Hyungwon.
Me impresionaba la capacidad de volver a la normalidad que habíamos adoptado.
Terminamos de ver la película y mire la hora de mi teléfono. Es muy tarde para mi.
-Debo irme-le dije a Wonho mientras me levantaba del sofá.
-¿Ya? Aun es pronto, solo son las ocho y media.
-Si, pero como no este a las nueve, no podre entrar en casa.
-¿No te dejan estar fuera mas tarde? Ya vas a la universidad, bueno ya vamos a acabar, ya hace unos años que eres mayor de edad.
-Si, prefiero no arriesgarme.
-Llamalos y diles que te vas a quedar a dormir en casa de un amigo.-me propuso.
Le mire sorprendido, ¿dormir?
-Puedo a llamar a mi madre. Pero se que me contestara.
-¿Que?
-Pues... ¿con que amigo te vas a quedar a dormir?-dije intentando imitar su voz- si no tienes ningún amigo.
-Por dios, me tienes a mi. Yo soy tu amigo.
-Si, pero le digo que me voy a quedar a dormir contigo y me echa de casa, al igual si ahora le digo que me voy con Shownu.
Wonho suspiro resignado, parecía que quería que me quedara a dormir. Espero que no tenga ganas de mas.
-¿Tienes ganas de...-no se porque no me atrevia a decirlo.
-¿Que?-pregunto confundido- no, no. Si tengo ganas ya usare mi mano-respondio rápidamente.
Yo sonreí un poco incomodo.
-Bueno, entonces me voy.- dije para irme hacia la puerta.
-Espera te acompaño.
-No hace falta, tampoco quiero que me vea mi madre contigo.
No me atrevia si me veía con él me prohibiera salir de nuevo a la calle. No entiendo porque lo odia tanto, a ella no le afecta su adicción.
-No quiero que camines de noche hasta tu casa. Así que te acompaño.
No me dio elección, así que cerro su puerta y estuvimos caminado hacia su casa en un silencio agradable.
Creo que deberíamos hablar del tema, de nuestro extraño trato, así creo que nos dará menos vergüenza hablarlo, o que él me lo pida.
-Sabes-empecé, aunque dudaba un poco-creo que también me volveré adicto al sexo si seguimos a este ritmo-bromee.
-Si te vuelves adicto por mi culpa, entonces si tendrá motivos tu madre para odiarme-me siguió también la broma.
Ambos nos reímos ya que tenia mucha razón.
-No te vuelvas adicto por mi culpa. Pero si lo haces, también debes cumplir nuestra promesa. No te acostaras con nadie, a menos que sea una pareja estable-recito.
-Bueno... para eso tenemos nuestro trato.
Seguimos caminando, hasta que nos paramos unas casas antes de llegar a la mía, por precaución.
-Hablando en serio-dijo Wonho- no hace falta que te hagas adicto al sexo. Tienes suficiente con tu propia adicción.
Lo mire extrañado.
-¿Que adicción?
-El primer paso es averiguar que es. Y no puedo decírtelo, porque lo negaras y no quiero pelear. Solo espero que te des cuenta y lo aceptes. Ya tu decide si quieres vivir con él o no.
Seguía extrañado, pero no pregunte. ¿Yo también tenia una adicción? ¿Cómo no me había dado cuenta?
-Hasta mañana, Hyungwon-se despidió.
Yo también me despedí con la mano y me dirigi a mi casa pensando en sus palabras.
