the legend of zelda Four Worlds

Capítulo 5: Monstruos a la vista.

  Cristal deja a Link en el suelo con mucho cuidado, tratando de no hacerle otro glope de los que ya tenía, cuando se levanta observa que Link estaba durmiendo con una cara tan angelical, se le acerca para darle un beso tierno en la mejilla, pero se detiene y se aleja con el pensamiento de "noce si es él, mejor espero".

  En ese momento Link comienza a temblar por el frío que hacía en la cueva, Cristal no se había percatado del frío asi que salió en busca de ramitas y yesca para hacer una fogata, al menos lo quería mantenerle caliente.

   Cuando salió se encontró que la lluvia seguía cayendo, pero esta había disminuido. Era de noche pero podía ver perfectamente, por que la luz de la luna ilumina a través de las espesas nubes de lluvia, decidio buscar los materiales convertida en lobo así que dijo unas palabras y de su mano salió  la trifuersa.

   Se transformó en un lobo precioso, esta llevaba unas figuras plasmadas por el color de su pelaje el cual era de un color negro azabache, que al llegar a sus patas se transformaba en un color tan blanco como la nieve pura, sus ojos ya no eran color ambar sino el mismo color de ojos de Link, azul cielo.

  Comenzó a olfatear la atmosfera y dijo en su mente "La yesca esta a la vuelta de la esquina y las ramitas por todas partes, umm lo que huelo es conejo y son dos ya tengo la cena para que Link recupere sus energías, bueno en marcha" Se fue siguiendo el olor de los conejos, porque temía que estos se fueran, ademas dudaba que la yesca y las ramitas tendrian vida propia.

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  Cuando por fin llega a la localización de los conejos, se sorprende al observar que el claro en donde se suponía que estarían estos era tan hermoso, los árboles eran tan frondosos que se perdían en el cielo, el lago era tan cristalino que una mota de polvo se reflejaba con tanta facilidad.

   Se detuvo al observar dichos conejos durmiendo a orillas del lago tan placidamente, Cristal se acercó a ellos sigilosamente tratando de no hacer ruido para no asustarlos y sin basilar se les abalanzó encima matandolos de un solo zarpazo con sus garra, agarró al primero por el cuello y se lo puso en la espalda, y al siguiente le hizo el mismo trato.

"En el camino de regreso conseguiré la yesca y las ramitas, pero al menos tengo la comida" se dijo a si misma retomando el camino de regreso hacia la cueva.

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Llegando ya a la cueva, Cristal llevaba una pinta muy peculiar: en la espalda llevaba dos conejos muertos, en la cola llevaba yesca era una cantidad necesaria para hacer la fogata y en el hocico no más que un monton de ramitas.

  En la cabeza de Cristal se veia como un carrito de compra y venta, para distraerse cantaba constantemente en su cabeza:

"★Vendo conejo fresco,
para esos días de parrilla,
a y también el quit completo,
de yesca y ramitas,
para hacer una fogata completa★"

  Y por fin, dentro de la cueva Cristal se despoja de todos los objetos que adquirió y se transforma de nuevo en yokai, ya otra vez con manos, comienza a armar la fogata, elije un número determinado de ramitas y los coloca en perfecta armonía, la yesca la colocó en el medio y con dos rocas las chocó hasta crear chispa y encender la fogata.

  Agarra uno de los conejos y lo coloca en una rama y empieza a cocinarlo, hasta que escucha "¿Por qué te tomastes las molestias? ¿Si tu eres un monstruo?" Link, por fin había despertado pero permanecía inmovil en la posición que le dejó Cristal.

Cristal se voltea y tratando de buscar las palabras correctas para no causar malentendidos le dice "Yo te salvé de unos monstruos que, yo supongo al tener tanta sangre humana por todo su cuerpo deben haber echo cosas atroces y ademas ubieras muerto en sus manos".