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Eres un celoso de primera.

Yo seguía dormido...o algo así.

—Daddy.

—¿Uhm...?

—¿Por qué tu teléfono tiene contraseña?

Me levante de golpe y lo miré.

—¿Qué mi que qué? —dije tallándome los ojos.

Jimmy me extendió el teléfono con un puchero en su rostro.

—Tiene contraseña, lo quería usar.

—¿Para qué?

Se quedo callado pensando en que contestar.

—Quiero jugar...

—Bebé, mi teléfono no tiene juegos.

Lo que sé de ti.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora