Capitulo 13

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Jin

Mi corazón dio un gran vuelco cuando lo ví ahí y no es como que me importara mucho, pero no podía dejar que eso pasará. Pobre chico ha tenido unos días duros como para ahora pasar por esto también.

El robusto jugador de americano lo tenia tendido en el piso, su labio sangraba y sus piernas temblaban aunque ante todo trataba de esquivar o bien tapar los golpes con sus brazos.

Fue un impulso pero en menos de lo que me di cuenta ya tenía a el tipo debajo de mi y su labio estaba sangrando.

Jungkook

Corrí y corrí por los pasillos esperando que nadie me hubiera visto, me abría paso entre las personas, estaba asustado lo admito y es que no se que me pasaba con esa chica que quería tenerla para mi, pero ya no mas, haré que no me controle, mis pensamientos me tenían tan distraído que choque con el hombro de alguien. Pedí disculpas educadamente y seguí caminando cuando de pronto alguien a mis espaldas hablo.

–Detente ahí niño– Demonios, demonios, demonios y como si yo fuera un perro obediente mi cuerpo se detuvo, era mi fin, lo sabia y todo por estar con una estúpida chica que ni siquiera me quería, genial moriré virgen y sin haber amado. Entonces sentí su puño impactarse en mi mejilla, el sabor metálico de mi sangre me anuncio que este me había hecho daño.

Trate de defenderme pero el era mucho mas fuerte que yo y esto solo lo empeoraba. Me golpeaba una y otra vez en las costillas y rostro, la gente se reunía a nuestros alrededores y gritaban pero no podía escucharlos, me levanto de la camiseta y estrello mi cabeza contra el suelo entonces todo se comenzó a nublar y lo ví, se paro entre las personas como si fuera un ángel, mi salvador Kim Seok Jin. De un momento a otro el peso encima mio ya no estaba lo único que seguía conmigo era aquel dolor, la vista nublada y el sabor a sangre que tenia en la boca.

Jin

Lo golpee hasta que supe que era suficiente, la gente a mis espaldas me gritaba que lo dejara, pero no planeaba hacerlo, no se iría tan fácilmente sin recibir nada.
–No lo vuelvas a tocar o te mato– jure dándole un ultimo golpe en el rostro, mis nudillos estaban rojos y yo intacto, no me había podido golpear ni una vez.
Me di media vuelta para ver a Jungkook y lo encontré en el suelo, con los ojos entre cerrados y susurrando mi nombre. La gente se había dispersado, malditos cobardes nadie lo pudo ayudar. Me agache y lo levante en mis brazos para llevarlo conmigo.

–Jungkook no cierres los ojos, quedate conmigo, por favor por lo que mas quieras no duermas– Si lo hacia tendríamos un grave problema, necesitaba al menos mantenerlo despierto hasta llegar al hospital.

Jungkook

–Jin– Lo único que mis labios lograban articular era eso, era increíble que el estuviera aquí, no se que hice para merecer esto pero me agrada.

Me cargo entre sus brazos y me sentí en el cielo. Mi cabeza dolía y sentía cada vez mas obscuridad en mis ojos, me estaba dando mucho sueño, Sonreí bobamente ante sus palabras, el quería que me quedara, de seguro solo lo hacia por amabilidad.

Cuando me di cuenta ya estábamos en su auto, lo había encendido y nos encontrábamos rumbo a no se donde, no podía reconocer el camino, tal vez me llevaría al hospital, tal vez me tiraría en la carretera, no lo se.

Jin

Sus ojos cada vez se cerraban mas, podía sentir como el peso de su cuerpo cada vez se hacia más muerto entre mis brazos, sonreía bobamente y su cabeza quedaba colgando pero aun tenia los ojos entre abiertos lo cual me daba esperanza.

Lo senté en el asiento del copiloto y comencé a conducir hacia el hospital, teníamos que llegar rápido antes de que fuera demasiado tarde, vamos Jungkook resiste, era el único pensamiento que estaba en mi cabeza. 

Llegamos por fin al hospital y lo mire, tenia los ojos mas cerrados que abiertos, lo que susurro me dejo estático en mi asiento, no sabia si lo decía porque el golpe o porque pero no era el momento de esas cosas, baje corriendo del auto y abrí la puerta del copiloto para sacarlo de su asiento, entonces.....

El amor de un idiota Donde viven las historias. Descúbrelo ahora