Los rayos del sol me despertaron, abrí los ojos esperando ver a Jay, quién no estaba en su cama y tampoco en la mía. Ignoré ese hecho y me dirigí a mi armario para vestirme, después de todo hoy iríamos a la escuela, gracias Jay.
Después de vestirme caminé hasta la puerta, pero antes de salir decidí mirarme al espejo una vez más, creo que me veo bien, me puse un short negro, una camisa blanca con adornos negros en las mangas largas y un chaleco negro con peluche en la parte del cuello y un poco de color rojo, así no pareceré un chico gótico.
Salí con algo de prisa y comencé a caminar.
Evie
Nos vemos en el jardín principal de la escuela, ahí Dough nos dirá dónde es nuestra primera clase.Hice caso a la indicación de Evie y me dirigí para allá, de camino recibí un nuevo mensaje de Jay disculpándose por no estar en la habitación esta mañana, pero cuando iba a contestar choqué con alguien frente a mí, provocando que ambos cayéramos.
–Cuidado viejo. Dije sobando mi cabeza.
–¡Carlos! Buenos días, perdona, no me fije por dónde iba. ¿Estás bien? Me sonrió con esa sonrisa tonta y principesca.
–Claro, todo bien. Me dirijo al jardín principal de la escuela, pero no recuerdo que pasillo es...
–Déjame llevarte. Me dijo sonriendo.
–¿Gracias? Dije confundido, aquí en Audradon no sé si a los chicos también se les dice gracias.Caminamos juntos unos momentos, quería preguntarle alguna cosa que nos ayudara con el asunto de la varita, pero fuimos interrumpidos por Audry y un chico rubio frente a nosotros.
–Buenos días Beninú. Sonrió la chica.
–Hola Audry. Chad. Saludó cordialmente.
–Necesito tu ayuda, mi casillero no abre desde ayer. Ahora Benibú. Dijo con un puchero.
–Debo irme Ben, gracias. Dije "tímido".
–Por nada Carlos, disculpa. Sonrió y se fue con su novia.Caminé algo apresurado para ir con los chicos y ahí estaban, esperándome, tan solo faltaba yo.
–Estuvimos esperándote por siglos Carlos. Dijo Evie.
–Bueno, ahora a clases. Sonrió Dough.Después de una clase llena de aburrimiento donde el hada madrina nos "enseñó" que si un bebé llora debemos darle un biberón y que si encontramos veneno lo llevemos a las autoridades, aunque Jay y yo peleamos porque yo quise decir tal respuesta, pero no me dejó hacerlo, me molesté con él, aunque me guste no pude evitar sentirme un tonto gracias a él.
–Chicos... ¡Chicos!
Jay y yo miramos al hada madrina, quién nos dijo que utilizáramos nuestras energías en el campo de Tournée.Ambos caminamos al dichoso campo, de camino al lugar Jay me miraba, sabía que yo no estaba contento con él.
–¿Carlos? Mira...
–No Jay. Dije interrumpiéndolo.
–Sé que hice mal.
–¿Tú crees? Sonreí irónico.
–Déjame compensarte, podemos salir hoy.
–Promete que si es un deporte intenso o de contacto me sacarás de ahí de inmediato. Dije algo asustado.
–Sí, claro que sí. Dijo abrazándome por los hombros.
–Y si no podemos evitar que juegue, cuídame la espalda.
–Trato. Sonrió.Luego de llegar a los vestidores y que nos dieran un uniforme para entrenar salí por una de las puertas. Entré a la cancha y me coloqué en una zona extraña de color rojo y blanco (me recordó a mi mamá).
–¡Eeey tú! ¡Niño perdido! Ponte el casco, rápido con las dos manos. Escuché al hombre de color que parecía ser el entrenador.
Comenzó el partido y Jay comenzó a arrasar con todos los jugadores, hasta los de su propio equipo, me asusté cuando lo vi frente a mi.
–¡Jay! Soy yo, Carlos. Recuerda tu promesa. Dije cubriendo mi rostro.
Me tiré al suelo y me cubrí con mi escudo, cosa que utilizó para impulsarse, por último empujó a Ben y anotó.
Al acercarnos esperaba que el entrenador le dijera algo por su comportamiento.
–¿Qué hiciste ahí? Te diré que fue, talento crudo. Ven a mi oficina más tarde, te mostraré algo que no conocías, se llama reglamento. Dijo el entrenador entusiasmado.– Quizá el Tenis te vaya bien. Dijo con algo de pena, a los cuál Jay rió sin importarle mis sentimientos.
–Yo lo ayudaré. Dijo detrás de mí el príncipe.Caminamos todos de vuelta a la cancha, pero alcancé a Ben para agradecerle.
–¡Ben! Oye... Gracias, nadie hubiera querido ayudarme, ni siquiera Jay, es un tonto. Sonreí con timidez, pero esta vez era timidez real.
–Por nada Carlos, al término del entrenamiento hablamos para ponernos de acuerdo, ¿okay?
–Sí, gracias.Al terminar el entrenamiento me dirigí a la ducha y me duché rápidamente para evitar a los otros chicos. Cuando iba a mi casillero el chico rubio, creo que su nombre es Chad, pasó al lado mío y me dio un golpe con el hombre.
–¿Te importa? Dijo el chico.
–Disculpa chico. Dije tratando de inclinarme para tomar mi barra de jabón, pero el chico me detuvo tomándome fuerte del brazo.
–Aquí no es la isla amigo... Aquí hay jerarquía y aquí... Un villano vale menos que nada, a la próxima ten cuidado y... Inclinate cuando un príncipe pase. Sonrió con soberbia.Me fui sin decir nada, un poco más y no hubiera aguantado las lágrimas frente a él, soy un poco sensible y no quería que lo usara en mi contra.
Al salir con mi ropa puesta caminé tratando de evitar a ese chico Chad y sobre todo a Jay, no quería verlo ni en pintura.
–Heey, Carlos. Hola. Sonrió Ben.
–Hola. Sonreí a medias e hice una reverencia.
–¿Qué pasa? ¿Por qué hiciste eso? ¿Cómo va tu primer día?
–Creo que Bien...
–¿Pasó algo? ¿Alguien te molestó?
–No pasa nada, después de todo quién le creería a un villano que está siendo molestado?
–Yo, yo te creeré... Dime, ¿fue Jay? ¿Te dijo algo? ¿Te hizo algo?
–Sé que Jay parece malo... Pero es mejor que varias personas aquí. Dije sin mirar al príncipe a los ojos.
–Entonces Dime quién lo hizo...
–Creo que su nombre es Chad, es un chico rubio... Es él. Dijo señalando al chico que iba caminando con Audry.
–Déjame arreglar esto. ¿Sí? ¡Chad!
–Ben, no... Susurré.
–Ben, hola...
Ben miró mi cara y comprendió que no quería tocar el tema.
–¿Cómo va tu día? ¿Conociste a Carlos? Es nuevo aquí, espero te lleves bien con él y con Jay... Bueno Jay es un poco más duro, pero Carlos y tú pueden llevarse muy bien. Sonrió Ben.
–Claro... Te conocí en las duchas hoy, ¿no? Te di tu barra de jabón.
–Sí, gracias de nuevo.
–Bien, nos alcanzas, Audry va conmigo.
–Claro... Mi casillero y el de ustedes están cerca, ¿nos vamos? Me dijo sonriendo.Me di cuenta de la presencia de Jay detrás de nosotros, así que decidí vengarme de él porque no fue solo una vez, fueron dos veces las que me hizo quedar como tonto.
–Claro Ben, gracias. Dije poniendo mi mano en su hombro. Me giré un poco y me despedí falsamente de Jay, para que se diera cuenta de que lo había visto pero no quería ir con él.
****
Holaaa! Aquí otro capítulo, no sé si si voy a publicar el próximo capítulo seguido de este o lo guardo pare que se queden así😂 bromeo, si ya lo tengo lo público junto a este, que por cierto pensé que lo publicaría después, pero como ya lo tengo pues no quise guardarlo, aunque lo publiqué el mismo día que el primer capítulo.Adioooos👑
ESTÁS LEYENDO
Space Bewteen ♥ Benlos (BenxCarlos)
FanfictionCarlos estaba enamorado de Jay desde que eran apenas unos chicos pubertos, pero cuando comienza su amistad con Ben, el príncipe bestia, se enfrenta a un conflicto amoroso donde debe decidir si quiere estar con Jay, el chico con el que siempre ha con...