Han pasado solamente, creo que cuatro días que se fue Hyungwon de viaje con su familia. Y yo ya no podía resistir mas.
Estaba muy nervioso y con muchas ganas de sexo.
No puedo mas, si alguna vez decido dejar esta adicción voy a pasarlo muy mal ahora mismo no quiero, y estoy por vestirme y salir a la calle, en busca de una mujer que quiera tener sexo, y si puede ser sin compromisos.
Pero eso es muy difícil de encontrar, y mas de dia. Y también no quiero conseguir ninguna enfermedad por una mala decisión.
Hyungwon tiene razón al hacerme en su momento y mantener aquella promesa, que solo relaciones estables y que la otra persona este limpia. Y el trato con él... no me gustaba, pero a la vez si.
Satisfacía mis necesidades, como nadie lo ha hecho y solamente con su boca, he de añadir. Pero era mi amigo de toda la vida. Joder. No puedo hacer esto mas con él.
Además, de que por la noches estos días he soñado con él y no de una manera amistosa. Todos mis sueños eran sucios.
Habia hablado por teléfono de vez en cuando con Hyungwon, al menos una vez al dia y me contaba lo que había hecho y lo agobiado que estaba con sus padres, que no le dejaban hacer nada. Si fuera por sus padres dejaban encerrado a Hyungwon en el hotel.
Siempre se queja de que no sale, pero cuando puede no le deja hacer nada de lo que él quiere. Solo hace lo que le ordena su madre o su padre.
Yo en cambio le decía que estaba bien. Bastante tranquilo. Pero era mentira, si le contara que todas las noches sueño con su boca... dejaría de ser mi amigo seguro y no lo veria mas, no puedo soportar eso.
-Ya no puedo seguir aquí-grite.
Me incorpore del sofá, donde me encontraba echado, intentando sofocar mis necesidades, pero mi mano no sirve, ya me he acostumbrado a otra cosa. Y creo que pronto tampoco me será suficiente.
Me levante y fui a mi habitación para vestirme y salir a la calle.
Tenia que distraerme, ¿y que mejor que ir a la universidad a entregar unos papeles?
Tenia que entregar estos documentos antes de que acaben las pequeñas vacaciones.
No tenia ganas de hacer esto, aun tenia un par de días para entregarlos, pero necesitaba que me diera el airre de la calle y despejarme.
Me puse mis auriculares y me fui a la universidad.'
El camino se me hizo corto gracias a la música, pude distraerme y pensar en otras cosas.
Entregue los malditos documentos y me dispuse a volver a mi casa.
-Wonho-escuche que me llamaban, pero no estaba seguro a causa de la música.
Me quite los auriculares y me gire.
-Wonho-me saludo un compañero de mi clase- hace tiempo que no te vemos por aquí.
-Si, he estado ocupado-¿para que iba a venir aquí habiendo vacaciones?
-Ocupado-dijo insinuando y levantando las cejas-¿has conseguido alguna otra chica? Nos hemos enterado que lo dejaste con tu novia.
Que cotillas son todos. No tiene vida.
-Bueno, no exactamente.
-Que bien-lo mire extrañado- esta noche hay una fiesta en mi casa. Estas invitado. Puedes traer a quien quieras. O a nadie, allí habrá muchas chicas donde elegir.
Me quede pensando un momento. Si consigo una chica en una fiesta...
-No creo que pueda ir-decidi al final, mi lado ético gano, el depravado se enojo por mi elección. Pero solo saber que traicionaría la promesa de Hyungwon, me hizo retroceder. Tengo que buscar una relación seria, no una relación de una sola noche.
-Bueno, piénsatelo. Estas invitado-dijo antes de despedirse y marcharse.
Yo volvi a mi casa, y durante todo mi camino pensando si he hecho la elección correcta. Yo me conozco si voy a una fiesta me descontrolo, seguro, y mas si hay alcohol de por medio.
Llegue a mi casa, tirándome al sofá. Al final el salir de casa no había sido una buena idea, había vuelto peor y con una tentación muy grande.
Llamaron al timbre, pero lo ignore. Seguro es alguien que quiere venderme algo.
Pero siguió insistiendo.
-Maldita sea.
Me levante del sofá y abri la puerta muy enfadado.
Pero cambie mi expresión a encontrarme a una chica en mi puerta.
