La biblioteca de mi abuelo

Capítulo 2

Todo andaba bien, pero un día mientras estaba leyendo “Orgullo y Prejuicio” de Jane Austen, el abuelo empezó a toser, intento pararse pero simplemente se desvaneció frente a mis ojos. Yo estaba congelada y lo único que se me ocurrió hacer fue gritar llamando a la abuela. Esa fue la única vez que vi que a mi abuela con miedo. Llamó a una ambulancia y rápidamente llegaron los paramédicos. Me sacaron de la biblioteca y se llevaron a mi abuelo en una camilla y totalmente inconsciente.
Cuando mamá llegó, fuimos directamente al hospital. Ahí la abuela esperaba angustiada la opinión de los doctores. En ese momento todos rogábamos que mi abuelito este bien y solo haya sido una descompensación. Él estuvo inconsciente durante días y los doctores todavía no podían descubrir que tenia mi abuelito y cual era la razón por la que todavía no lograba despertar. Ese fue solo el comienzo de todo.
Gracias a Dios, después de más de una semana de estar inconsciente, mi abuelito despertó. Estaba sumamente pálido, yo creo que si lo comparaba con una hoja de papel no se veía la diferencia, estaba mas flaco de lo que ya era y tenia una mirada perdida. No recordaba como los últimos 15 minutos que pasamos antes de que quede inconsciente así que le recordé lo que había pasado esos últimos días.
El doctor entro al cuarto con unos papeles sobre una tabla de madera, hasta ahora tengo la duda de si esos papeles eran los resultados de los análisis o eran jeroglíficos. Durante un momento revisaron a mi abuelo y después me hicieron salir del cuarto. Estuvieron hablando durante unos 20 minutos y me acerqué a la puerta para escuchar lo que decían pero no logre escuchar nada claro, solo murmullos.
Abrieron la puerta del cuarto, salió el doctor con la cabeza agachada y escuche sollozos saliendo del cuarto. Eran mama y la abuela, en ese momento supe que algo no andaba bien ahí, la abuela no lloraba porque sí. De inmediato les pregunte que pasaba, pero nadie pudo responder, solamente lloraron más y más.