61

799 95 18
                                    

Me inspiré al ver varios fics siendo actualizados jsjs ;^ ¿

Tobirama se encargó siempre de cuidar de Kagami cuando se metía en problemas, el niño tenía un maldito desastre con su vida gracias a haber nacido con más talento que otros Uchihas, talento que por su puesto es sobre-explotado por su propia familia.

Uchihas, ¿Quienes eran ellos? Una familia que tenía un extraño poder en sus ojos, que le permitían hacer cada clase de cosas que Senju Tobirama odiaba, eran como Vampiros entre humanos, solo que nadie se daba cuenta.

Senju era la empresa por la que su familia trabajo generaciones, hasta el día de hoy su trabajo es reconocido, hasta que llegaron los Vampiros Uchihas que llamaron la atención de quien sea con sus poderes.

Por lo tanto, sabiendo que esa familia estaba más que maldita, el no se sorprendió ni se negó cuando Kagami había llegado a su casa muerto de frío, pidiendo esconderse en su casa por un tiempo.

Gracias al odio que Tobirama había demostrado hacia los Uchihas, Kagami no fue encontrado.

Pero hoy hubo...
Un problema.

— ¡DÉJAME EN PAZ!

Cómo ese.

- Tú me vas a escuchar, mocoso, has roto reglas y lo sabes. - Senju dijo, furioso, era la primera vez que había desobedecido y quería que fuera la última.

— ¡NO ME IMPORTA, TÚ MENTISTE! — El azabache se veía aún más furioso, con los puños apretados, como si en cualquier momento saltaría a atacarlo sin piedad.

— ¿Ah, sí? — Se apoyó en la pared, cruzándose de brazos y una expresión sarcástica.— ¿En qué menti? ¿En decirte que tenías que quedarte aquí por tu seguridad? ¡Casi te atrapan!

— ¡DIJISTE QUE SE ACABARÍA PRONTO! —

— ¡Claro! ¡Te van a dejar de buscar eventualmente, eso acabará pronto!—

Kagami no escuchó más y se fue a su habitación, cerrando la puerta de un portazo.

Si creía que lo iba a dejar así, estaba equivocado.

Tobirama se acercó a la puerta.

— Estás castigado, niño.—

Y así la puerta se abrió de nuevo para encontrarlo más furioso y rojo que antes.

— ¡ES INJUSTO! —

- No más lujos desde ahora, no televisión, ni móvil, ni comida favorita, ni videojuegos.-

— ¡ERES IGUAL QUÉ MI FAMILIA! — El Uchiha estaba llorando.

— Sí soy igual que esos psicópatas, vete y no vuelvas nunca a buscarme. Mocoso engreído, los Uchihas son iguales.— Bufó.— ¿Para qué me molesté?—

Kagami se quedó en silencio, temblando y llorando aún más con esas palabras. Luego, frunció el ceño y sus ojos cambiaron a rojo.

— ¿Qué piensas hacer-

Fue muy tarde cuando se dió cuenta de que había comenzado a sangrar de lugares que no reconocía.

Lo último que vio fue al niño robando su dinero y huir.

• ¡Misión, ayudar a Kagami a confesarse al sensei! • Serie de drabbles/mini-shotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora