Dice y la miro resignada.

-Ya no me importa como acabe todo esto, quiero hacer lo que realmente me haga feliz- Suspiro resignada.

-Me refiero a lo de Charlie, los llevará a la quiebra nuevamente y tendrá que Poncho sacar las papas del fuego como siempre- Agrega y agarra un bolígrafo. -Tiene que hacer un tratamiento...

-No me escucha ni le interesa hacerlo, es un enfermo- Suspiro -Ya no se como hacer, tampoco puedo obligarlo no?-Ella niega -Tengo que hablar con Poncho de eso... para ver como hacemos- Me apoyo en mi silla y doy vueltitas.

-Yo creo que él ya está pensando que hacer, siempre sabe como solucionar las cosas y siempre salva la empresa- Dice jugando con el bolígrafo. Me quito los lentes y afirmo mirándola pensativa. -No creo que deje que Charlie los funda otra vez, porque no será posible salvar la empresa si quiebra- Agrega.

-No me ha hablado nada aún, pero supongo que si tendrá algo en mente- Agarro mi celular y veo que tengo un mensaje, sonrío al ver su nombre. "Ya estoy en México, acabo de aterrizar. Diana piensa que llego mañana, así que quiero verte esta noche. Es posible? Te extraño." Leo y suspiro. Mi hermana exclama.

-Uff que dirá ese mensaje- Dice y agarra un caramelo de mi escritorio.

-Poncho... quiere verme- sonrío y suspiro.

-Otro suspiro. Ya puedo imaginar! Esta aquí? Y que tendré que inventar hoy?- Me carcajeo levantándome luego de apagar mi computador, voy por mi tapado.

-Que tendremos salida de hermanas- Digo y gruñe. Salimos de allí y vamos al ascensor.

Me despido de Camila en el estacionamiento, me subo al carro mientras llamo a mi madre para que vaya por Chloe a ballet. Yo me desvío a la dirección que me mandó Poncho, es fuera de la ciudad y me lleva 40 minutos llegar, me meto por una calle entre los tantos árboles que hay, miro hacia todos lados, la calle es de tierra y hay algunos baches que hacen que mi vehículo se mueva un poco. Estaciono y hago una mueca, voy a abrir la puerta cuando él me gana y la abre. Rio feliz y me ayuda a bajar.

-Hola, bella dama- Me hala y me pega a su pecho, sonrío enamorada y rodeo su cuello abrazándolo.

-Hola mi amor- le doy muchos besos -Te extrañé-Susurro. Sus brazos me tienen rodeada , sus manos me acarician la espalda. -Que es esto? Digo, que hacemos aquí?- Pregunto.

-Pues quería verte. Tu no?-Hace una mueca que me hace reír y besarlo.

-Mmm si si si tenía muchas ganas de verte, de besarte y de abrazarte-Lo hago y me levanta haciendo dar vueltas.

-Vamos adentro, hace un poco de frío- Al entrar miro maravillada el lugar. -Te gusta?

-Es hermosa- dejo mi bolso y abrigo sin dejar de mirar el interior de la casa -De quien es?

-Un amigo la tiene en venta- Dice y lo sigo, vamos a la cocina y sirve café -Creo que la comprare- Agrega. Me siento en el taburete y pone la taza frente a mi.

-Compraras ésta casa? No crees que está un poco alejada de la escuela y de tu trabajo y el de tu esposa?- Bebo café.

-Si está lejos, pero me gusta que esté alejada, es un lugar bastante escondido- Añade y sirve algo de comer. Yo no tengo hambre. Bebo un poco más y afirmo.

-Si está bonita-

-Quieres conocerla?- Afirmo y me muestra la casa luego de tomar el café. Tiene varias habitaciones, la mayoría con grandes ventanales, donde se puede ver la arbolada que rodea la casa. Me abraza por atrás y acaricio sus manos en mi vientre -Como has estado estos días?- Muerde mi oreja y sonrío por las cosquillas.

-Mm digamos que bien- Susurro.

-Por qué el 'digamos'?- Cuestiona y elevo los hombros.

-Necesito desconectarme de todo, de la empresa, de Charlie, de todo lo que me rodea- Explico. -Estoy un poco saturada, en cualquier momento explotare.

-Entiendo. Donde quieres ir?- Me voltea y me lleva de la mano al pequeño diván negro de la habitación principal, nos sentamos y no suelta mi mano.

-Donde sea... pero juntos. Quieres?- Él afirma y me besa.

-Arreglare todo para irnos luego del cumpleaños de mi hija, si?- Yo afirmo y suspiro. -Respira cielo- Acaricia mis mejillas.

-De lo único que no me quiero separar es de Chloé, pero no puedo llevarla..

-Puedes planear un viaje con ella, las dos solas, les hará bien- Dice y afirmo.

-Si... lo haré en algún momento- él me mira como si estuviera capturando cada facción de mi rostro. -Te amo- Lo beso -El poco tiempo que paso contigo, soy feliz. Es el único momento de paz- me abraza.

-Acabemos con todo esto Annie- Pide sujetándome de las mejillas -Acabemos con la distancia, con la clandestinidad- Yo lo miro y suspiro largo y profundo. Bajo la vista y él levanta mi rostro del mentón.

-Yo también quiero acabar con eso, quiero estar contigo sin escondernos... pero sabes lo que implica eso? Está Diana... está Charlie. Mis padres- Suspiro.

-Ya eres grande Annie, que te importe poco y nada lo que piensen. Mientras a ti te haga feliz, nada de lo demás importa. Podemos comenzar de nuevo, juntos, nuestros hijos...- Agrega. -Ellos se llevan muy bien, será confuso al principio pero imagina a Chloé y Cata... ellas se adoran, les encantará ser hermanitas- Dice y lo miro sonriendo, le hago una mueca y afirma -Pensemos por una vez en nosotros, no en quién nos rodea- Me da un beso y suspiro largo -Si?- Yo afirmo, y lo abrazo. Me lleno de su olor y su calor, de todo él. Cada día deseaba más que pudiéramos afrontar a todos y todo, y vivir nuestro amor por fin libres.

Por la noche debo irme, me despido de él con muchos besos -Mañana nos veremos en la fiesta de tu hija- Le digo y afirma -Luego nos vamos de viaje- Reimos -Te amo mi amor.

-Yo mas mi cielo. Conduce con cuidado si?- me pide y afirmo. Finalmente me voy. Al llegar a casa Charlie no está, Chloe tampoco, llamo a mi madre para que la traiga, mientras me doy una ducha relajante y pienso en lo que voy a hacer.

Mamá trae a Chloe ya bañada, además ya había cenado. Mientras la peino en la cama, ella habla conmigo.

-Hija... te gustaria que nos mudaramos a otra casa?- Ella juega con su muñeca mientras cepillo su rubio cabello con cuidado.

-Con papá?-Pregunta y suspiro.

-Sin papá, solo tú y yo- Explico.

-Mmm si- Dice y me sorprendo -A un castillo de princesas?-Pregunta entusiasmada y me rio negando.

-A una bonita casa- Explico -Podemos convertirla en un pequeño castillo- Aseguro.

-Y papá se quedará aquí?-Cuestiona.

-Si- Susurro y hago que me mire -Yo ya no quieren vivir en la misma casa que tu papá, mi amor- Le digo

-Y por que? Papito te trata mal?-

-No- Niego. -Por que lo dices?

-Papá ya no nos quiere- Dice y suspiro.

-Si te quiere amor..

-Y a ti?- Sigue con sus preguntas.

-Si me quiere- Digo para no hablar mal de su papá, es pequeña para entender ciertas cosas.

-Escuche a papá decir que no te quiere más- Dice mirandome con esos ojitos azules -Y también me dijo que tú eres mala, que nos quieres separar... Tu no eres mala,verdad mamita?-Cuestiona y suspiro conteniendo la rabia. Charlie me escucharía.