El día mas brillante

el ojo de la tormenta

La lluvia es sin dudas unas de las cosas más bellas que el planeta puede mostrar, algunas personas llegaban a sentir cierta tranquilidad al estar en este tipo de climas. La lluvia era una muestra de cómo algo tan hermoso en el plantea podía ser igual de destructivo, eso le daba un gran encanto a este tipo de climas.

-puta lluvia de mierda-

Al menos no cuando estas debajo de esta.

Eran alrededor de las 4 de la mañana y la gran tormenta que había azotado a royal Woods no había terminado de dar lo suyo. Aunque esto no representara un problema serio para el chico Loud, esto llegaba serle frustrante hasta el punto de decir palabras que casi nunca usaba en su vocabulario. Lincoln caminaba por las vacías y oscuras calles de royal Woods mientras la lluvia hacia todo lo posible por empaparlo, sin embargo, esta no podía debido a que se evaporaba incluso antes de tener contacto con él.

Cuando entró al edificio donde estaban aquellos tipos que casi lo mataban con golpes y patadas no pensó que habría tantos tipos armados y menos una mujer secuestrada por ellos, de hecho... no pensó en nada. Después de haber hecho el trato con aquel ser con apariencia de toro, la mente de Lincoln se nublo por completo y no podía pensar nada. Pero eso no es lo que más le sorprendía, lo que más le sorprendía es que durante todo su transcurso en aquel edifico él fue matando con sus propias manos a cada uno de los hombres de aquel edificio sin piedad algún. De hecho, no pudo sentir ni siquiera una pizca de arrepentimiento o culpa por lo que hizo y hasta cierto punto... lo disfruto.

Después de despedirse de Jean, Lincoln empezó a sentir algo de molestia que gracias al regreso de la fuerte lluvia se convirtió rápidamente en enojo, pero había algo que hacía que Lincoln no sucumbiera a su enojo y eso era las dudas que el joven tenía. ¿Quién era esa cosa con forma de toro? ¿en que consiste el trato que hiso con él? ¿Qué es aquella linterna donde el depositaba la sangre? ¿Qué era el traje que traía puesto y de donde saco aquel anillo?

La lluvia se empezó a calmarse hasta el punto de desaparecer dejando a vista un hermoso cielo nocturno. Lincoln aprovecho esto para buscar un lugar donde poder tomar tiempo para aclarar sus dudas, sin darse cuenta había llegado caminando al parque el cual solía visitar con sus.....

Camino hasta finalmente estar frente una banca de madera mojada debido a la reciente lluvia, Lincoln se sentó sin importarle si estuviera mojado o no. Lincoln iba a hacer algo de lo que no estaba seguro, pero si era la única manera de controlar su enojo, así lo haría. Con un poco de esfuerzo pensó en aquella extraña lampara que cargaba cuando ataco a los hombres de aquel edificio, para su suerte esta apareció de manera espontánea en su mano y con un poco de nerviosismo pregunto algo a aquel extraño objeto.

-oye espíritu toro, ¿sigues ahí?- pregunto Lincoln con tono molesto, el cual ya iba a ser algo normal en él.

-para tu información no soy el espirito de algún estúpido animal, tengo nombre y ese es Butcher- una voz tan grave y ronca como el mismo demonio resonó en la cabeza de Lincoln.

-ok Butcher, tengo algunas dudas sobre esto- decía Lincoln mientras señalaba su anillo.

Pero esta vez no hubo respuesta, los segundos pasaron hasta que al fin hubo respuesta.

-... te hablare de ello, pero no aquí- decía con tranquilidad aquella grave y ronca voz.

-¿Por qué no ahora?, no me gusta traer este estúpido traje todo el tiempo- decía con molestia Lincoln y como si de una petición se tratase, su traje desapareció por completo dejando a vista su ropa rasgada con algunas manchas de sangre y su falta de zapatos.