La casa de Craig Tucker

1.3K 137 90
                                    

- Hmm... no sé, no me termina de convencer. A ver, date la vuelta. - Dijo Red mirándome de arriba a abajo inclinando la cabeza de lado.

- ¡Red! aahg ya te dije que no hace falta que me arregle demasiado. Sólo vamos a ir a charlar a su casa. Nada más. - Respondí mientras caminaba hacia la cocina. - Desayunemos algo, muero de hambre. - Ella me miró molesta - E-es que así estoy bien Red, gracias por ayudarme a verme "lindo" para hoy. Aunque no te lo pedí realmente - Comencé a reír. En realidad era cierto, no le había pedido a Red que me ayudará en nada, ni siquiera la había invitado a venir a mi casa. Apenas terminé de mandarle un whatsapp contándole sobre lo ocurrido ayer con Craig, ella cayó como un relámpago en mi hogar. 

Entre risas ella agregó - Si me dices que sólo piensan hablar, explícame por qué razón te has puesto tu mejor ropa interior. ¡Oh si Tweeky bebé! Me di cuenta, pervertido. - Utilizando sus manos bajó un poco mi pantalón dejando ver mi ropa interior. 

- ¡Ahhhg! Red, no hagas eso ¡Cristo! - Mi rostro comenzó a arder por la vergüenza - Eh...yo... yo... M-me tuve que colocar estos bóxer porque los gnomos robaron toda mi ropa interior y, ahhg, es la única prenda que no se llevaron, malditos ladrones. - Mentí -

- Si, si, claro. Los gnomos, Tweek. Y yo soy Lady Gaga - Bromeó. 

Organizamos el desayuno juntos, ella unto mermelada en las tostadas mientras que yo preparé café para ambos. Esta escena me hizo recordar a cuando era más pequeño y ayudaba a mi mamá a cocinar los domingos, era algo que me gratificaba mucho. Sobre todo me encantaba hacer postres con ella, preparábamos de todo: tartas de chocolate, tiramisú, muffins, galletas... Es gracias a mi madre que hoy en día sé preparar una amplia variedad de comidas, aunque, sin querer sonar engreído, considero que lo que mejor preparo son postres.

Terminamos de desayunar y ambos nos quedamos conversando hasta que el reloj nos corrió de la zona de confort, era hora de ir a trabajar. No voy a darles muchas vueltas, la tarde transcurrió normalmente. Llegamos a la institución educativa, nos dirigimos a la sala de profesores y platicamos con nuestros compañeros que ya se encontraban allí. Luego, en su correspondiente horario, cada uno ingresó a su aula para comenzar la jornada laboral. Di mi clase, como de costumbre, entre gritos, insultos y papeles empapados en saliva. Al terminar las clases me encontré con Red en la puerta de salida, ella me dio un fuerte abrazo, me deseó mucha suerte y luego, se despidió de mi y se fue. Espere aproximadamente unos 5 minutos hasta que Craig se hizo presente. Me pidió disculpas por haberme hecho esperar y se justificó diciendo que el Director Pc lo había retenido en los pasillos para hablar con él. 

- Ahhg ¿Pasó algo malo? - Dije con preocupación.

- Sólo me preguntó si ya me pude adaptar al grupo de alumnos y qué es lo que he estado trabajando con ellos. Y bueno le expliqué. Trate de hacerlo lo más rápido posible, temía que pensarás que me había olvidado que nos veríamos y te fueras - Comunicó y me sonrió. 

Craig me explicó que su casa no se encuentra muy apartada de la escuela y comenzamos a caminar en dirección a ella.  Durante el trayecto conversamos sobre los alumnos y un poco sobre los proyectos que organizó el Director Pc para la celebración del día de la independencia. Una vez que llegamos al destino, Craig abrió la puerta y me invito a ingresar muy amablemente. Su hogar se encuentra impregnado de su aroma. Él me ofreció café y yo asentí, una vez preparado, nos sentamos sobre el sofá azul situado en el centro del living. Y no se hizo esperar el primer momento incomodo de la noche, un profundo silencio invadió el lugar. Comencé a sentirme más y más nervioso, eso se hizo notar rápidamente en el aumento de la intensidad de mis tics. Yo intentaba disimularlo, dando sorbos a mi café. Craig fue el encargado de romper con ese silencio tan incómodo. 

- Tweek, lo que te dije ayer es verdad, que desde que nos besamos esa tarde en la cafetería no había podido dejar de pensar en eso. Pensé que con el paso de los días dejaría de hacerlo pero no fue así. - Dijo mientras me miraba fijamente a los ojos.

- Craig...Y-yo tampoco deje de pensar en eso... - Fui interrumpido.

- Pensé que tal vez no sería malo gratificar mis deseos de besarte. Por eso me acerque y me aventure a tocarte, al ver que no me alejabas ni ofrecías resistencia simplemente continué. Me gustó tocarte Tweek, me gusta besarte y para ser sincero, deseo hacerlo ahora mismo... - Mi corazón empezó a latir fuerte en mi pecho al oír aquello del azabache. Sentí un calor arder en mi rostro. Mis mejillas y las puntas de mis orejas se tiñeron de un tono rojizo intenso.

- C-craig.. Yo... - No llegue a completar. 

 - Al oírte decir que tienes sentimientos reales hacia mi, me asuste. Tweek, no quiero herirte. Estoy confundido, yo jamás estuve con un hombre. Es raro porque cuando te veo quiero tocarte, abrazarte y besarte. Pero no logro entenderlo y me confundo cada vez más. Es decir, sólo he estado con mujeres, jamás miré de manera romántica o con deseo a un hombre, es la primera vez que yo... - Esta vez yo fui quien lo interrumpió. 

- No te entiendo Craig ¿Me estás diciendo que te gusta besarme pero que no te gustan los hombres? Ahhhg ¡Es demasiada presión! No tiene sentido... - Mi corazón seguía latiendo rápido pero ahora sentía un dolor punzante en él. 

- Tweek lo que quiero decir es que solamente deseaba que ambos la pasáramos bien. Que si queríamos besarnos,  si queríamos tocarnos, lo hiciéramos y ya. Que disfrutáramos de estar juntos, sin compromisos y sin que nadie salga herido. Pero si sientes algo por mi... es que... no quisiera alimentar ese sentimiento... estoy confundido... ni yo mismo sé lo que siento... no entiendo qué me pasa... sólo no quiero ilusionarte. Tweek, no quiero venderte algo que no sé si podré darte... Tal vez lo mejor sea fingir que nada de esto paso. Seamos amigos...-

-  Yo si sé lo que siento, tengo muy claros mis sentimientos. Estoy enamorado de ti. Y no, no puedo ser tu amigo. Dijiste que no quieres herirme pero acabas de hacerlo... - Me levanté de manera brusca del sofá y me encamine en dirección a la entrada sin mirar hacia donde él se encontraba. Gire la perilla, abrí la puerta y agregué antes de salir - Llámame cuando decidas salir del clóset, Craig Tucker. Adiós... 

Esa noche regrese a mi hogar a paso muy lento, él no me siguió y no sé si deseaba que lo hiciera. Deje caer mis lagrimas, no me dedique a limpiarlas.  Lloré durante todo el recorrido, me dolía el pecho y una sensación de vacío se hacia presente en mi estomago. Tengo el corazón roto. Ingresé y me dirigí directamente a mi habitación, me recosté sobre mi cama y sentí mi celular vibrar dentro de mi bolsillo delantero. Era Red, ella me marco alrededor de unas 10 veces esa noche, pero no respondí sus llamadas. Lo siento amiga, lo siento Red, me siento mal...

Arte y Naturales [ Creek ♥ ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora