VIII. - Macon Vasteratti

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POV NORMAL:

Los guardianes Fiore y Vongola no se han despegado de su jefe al igual que no han dejado de vigilar la habitación donde se encuentra Leonardo.

Era temprano, ya habían pasado dos semanas desde la batalla entre hermanos, en ese momento el pequeño Sora se encontraba sentado a lado de la cama de su oto-chan. 

El castaño comenzó a abrir sus ojos lentamente hasta que pudo enfocar su vista siendo su hijo lo primero que vio, el cual le sonrió aliviado, después de todo aunque fuera algo serio y frío seguía siendo u niño que se asustaba y preocupaba al ver a la persona que le dio la vida en ese estado.

- Hola Sora - le saludo el castaño esbozando una tierna sonrisa 

Su hijo inmediatamente se abalanzó sobre el con pequeñas lágrimas corriendo por sus mejillas.

- Tranquilo, mi pequeño cielo - le dijo Tsuna acariciando el cabello de sus pequeño con dulzura

- No vuelvas a asustarme así oto-chan - le dijo entre sollozos 

- Lo prometo, no llores más, estoy bien ¿si? - le dijo Tsuna tomando el rostro del pequeño entre sus manos limpiando las lágrimas de este provocando una ligera sonrisa en él 

En ese momento la puerta fue abierta mostrando al sicario número uno, el cual al ver a sus amado despierto con su hijo en brazos no dudo ni un segundo en acercarse para abrazar a ambos depositando un beso en la frente del castaño.

 - Me alegra que despertaras amore - le dijo Reborn 

- Lamento haberme tardado tanto, mis heridas sanaron y pude hablar un poco con Giotto el cual me ayudó a saber la identidad de nuestro verdadero enemigo - dijo tranquilo el castaño 

- Eso es de gran ayuda pero tu yo tenemos una platica pendiente sobre el como te arriesgaste de esa manera pero no lo hare porque Sora esta presente - dijo Reborn 

- Tranquilo oto-san, quiero escuchar el como regañas a oto-chan - le respondió el pequeño haciendo que una sonrisa se mostrara en el rostro del mayor  

- Sora, que malo - respondió el castaño formando un ligero puchero 

- Lo siento oto-chan - le dijo el pequeño entre risas 

- En estos momentos necesito que reúnan a todos los guardianes en la habitación de Leo, ahí les dire quien es nuestro enemigo - le dijo seriamente a Reborn 

Reborn solo asintió para dejar  a sus dos tesoros solos para cumplir la orden que su castaño le dio.

- Vamos con tu tío - le dijo Tsuna mientras se levantaba vistiéndose con unos tejanos negros, zapatos negros y una camisa blanca 

Ambos salieron de la habitación, al llegar a la habitación de Leonardo se encontraron a Hibari el cual se encontraba cuidando de Leonardo.

A los pocos momentos aparecieron todos los guardianes los cuales se encontraban contentos al ver al castaño despierto pero sus sonrisas fueron sustituidas por muecas de seriedad al ver el rostro del castaño el cual solo mostraba seriedad.

- Los reuní aquí para decirles la identidad de nuestro verdadero enemigo; nuestro enemigo no era Leo, sino Macon Vasteratti, el es el líder, es hijo del antiguo líder, su odio viene desde la muerte de su padre al parecer su padre y mi madre estuvieron comprometidos pero mi madre nunca lo aceptó y lo dejó por lo cual su padre cayó en una gran depresión que lo llevó a la muerte pero siempre me culpo a mi por haber nacido, ya que él penso que por el que yo nací fue el porque mi madre lo abandonó por lo cual Macon me dio por eso y tomando el cuerpo de Leo desde hace tantos años me destruiría pero no o logró después de todo Leo siempre se lo impidió el tiempo necesario para que yo pudiera descubrir todo esto  - dijo Tsuna sorprendiendo a todos 

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