23 De septiembreLas hojas del otoño caían de los árboles, la pradera estába cubierta con hojas de colores cálidos y un viento que era refrescante.
Ahí por la pradera cerca de la carretera había una casa, ni muy grande, ni muy chica, era sólo una casa común acogedora y cálida.
En una banca junto a la casa, una niña de cabellos castaños, ojos color avellana, un vestido color rojo con tirantes y una camisa blanca de bajó. Jugando estába con su muñeca de porcelana, era idéntica a ella con la diferencia que su cabello era un color Ceniza.
Y Le Preguntó a su querida muñeca.
-¿A qué jugamos hoy?- Miró a la muñeca y la movió cómo si ésta contestará.
-¡No sé!- dijo cómo si fuera la muñeca.
-Ya me aburrí de jugar a la mamá- suspiro desanimada. -¿Verdad?- le preguntó a la muñeca y con una mirada triste dijo -¿Será que los invitados de mamá están por irse?.
Moviendo otra vez a la muñeca cómo si ésta le contestará, le dijo.
-Deberían irse de una vez- puso la cabeza de un lado y sonrió
-¿Verdad?- pero luego su rostro cambió ya no tenía una sonrisa.A lo lejos un carruaje llamó su atención, por la carretera venía y ella con su gran curiosidad fué a ver.
Desde lejos se podía apreciar a una chica nomás de 16 o 17 años bajando del carruaje, llevando consigo una maleta y sostenía un paraguas color celeste.
-¿Qué es éso?- preguntó asombrada por la imagen que tenía en frente. Por la carretera venía caminando ésa chica de postura correcta con una cara sería, ojos celestes, cabello ceniza, con un vestido celeste y unas botas.
-Una muñeca venía caminando.
-Una muñeca muy grande.
-Tenía la sensación de qué era algo malo....
...
...
La niña era tímida, debes en cuando extrovertida, aveces se deprimia y era juguetona, pero ella lo que más apreciaba y adoraba era a su preciada madre.
-¡Mamá!¡Mamá!- gritándole al aire se iba saltando las escaleras de su casa.
-¡Señorita!- una señora ya grande de cierta edad, que trabajaba para la madre de la niña, sorprendida por la alegría que había tenido.
Mientras en la habitación de la Madre.
-Tienes razón, pero...
-Es algo importante.
En su habitación se hallaban los invitados, ella estába acostada en su cama hablando de algo muy importante con ellos y que afectaría a su hija.
-pero...- habló la madre, pero fué interrumpida por su hija que entró sin tocar la puerta.
-¡Mamá!- alegre la niña al entrar, pero su madre la miró sorprendida y con mala cara.
-¡Anny! Te he dicho que toques la puerta cuando quieras entrar a la habitación- la regaño, pero con la mirada más suave.
La niña un poco asustada y con timidez, observa a los invitados de su madre, primero a la señora a su izquierda y ésta le sonría, ella aprieta a su muñeca.
-Además, debes saludar- dice su madre con tranquilidad, ella observa a su madre y entonces con desánimo, hacé una reverencia agarrando su vestido.
-Bienvenidos- al terminar con su saludó dice -Con permiso, mamá-.
-Muy bién- con severidad, luego suaviza su mirada y le sonríe
-Entonces, ¿qué querías?-.Ella apretó su muñeca y con mirada sorprendida, sonríe y fue corriendo hacia su madre.
-¿Otra vez encontraste un insecto extraño? Sí es así, te pido que no me lo muestres- Sonrió su madre.
-¡No es un insecto!¡Una muñeca venía caminando!.
-¿Una muñeca?.
Entonces la misma señora ya grande interrumpió la conversación.
-Señora, ha llegado.
La madre de la niña sé puso feliz y juntando las manos, dijo.
-¡La muñeca!Es cierto, era hoy. Hazla pasar.
-Entendido- prosigue para luego salir de la habitación.
-¡Espera!- dice la invitada a su izquierda.
-Lo siento, continuaremos en otra ocasión- Dice para luego levantarse de la cama.
-¿E-En otra ocasión?¿Qué harás con esta casa?¡Ella no puede vivir sola! Por eso nosotros...
La niña solo se mantia al margen, sentada en las escaleras, mientras su madre se despedía de los invitados.
-Les pido que se vayan por hoy.
-¡Espera!...- antes de seguir su madre ya había serrado la puerta de su casa.
La señorita que era la muñeca, miraba atra vez de la ventana, mientras la niña la observaba detrás de una pared.
Entonces la madre de la niña apareció detrás de ella y acarició su cabello.
-Anny- la niña sorprendida la miró y su madre le sonrió -Sé una buena niña-.
Las dos se encaminaron a la nueva visita que según la niña era una muñeca.
Con pasos cautelosos la niña caminaba detrás de su madre.
-Lamento hacerte esperar. Gracias por venir a un lugar tan lejano.
-No hay problema- dijo sin ningúna expresión en el rostro.
La niña sorprendida habrío la boca.
-¡Puede hablar!- susurro.
La señorita movió su maleta y dijo -Si lo desea, escribiré en cualquier lugar.
Este es el servicio de Muñecas de Recuerdos Automáticos o una Doll-.-¡Lo sabía!¡Es una muñeca!- habló de repente la niña asombrada y Alegre.
-¡Anny!- Le regaño su madre -Lo siento- se disculpó la madre con la señorita.
-No se preocupe- hacé una reverencia -Soy Violet Evergarden.
...

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Hasta La Última Carta
Fiksi IlmiahHaremos de tus sentimientos una carta. Primavera, verano, otoño, invierno... muchas estaciones han pasado y aun sigo esperando por aquello que lo traiga de vuelta. Violet Evergarden Créditos a Kana Akatsuki. Los personajes le pertenecen. Disfruten...