005

66 5 0
                                    

El viaje había sido largo y cansado. Casi pierde el tren que la llevaría a su destino y con él, las esperanzas de llegar lo más rápido posible. No había visto a sus padres en un tiempo y realmente los extrañaba, junto con la vida provinciana y los recuerdos que había hecho allí. Mas había algo en su mente que le impedía disfrutar totalmente su llegada a su tierra natal y era aquel suceso antes de partir a la estación.

JENNIE

Él se separó rápidamente, dejándome sin nada, otra vez. Me veía con ojos asustados, siento una pequeña culpa al haber causado esa mirada que ahora me dirigía, lo que la agrandaba era el hecho que no lo había hecho por amor, sino por comprobar lo que sentía. No sé si me puedan entender pero antes no sabía claramente qué era lo que sentía, pero ahora creo saberlo.

-Discúlpame, creo que fui un poco precipitada - dije - pero, estoy siendo honesta contigo, es lo que realmente siento. Quizá para ti puede ser un poco apresurado, pero... me gustas y siempre lo has hecho desde la primera vez que te vi, supe que sentía algo especial por ti. Ahora no espero que me aceptes, por ahora solo me iré ... pero haré todo lo posible para tenerte Min.

Su expresión no había cambiado mucho. Me levanté tranquilamente y dejé mis palabras en el aire, espero que pueda tenerlas en cuenta, no me rendiré tan fácil.

-Espera.. - me detuve de inmediato al escucharlo y caminó hacia mí - no te detendré, pero por favor, no quiero que te sientas mal si no logro aceptar tus sentimientos hacia mí... te deseo lo mejor.

-Muchas gracias, no me rendiré tan pronto, después de todo soy una Kim - dije sonriendo a lo que el respondió con la misma alegría en el rostro. Me di media vuelta hacia mi cuarto, un poco más tranquila por sus palabras. Es cierto lo que le dije y ahora es consiente de mi amor, lucharé por él.

Finalmente, se encuentra frente aquella puerta, un poco desgastada por el viento y el tiempo. Toca dos veces antes que un hombre mayor con rasgos parecidos a los de ella abre la puerta y la recibe con brazos abiertos. Ella corresponde aquella muestra de afecto y ambos entran a la humilde morada, hogar dulce hogar.

Luego de una pequeña conversación acerca de los acontecimientos más importantes que habían sucedido antes de su llegada (cabe mencionar que sus padres tenían teléfonos celulares que Jennie les había comprado, sin embargo a pesar de las lecciones que ella misma les había dado, a veces no podían usarlos bien y preferían hablar con ella en persona) la hija le pregunta a su padre por la salud de su madre, ya que, en la llamada sonaba un poco preocupado. Él le respondió que los médicos ya la habían estabilizado, ya estaba mejor.

- Entonces padre, ¿Solo era una pequeña gripe?

-Hija...la verdad es que...

YOONGI

Hoy se cumplía un mes desde la primera vez que vio en su oficina aquel muchacho que salvó en la autopista. A veces pasaban por su mente aquellos labios gruesos y la agilidad con que las palabras salían de ellos, y no solo de ellos sino de su habilidad en el trabajo: durante los días de prueba se había desempeñado tan bien que sobrepasó a todos los demás pasantes y obtuvo el puesto al quinto día. Hablando de nuestro alfa, aunque le cueste aceptarlo, ha caído casi por completo ante aquel omega, según él, el más perfecto de todos.

-Señor Min, la señorita de J&K Company no ha dejado de llamar desde hace media hora, es muy insistente ¿Qué hago?

-Pásame con ella - otro dolor de cabeza, a veces pueden ser peor que los de las operadoras telefónicas o los que te ofrecen tarjetas por ser un buen usuario, pero no puedo comparar el capitalismo con mi trabajo, aunque pensandolo bien, es básicamente lo mismo.

-No...está bien...gracias por su propuesta, pero ya hablamos de esto antes...hasta luego

Todo el día pasó igual, sin ninguna novedad, aburrido. Jimin es bastante eficiente, mucho diría yo. Él se esfuerza tanto como si la propia empresa dependiera de él, aún así él es una parte importante y valoro mucho que valore su puesto.

JIMIN

Ya me estresé. Sé que puede parecer que me gusta lo que hago, en sí es cierto pero nunca había pensado el hecho de que puede ser un poco aburrido, más aún cuando debo llegar a casa lo más pronto posible a estudiar para el exámen de mañana. Ojalá ese "todo esfuerzo tiene su recompensa" sea realmente cierto.

Y déjenme decirles que sí era cierto. Me encontraba acomodando mis cosas, ya que, precisamente hoy todo se encontraba muy alborotado: habíamos terminado de establecernos en Nueva York, una de las sucursales más importantes para la empresa luego de años de trabajo. El punto es, que mi hermoso jefe se me había acercado para ayudarme un poco, segur le daría lastima verme rodeado de papeles en el suelo y máquinas sin apagar por completo, todo un desorden.

-¿Qué te pareció tu primer mes, Park? - ¿Ya había pasado un mes? - este ha sido uno de los más productivos que hemos tenido en todo el años, sobre todo lo de Nueva York.

-Para ser sincero, al principio no fue muy fácil, pero me pude acostumbrar, por suerte.

-Bueno, eso es lo que se espera de cada uno de mis empleados ... bueno, Park ... - ¿Si, Min?

-Que...tengas un buen fin de semana Jimin, gracias por tu trabajo - después de una leve reverencia se fue. A todo esto, me quedé con dos cosas: iba a decirme algo y ... ¿Por qué no lo hizo?.

Mi  omega - YoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora