Haikyuu!! One-Shots [BxB]

¡YAKU-SAN! ¡SEA MI TUTOR!

~LevYaku~

—Haiba Lev, no puedes seguir así —dijo el jefe de estudios—. Matemáticas es una asignatura importante, si suspendes de nuevo... Tendrás que dejar el club y dedicarte solo al estudio. Ya he avisado al capitán del equipo.

—Entonces... Si apruebo, ¿podré seguir en el club? —preguntó el mencionado.
—Sí, solo si apruebas con más de 85 —respondió.
—¡¿O-ochenta y cinco puntos?! —exclamó preocupado.

El profesor se levantó de la silla y salió de la clase dejando a un Lev arrodillado y sin esperanza alguna.

—¿Qué voy a hacer ahora? —se preguntó a sí mismo.

—Estudiar tal vez ayude —dijo alguien recargándose en el marco de la puerta corredera.
—¡Yaku-san! ¿Cómo sabía  que...
—Está escrito por toda tu cara Lev. Kuroo me ha dicho que te ayude y por eso, Haiba Lev, te levantarás a las cinco de la mañana y estudiaremos a y media aquí en tu clase. ¿Entendido?

El medio ruso asintió exageradamente y sonrió de una manera infantil.

El mayor se sonrojó y como no quería que Lev se diese cuenta, dio media vuelta y se dispuso a ir hacia el club.

El peliplateado le siguió alegremente, lo que no sabía era que Yaku sería bastante estricto...

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—Yaku-san... ¿Q-qué está haciendo? —preguntó Lev con mucho nerviosismo.
—Calla Lev. Esto es solo porque has sacado la máxima nota en el examen~ —contestó (sensualmente) Yaku.

El menor en estatura se quitó la corbata y le tapó los ojos al peliplateado con ella.

Seguidamente, se desabrochó la camisa del uniforme y se sentó encima del más alto.

Después, le quitó la corbata a Lev  y le ató las manos detrás de la silla.

—Uhh... Yaku-san, ¿m-me va a pegar? ¿Yaku-san?

El susodicho le calló con un beso.
Pronto, la habitación se llenó de "sonidos vergonzosos" como los habría llamado Morisuke.

—¡Woah! —exclamó Lev.

Se sentó en la cama para tener más movilidad y se destapó para mirarse "eso".

«M-me ha... Pasado esto... ¡¿Pensando en Yaku-san?!»

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—¡Lev! ¡¿Dónde estabas?! —preguntó Yaku arqueando una ceja.
—Umm... S-solo son las 05:32... —se excusó.
—Sí, has llegado 2 minutos tarde. A la próxima, castigo que te llevas.