El jirafo presumido

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En el camino a la escuela estaba una egoísta y creída jirafa que estaba entrando a la escuela de forma tan presumida que los demás animales solo contemplaron su extraña forma de ser; y es que por ser tan creída y egoísta no podía querer ni ser querida.

Una vez que entraron al salón, empezó la clase de inglés y todos se sentaron en sus lugares; la jirafa, como siempre, se sentaba sola, pues nadie quería estar con alguien así.

A parte de la jirafa, estaban otros animales, como: la Iguana, el Elefante, la Mona, el Xoloitzcuincle, el Dragón, la miss Toro, el Koala y unas amigas inseparables: Rodegunda, Raquildis, Rosamunda y Raingarda.
Mientras en otros salones estaban animales como el Oso, el Bicho, la Vaquita y otros más.

Pero esta historia no se trata de otros animales, si no de la jirafa.
Así que ahí va la historia...

Después de un día en la escuela de mucho trabajo, la jirafito se fue a su casa con su mochila llena de libros, pues la tarea que tenía era mucha. Así que se apuró y comió rápidamente su ensalada de hojas de árboles recién enjuagada y bastante fresca. Lo que dejaron de tarea era: hacer unas páginas de unos cuantos libros y llevar cinco fichas de trabajo con rayas.

Una vez que terminó su tarea, se fue a nadar en su lujosa y privada alberca. Sin amigos, sin amigas, sin personas con las que el pudiera hablar. Se sentía un poco solo y con un gran vacío.

Por otra parte, tenía mucho dinero y gozaba de muchos lujos que la mayoría de los animales no podían poseer; aún así nadie lo quería.

Luego de nadar un rato, salió de la alberca y tomó un buen baño en su jacuzzi y mientras se bañaba, estaba pensando en algo como: "¿por qué razón es que me siento tan solo si lo tengo casi todo en la vida? Y aparte tengo mucho dinero".

En eso le gritó su mamá:

—¡Hijo apúrate que se hace tarde! Ya va a ser hora de dormir.

Eso interrumpió los pensamientos de la jirafa e hizo que se apurara.

Cuando salió de bañarse, se vistió y se fue a cenar con su mamá y le platicó a cerca de como fue su día en la escuela.
Platicaron un rato y después la mamá jirafa llevó a su hijito al cuarto y le dió un beso de buenas noches.

El jirafito se durmió rápido y soñó algo muy raro...

La jirafa que aprendió a amarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora