🌹 Perdonar 🌹 Namkook - Kooknam [Bts]

One Shot

-¿Están listos?

Preguntó el líder en la puerta mientras terminaba de colocarse los zapatos, estaba vestido de manera elegante al igual que los demás, esa noche habría una gran fiesta pero no era cualquier tipo de fiesta, era la fiesta especialmente para idols. Cada año las empresas, a pesar de ser rivales, organizaban una gran fiesta a la cuál asistían todos los idols con los que trabajaban.

Los chicos bajaron unos minutos después apresurados para no llegar tarde, se dispusieron a salir y cerrar bien la puerta de su casa, en la camioneta como de costumbre eligieron sus puestos. Desde hace un tiempo, probablemente un año y medio, Jungkook y Namjoon se sientan juntos y los demás se dividen. Es gracioso pensar que el líder siempre peleaba por ir de copiloto como "único beneficio de ser el líder"  pero eso cambio cuando se dio cuenta de que tendría que estar lejos del menor, su novio.

-No beban demasiado, por favor...

Dijó el manager estacionando frente a un gran salón, los chicos afirmaron y salieron disparados hacia el interior, un enorme salón realmente. Estaba decorado para una fiesta elegante, con una barra para tragos y una para comida, todo estaba perfectamente bien organizado y de hecho había mucho espacio a pesar de tener tantas personas juntas. En el centro estaba la pista de baile pero no era realmente utilizada, a los laterales estaban las mesas y sillas cómodas como si fueran sofás, todo era de calidad y resaltaba la belleza elegante de cada invitado.

-Bien, chicos... No se excedan y diviértanse...

Habló el líder serio pero dándoles una sonrisa al final, se dividieron para buscar cada uno un lugar agradable o la compañía de algún amigo, el menor caminaba extasiado con la vista al lado de su novio buscando qué hacer.

-¡Jungkook!

Gritó con alegría el maknae de Got7, Yu Gyeom , se saludaron alegremente mientras Kook le pedía silenciosamente con la mirada a su novio irse. El líder sonrió y asintió retomando su camino, las fiestas de este tipo eran más relajantes que las habituales, ya que estaban prohibidas las cámaras o los periodistas. La vigilancia era extremadamente buena no podían ingresar paparazzis al lugar dándoles un poco de libertad a los artistas.

-¡Nam!

Reconocería esa emocionada voz en cualquier parte, Jackson, el rapero de Got7, estaba saliendo de entre la multitud para llegar a él con su infaltable sonrisa y desbordante personalidad llamativa. Era imposible odiarlo y simplemente lo ignoraba por diversión ya que lo consideraba un gran amigo y una persona confiable a pesar de su apariencia alocada.

Se saludaron con envidiable alegría mientras se dirigían a la barra por un trago, charlaron por un buen rato hasta que cada uno empezó a extrañar a su respectiva pareja, se despidieron prometiendo volver a encontrarse.

-Pero contesta cuando te llame...

Declaró Jackson con seriedad, Nam solo sonrió y se terminaron de despedir, buscar a una persona entre un océano de gente tan grande sería complicado. Namjoon caminó alrededor del lugar sin pistas se había encontrado con uno que otro conocido, saludando y charlando brevemente para no verse descortés. Incluso encontró a los chicos bebiendo y comiendo con moderación o socializando con otros grupos pero no a su querido novio, comenzaba a preocuparse.

Lo llamó utilizando el celular pero no atendía, le preguntó a varios pero no lo habían visto ¿Qué se había hecho? Suspirando con pesadez y sin querer arruinar la noche de los demás, decidió buscarlo solo. En la parte trasera se guardaban las provisiones (bebidas, ingredientes, comida, etc), donde se suponía nadie debía ir, Nam se encontró buscando a su novio con desesperación ya que era el único lugar que no había revisado.

-¡Ah~!

Escuchó un gemido realmente fuerte pero todo estaba oscuro impidiéndole ver con claridad, estaba dispuesto a abandonar el sitio pero esa voz se le hacía demasiado conocida, con los nervios a flor de piel decidió arriesgarse. Tal vez no fue la mejor decisión que pudo haber tomado. Sobre una caja de madera siendo iluminado por la luz de la Luna que entraba por la pequeña ventana se encontraba una figura familiar, Jungkook estaba sentado en aquella caja sin pantalón o bóxer mientras un chico, desconocido y sin importancia por ahora, estaba en medio de sus piernas atendiendo al miembro del menor.

Estaba dolido y se sentía traicionado pero la ira predominó en ese momento, a pasos agigantados se acercó a ellos y le dio un golpe al desconocido ni siquiera se molesto en mirarlo más o revelar su identidad, tomó con fuerza el brazo de Jungkook logrando lastimarlo. El menor gritó adolorido pero poco y nada le importó al líder, quien lo obligó a vestirse y lo arrastró a la salida, caminaba frunciendo el ceño mientras arrastraba al menor de la muñeca con fuerza.

Pasó junto a Jackson sin mirarlo o determinar su existencia, este estuvo a punto de ir tras él pero la mano de Mark se lo impidió, el mayor era un buen observador y se dio cuenta de que ese era un problema privado.

-¡Nos vamos!

Dijó con rudeza al encontrar a los chicos, que por suerte estaban reunidos en el mismo lugar, nunca lo habían visto tan molesto y sin decir o preguntar caminaron tras él. Miraron con asombro como Jungkook se quejaba por el dolor en la muñeca pero el líder ni se inmutaba. Llegaron al estacionamiento y se dirigieron a la camioneta, el manager se veía desconcertado, aún era muy temprano para irse.

-¿Puede llevarnos a casa?

Namjoon le preguntó mientras soltaba al menor bruscamente y subía a la camioneta, sus palabras eran respetuosas pero en su voz había rabia y en si le dio una orden, el asombro creció al verlo ocupar el lugar del copiloto. Todos subieron a la camioneta en silencio, al estar listos avanzó, el ambiente era pesado y muy incómodo.

-¿Pasó algo?

Preguntó el manager con amabilidad obteniendo un gruñido como respuesta de su copiloto, el ambiente en la parte trasera tampoco era favorable, Jungkook estaba sentado junto a la ventana en un estado semi-consciente. Había bebido demasiado al punto de emborracharse y no saber ni quien era, los chicos se alteraron al verlo llorar, después de todo había recobrado un poco la sobriedad y reconoció su error.

La camioneta se detuvo en la entrada de la casa, Namjoon se bajó tan rápido como pudo, no miró atrás, no se despidió ni agradeció, entró a la casa y se encerró en su habitación completamente solo. Ya no podían estar más desconcertados, el líder siempre era amable, educado y cortés, siempre esperaba a que todos salieran para asegurarse de que estaban todos y bien, siempre entraba de últimas para cerrar el mismo la puerta.

Pero todo cambió esa noche y ninguno de los chicos sabía la razón ni mucho menos cómo reaccionar.