Los guardianes de Tsunayoshi lo traicionan creyendo en una vil mentira inventada por el hermano del hermoso cielo.
Tsuna se va jurando venganza contra su hermano pero no se va solo se va con un pequeño ángel que crece en su vientre. Poco tiempo desp...
Al día siguiente los guardianes junto a la famiglia Fiore se dirigieron a la mansión de la décima generación Vongola.
Al llegar fueron recibidos por las mucamas y mayordomos, estos los llevaron al despacho de Leonardo, el cual los esperaba con una sonrisa tétrica.
- Hola nii-sama - le saludó
- Leonardo, es tiempo El Vongola asintió
Ambos se trasladaron al campo de entrenamiento donde tendrían su lucha.
A los pocos momentos que llegaron los guardianes de ambas familias se colocaron en un extremo donde no salieran lastimados para ver la pelea.
Leonardo activo sus llamas, las cuales eran negras, Tsuna encendió sus llamas las cuales eran tan puras como el gran cielo.
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- Es momento Tsunayoshi - le dijo Leonardo fríamente
Tsuna frunció ligeramente el ceño.
Leo fue el primero en abalanzarce tratando de golpear al Cataño en la cara pero este lo esquivo con rapidez, Tsuna se coloco detrás de él dándole una patada en la espalda mandándole a volar. Leo se acercó con velocidad y fuerza hacia Tsuna, cuando estaba a punto de tocarlo el castaño sonrió mientras el puño de Leo cubierto de llamas negras lo atravesaban.
- No eres tan fuerte Tsunayoshi - le dijo Leo
- Tu eres el débil, te aprovechaste de la debilidad de mi ototo tomando su cuerpo para acabar con mi familia, tu eres el cobarde que uso al débil como marioneta - le dijo Tsuna con una sonrisa mientras que de la comisura de su labio salía sangre
- ¿Desde cuando lo sabes? - le preguntó sorprendido
- Desde siempre, Leo podría haber sido débil pero de algo estoy seguro el nos ama y siempre pidió mi ayuda - le dijo
- Ese maldito... Por hoy has ganado Tsunayoshi, te devuelvo a tu estúpido hermano después de todo ya no me sirve - dijo
Del cuerpo de Leonardo salieron unas sombras negras de su interior para que después el cuerpo cayera sobre los brazos de Tsuna, su mano salió del cuerpo de Tsuna dejando una gran herida.
Tsuna acaricio el cabello de Leonardo con dulzura.
- Bienvenido ototo - pronunció antes de caer inconsciente
Reborn se acerco tomando a Tsuna entre sus brazos.
- Baka, no tenías que arriesgarte tanto - dijo con tristeza
- Oto-san, oto-chan va a estar bien el es fuerte pero debemos curarlo cuanto ante, lo mejor es que lo llevemos a una habitación - dijo Sora tranquilo
Reborn asintió mientras que Arata tomaba a Leonardo en sus brazos.
- Lo llevare a una habitación y lo vigilaremos - dijo Fumio
- Se los encargo - les Dijo Reborn
Al parecer un nuevo misterio esconde el cielo y un nuevo enemigo aparece.
