⇢ ʙᴀɴɢᴛᴀɴ ʀᴇᴀᴄᴛɪᴏɴs +18

✾Stranger²✾

➳Especial BTS Pt.2

[🍑]

No podía hacer nada más que quedarse parado observando la erótica escena, sus pantalones comenzaron a estorbar y entonces tuvo la necesidad de adentrarse en aquella habitación, luego de asegurar la puerta usando aquel truco que solamente el sabía.

—Escuche que alguien gemía mi nombre, entonces...¿eras tú?.

El pelinegro se acercó a ti con una sonrisa ladina, eso era lo que querías, lo que ambos querían pero no podían creer que en realidad estaba pasando.

—¿Porque te excito tanto?.—Preguntó y se acercó aún más a ti.

Tomó tu rostro entre sus manos y te observo directamente a los ojos, intentaste controlar tu respiración pero era casi imposible teniéndolo tan cerca.

Besó tus labios suavemente recorriendo cada parte de ellos, comenzó lento y fue aumentando conforme la necesidad.

Te dio un pequeño empujón haciéndote caer sobre la cama, comenzó a besar desde tus labios hasta tu cuello.

Un leve gemido se escapó de sus labios cuando hiciste presión con tu rodilla en su miembro, el se detuvo para observarse un momento.

—Eres preciosa.—Dijo aún con la respiración agitada.

Esta vez fuiste tu quien se posicionó sobre el, te tomo del cuello con una mano mientras que con la otra se encargaba de desabrochar tu sostén.

Podías ver su blanco abdomen gracias a la ausencia de ropa en esta parte, su piel desnuda se rozaba suavemente con la tuya y eso te causaba escalofríos, necesitabas más, querías tocarlo también.

—Dejame hacerlo.—Dijiste dudosa, de todas las fantasías que habías tenido con el, poder montarlo era una de las más grandes.

Sonrió.

—No es necesario pedir permiso sabes...

Comenzaste por quitarle sus pantalones, dejándolo solamente en ropa interior, podías  notar que su erección luchaba por salir, era notorio que dolía pero no te lo había mencionado quizás por no apresurar las cosas.

Tomó tus caderas y te subió sobre su regazo, comenzaste a moverte poco a poco causando fricción entre sus cuerpos rozando su intimidad con la tuya sobre la tela que evitaba hacer contacto directo de piel con piel.

Comenzaba a jadear y a gemir despacio, eso era señal de que lo estabas haciendo bien.

Pasó sus fríos dedos por toda tu espalda hasta llegar a tus glúteos haciendo presión en esta marcando la huella de su mano, mientras recorría tu cuello con su boca.

Gemiste esta vez un poco más alto y presionaste más su entrepierna con la tuya, esta vez recibiendo un grave gruñido de su parte.

—Y-ya no aguanto...—Tomó tus caderas y te apartó de el recostandote suavemente en la cama.

De un solo movimiento retiró la última prenda que vestía, dejando por fin libre aquella necesitada erección.

Tomó su miembro entre sus manos y la dirigió a tu entrada después de colocarse el preservativo, simulando pequeñas embestidas ya que aún vestías tus bragas.

—Esto es un estorbo, ¿no crees?.

Por fin apartó tus bragas de ti dejándolo ver tu cuerpo sin ninguna prenda encima, el pasó su lengua por sus labios y terminó mordiendo el inferior.

Te estaba volviendo loco, era realmente sexy.

Te acomodó en la cama para tener un mejor acceso, colocó ambas manos alrededor sosteniendo su peso, su frente brillaba debido al sudor y sus ojos se tornaron el doble de oscuros y radiantes.

—Tengo que lubricarte para que no duela.—Acarició tu abdomen con su dedo índice trazando pequeños círculos.

Abrió un poco más tus piernas e introdujo un dedo en tu cavidad, soltaste un gemido por la sensación.

—Estas tan mojada, y caliente jagi.

Abrió paso a un segundo dedo, daba pequeños movimientos dentro de ti, te retorcías debajo de el en cualquier momento podías llegar a tu clímax sólo con sus maravillosos dedos, tus gestos y gemidos no hacían más que ponerlo más duro y ya comenzaba a dolerle.

En un instante se detuvo y te quejaste por su acción, pero era su turno también y ya querías tenerlo dentro.

—No dolerá.

Aseguró y acomodó su miembro en tu entrada, primero comenzó por la punta y poco a poco fue adentrándose en ti gimiendo y maldiciendo en voz baja, juntos a la par.

Soltarte un sonoro gemido cuando comenzó a moverse.

—Ah~ estas tan estrecha y caliente...—Soltó cuando estaba totalmente dentro de ti.

Lo único que podías hacer era sostenerse fuertemente de su espalda, claro que dolía por ser tu segunda vez pero no podías quejarte, el tamaño de su miembro era el doble de grande, poco a poco el dolor se fue camuflando con el placer.

Sus embestidas fueron cada vez más fuertes y rápidas, ambos eran un lío de gemidos, sin control alguno.

Por suerte sus padres no podrían escucharlos ya que las habitaciones estaban muy separadas entre sí.

Fue bajando la velocidad pero a cambio de eso llevaba su miembro más adentro de ti clavandolo con fuerza justo en el punto que te hacía ver las nubes anunciando la venida de tu clímax.

—Ah...jagi, se s-siente tan bien estar...hmm...dentro de ti.—Hizo un gran esfuerzo por hablar.

Dos, tres, cuatro embestidas más y salió de ti quitándose rápidamente el preservativo y corriendose sobre las sábanas.

Se tiró sobre la cama a un lado tuyo controlando su respiración.

—Que buena manera de conocernos.—Dijiste exhausta.

—Y esto aún no termina.—Dijo con una mirada traviesa.

Reíste ante su comentario.

—¡No pienses mal!, mañana te llevaré a desayunar.—Dijo con un tono inocente.—Claro...si puedes caminar.

Giñó un ojo y se levantó de la cama para cambiar las sábanas manchadas.

—Y en la noche repetimos lo de hoy.—Tomó su ropa y se dirigió a su habitación para evitar sospechas.

[🍌]

Bueno esta fue la segunda y última parte del especial, es la primera vez que escribo este tipo de cosas y la verdad me divertí escribiendolo espero que les haya gustado <3.

¿Quieren que suba más capítulos como este? 🙊💗