Zero y Kaname se odian por cosas que los separaron años atrás cuando aun era estudiantes de la academia,pero hay un secreto que los une y que Zero a tenido escondido durante muchos años y pronto se descubrirá.
Cual sera ese secreto tan importante...
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En una habitación de la gran mansión, se encontraban: Ichiru, Takuma y el pequeño Kenshin, que no dejaba de ser abrazado por sus padres. El niño sí que había sentido un miedo impresionante, pero ahora estaba feliz de estar con su familia nuevamente.
Ichiru: Ken...Debes calmarte, ya estas con nosotros, estarás bien nadie podrá lastimarte. Pero necesitamos que nos digas que fue lo que paso, en donde estabas y...Como lograron traerte devuelta _Dijo el peli plata mirando a su hijo fijamente a los ojos.
Kenshin estaba sentado en la cama matrimonial donde dormían sus padres, Takuma estaba cerca de ellos también para escuchar como había sucedido todo, y sobre todo, ayudar al menor a calmarse totalmente. El pequeño al escuchar las palabras de su "madre" decidió respirar profundamente y exhalar para calmarse, sabía que debía decir todo. Así, no habría peligro para ningún otro integrante de la mansión y de su familia. Miro a su progenitor, y puso una expresión seria en su rostro.
Kenshin: Esta bien...Diré todo _Dijo de forma decidida, sorprendiendo un poco al propio Ichiru, ya que no sabía que su hijo podía poner esa expresión en su rostro.
KENSHIN SEGUNDOS ANTES DE SER SECUESTRADO
El menor se encontraba en su colegio, había terminado temprano sus clases por lo que debía esperar a que vinieran por él y su prima, por lo cual vagaba por la entrada de la escuela, cuando logro divisar el sonido de un camión de helados cerca. Tenía algo de dinero que sus padres le habían otorgado para comprar algunos dulces de su preferencia en el comedor del colegio.
Así que decidió el salir un momento a comprar el ansiado helado, una vez afuera busco la mirada al camión el cual no estaba pero aun podía oírlo, comenzó a seguir el sonido de la música de aquel camión pero al alejarse un poco más del colegio, pudo sentir una manos y brazos alzándole del suelo, y cubriéndole la cabeza con lo que parecía ser una bolsa de tela negra que no le dejaba ver.
Aquel hombre, una vez dentro de lo que según él era un auto, le destapo la cara y cubrió su nariz con un trapo húmedo con cloroformo que lo puso a dormir rápidamente. El niño después de aquello no supo de nada hasta unas horas después, que despertó dentro de una jaula, estaba en una habitación muy lujosa que incluso tenía una chimenea encendida.
No sabía en donde estaba pero no le gustaba nada, pasaron unos minutos donde trato de salir de la jaula en vano, cuando escucho la puerta de aquella habitación abrirse dándole paso a un hombre parecido a su tío Kaname pero con los ojos de diferente color, tenía una mirada penetrante pero una sonrisa burlona en sus labios, la verdad no le daba buena espina.
Este hombre, camino elegantemente hasta quedar en frente de el, el menor se había alejado hasta estar contra los barrotes traseros de la jaula. Estaba muy asustado ya que no sabía que quería hacerle aquella persona.
Rido: Cálmate, no voy a hacerte nada, claro, si cooperas y te comportas como buen niño que eres _Dijo el castaño con una ligera sonrisa de lado, que aparentaba ser dulce y amable pero que al pequeño Kenshin no le agradaba para nada.
