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- Gon ¿Qué haces? —Eres tan ingenuo Hisoka.

Un golpe llegó de lleno a su nariz ¡Ha! El payaso volvió a convertirse en Voldemort.
Unos segundos después de procesar, Hisoka se lamió los labios, y miró en mi dirección.

¿Ya entendieron? Les explicaré.

Mi nombre está prohibido. El solo decirlo es considerado pecado, y mejor que se quede así. Soy un ente bastante peculiar. Un demonio, en realidad.

La gran aura que se percibía en el lugar me atrapó. Era bastante divertido verles a todos… Bueno, hasta que me lo encontré a él.

¡Pero tranquilos! Me venganza llegaría. No se preocupen. En ello estoy.

Y ahora, el cuerpo de este enérgico niño humano, me servirá para llevarla acabo. Se me podría llamar un "lobo en piel de oveja".

La mirada de Hisoka representaba confución, y excitación. Desvié la mía con asco, pero la devolví con rapidez. No puedo bajar la guardia en una pelea con este tipo.

- ¿Vamos a divertirnos, frutita? —Apreté leve los dientes, y me dispuse a patear su rostro. Su habilidad me frenó.

- ¿Qué mierda? —Empecé a reír.

- ¿Tanto te sorprende, Hisoka? —Con una mano, corte su goma. Tanta confución es exquisita. ¡Esto es tan divertido!— ¿Tu pequeño Gon no haría eso?

- ¿Qué le hiciste a Gon? — Preguntó con un deje de rencor, y a palabras arrastradas. Reí aún más.

- ¿Al fin te das cuenta Hisoka? —El me miró con frialdad.

- No eres Gon. —Respondió. Yo sonreí.

- ¡Al fin te diste cuenta! Después de todo, no eras tan tonto. —Una carta rozó mi mejilla. Su mejilla. La sangre comenzó a brotar.

- ¿Quién eres?

- Veamos si te refresco la memoria. —Me acerqué, moviéndome tal cual Illumi, desconcentrándolo—
"Si realmente quieres que tengamos sexo la próxima, asegúrate de que nadie nos esté mirando." —Sus ojos reflejaban sorpresa. Eso no se lo esperaba para nada.

- Tú… Eras lo que Illumi veía.

- ¡Din, din! — Exclamé— Tenemos a un ganador.

- Te aplastaré —Murmuró.

- A eso vine.

~~**Aviones**~~

Apresurada llegué a buscar al chico de cabello negro, pero me era casi imposible.
No daré presentaciones. No quiero. Pero, lo que él desea, es algo que no puedo permitir.

- Illumi Zoldyck ¿Dónde mierda te metiste? —Murmuré. Y casi juré que no estaba en esta cárcel. Pero si que lo estaba.

Pasé de largo a el chico de cabello albino, que buscaba a su reciente novio. Lo siento, Killua, tú no puedes hacer nada para ayudarlo.

¡Pero me diste una gran idea! ¡Él será quien los busque! Bueno, no pierdo nada con intentarlo.

Concentré mi aura, para poder entrar en su mente. Gracias a Alá pude dejar un grabado.

"Hisoka"

Hasta que caí en cuenta de algo. ¡Illumi mataría a Gon! ¡¿Por qué soy tan burra?!

Bueno, tendré que buscar la manera para que nada le pase al niño ese. Ay, esto es muuuuucho más complicado de lo que pensé.

De pronto, volvió mi mirada hacia el Zoldyck albino.
Una pequeña gran idea acaba de aparecer.

~~**Aviones**~~

La pelea con Hisoka se hizo más larga de lo que esperaba. Aún así, no dejaba de ser divertido provocarlo.

- ¿Por qué no te rindes? — Pregunté— ¿En serio quieres dañar a Gon? —Su risa me descolocó.

- Pero… Tú no eres Gon. Pelear contra ti es mucho mejor. —Sonrió— Tu talento es infinito y absoluto, ¡Y tú! Eres el único que puede ser mi rival —Oh, no. Por favor, que no lo diga— ¡No puedo detenerme!

Un golpe fue a parar directo a su boca. Y ese, fue personal.

- Eso fue por idiota —Hisoka sonrió, y la pelea continuó. Llegaba a ser aburrido.

Hasta que sentí la presencia de otro ente.

"Ella está aquí" —Dije para mis adentros.

Miré a Hisoka, quien seguía intentado acabar conmigo.

Lástima, no lo logrará.

"Vamos niña, ve por Illumi. Ahórrame el trabajo, y yo seguiré acá."

Claramente, su intención no era ayudarme. Ni de broma. Pero, hay que disfrutar ¿No?

- ¿Sabes el por qué vine hasta ti?—Pregunté mientras lo esquivaba— No fue por tu habilidad, desde luego —Su silencio me hizo reír.— Esto no es por ti, es por ese estúpido humano, por el cual estoy amarrado a esta dimensión.

- ¿Y qué tengo que ver yo entonces? — Preguntó Hisoka. Sonreí aún más. Ya estaba por lograrlo.

- Porque, ese humano, —Pronuncié con esco, y detalladamente mis últimas palabras. — es Illumi Zoldyck. —Él solo pudo abrir de más lo ojos mientras daba mi último movimiento.

- ¡HISOKA!



¿Lo hice? ¿Realmente lo logré?

Mi júbilo no tenía comparación. Abandoné el cuerpo del humano, y miré en dirección a ellos.
Illumi sostenía a Hisoka entre sus brazos, del cuál salía sangre a montones. Gon estaba reaccionando. Petrificado al ver el cuerpo de su amigo, con un agujero en su estómago, justo del tamaño de su puño. Y, claro, el como su puño tenía la sangre de su amigo.
Desvió la mirada, y vio la del Zoldyck, quien lo veía atónito. Sacudió la cabeza, y tomó a Gon entre sus brazos, esquivando las agujas que Illumi lanzaba, e intentando no escuchar sus (para mí) exquisitos gritos de odio y tristeza.

Killua escapó con Gon.

Gon se volvió (sin siquiera saberlo) en asesino.

Illumi estaba viendo el fin de quien más quería.

Hisoka, pronto estaría muerto.

Sí, ¡Sí! ¡Finalmente lo logré! ¡Illumi, mi venganza está completa! Todo su esfuerzo no sirvió de nada ¡Lo logré!

Mi risa subía y subía. Me acerqué a él.

- Al fin lo logré...

~~**Aviones**~~

"Aviones" ••En Edición••Donde viven las historias. Descúbrelo ahora