capitulo IV

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La escuela

Suena la alarma como siempre a la 6:30 AM, ya ni tengo ánimos de levantarme conto lo que ocurrió anoche. Me levanto de la cama para asearme y bajar a desayunar, escojo entre mi ropa un vestido de flores y una zapatilla, al bajar las escaleras no escucho ningún ruido y es muy raro en mi familia al entrar a la cocina no encuentro a nadie, me pregunto si se habrán quedado en el hotel, abro la nevera y cojo una botella de agua con una manzana para desayunar, pero alguien toca la puerta de adelante, me lo encuentro muy raro casi nadie viene a estas horas de la mañana, quien será.

Cuando abro la puerta, no encuentro  a nadie miro a los lados y nada, pero algo me llama la atención y miro al piso y me encuentro con una rosa negra y una tarjeta. Agarro la flor y leo la tarjeta:

´´Sé que no me conoces y así es mejor,
Espero que salgas pronto de la ciudad
Antes de que te atrapen´´.

No entiendo porque dice eso, quien me buscara será algo que tenga que ver con el chico de anoche.

Espero que este día sea normal, y non tenga ninguna complicación, me monto en mi auto y voy de camino al trabajo de mi padre a ver si esta hay, me pudiera explicar esta nota, antes de llegar a la escuela sé que se, preguntaran como llego mi familia a tener tanto dinero y poder, bueno  mi padre es un traficante de droga, en mi familia solo yo lo sé, ni mi madre ni mis hermanas saben esto, para ellas él trabaja en una de las empresas más grandes del país.

Yo he llegado antes de entrar me encuentro con la mano derecha de mi padre Momo, lo saludo con la cabeza el igual.

-¿Dónde se encuentra el jefe?- le digo

Se preguntaran porque le digo jefe a mi padre es por caso de seguridad pero ahora mismo creo que se perdió.

-Se encuentra en su oficina hay algún problema.
En verdad no sé si decirle pero no quiero tener ningún inconveniente, decido mejor decirle.

-Solo quiero ver al jefe.

-Está bien, puedes  pasar cualquier cosa que pase dile al jefe que salí hacer el ultimo encargo.

Bueno, en este lugar todos creen que soy una mula ya que siempre estoy aquí y qué más da. Cuando voy subiendo las escaleras, me acuerdo cuando vine por  primera vez, tan solo tenía 15 años y decide seguir a mi padre para ver a donde iba todo los días con urgencia.

No puedo creer que ahora yo venga a este lugar y no me da miedo nada, sé que se preguntaron si he hecho algunos viajes llevando droga, pues que les puedo decir, es la verdad, lo he hecho varias veces pero solo porque a mi padre nadie ha querido llevar esos encargos, pues ya pueden ver como es todo esto.

Al llegar a la puerta respiro profundamente antes de entrar, al abrir la puerta encuentro todo como siempre, mi padre en su silla mirando hacia afuera por un gran ventanal, la mesa en perfecto orden, las paredes pintadas de gris dando un aspecto, un poco apagado como le gusta a mi padre y el retrato familiar que nunca se queda.

Mi padre al escuchar mis pasos, le da la vuelta a la silla quedando en frente de mí.

-Hola mi amor, que haces tan temprano aquí.

-Me ha llegado una nota diciendo que me valla antes de que me atrapen con una rosa negra.

- Aun la tienes.

- Si crees que sea uno de tus enemigos, papa.

Mi padre agarra la nota y veo que la lee, pero al parecer no le ha gustado nada lo que dice, porque fruñe el ceño y se queda pensativo pero en verdad no entiendo nada.

-Pero qué diablos es todo esto.- me dice
Separa de su silla y me abraza, pero aun no entiendo nada.

-Nashua, al parecer en unos de tus viajes que te he mandado hacer, llevando la mercancía, una de esas personas te está siguiendo desde hace tiempo, pero no se aun que es lo que quiere, por eso hace día tome  la decisión de mandarte a Argentina, te acuerdas del chico que conociste en la fiesta.

-Si.

- Bueno, te voy a mandar donde el, porque sé que haya nadie te buscara además el, es un gran amigo mío.

-Pero creo que todo esto es muy  apresurado y que les voy a decir a mama y a mis hermanas.

- Tranquila de eso me encargo yo. Ahora lo más importante es tu seguridad.

-Está bien. Pero ya me tengo que ir a la universidad.

- Te llevaras a uno de mi guarda espalda pero, el solo te vigilara de lejos.

- Como digas.

- Nashua perdóname por haberte introducido en esta mierda.

- Tranquilo papa también fue mi culpa.

Nos damos un último abrazo antes de irme y al oído me susurra un te amo, al salir de la oficina voy directamente a mi auto y lo pongo en marcha para llegar a la universidad… Al llegar a la universidad la encuentra muy normal como siempre, uno que otro chico corriendo para no llegar tarde a clase, aunque me quedan cincos minutos antes de entrar a clase y a mi aula está en el segundo nivel. Cuando entro al aula me encuentro con solo cincos personas en el aula, los saludos a todos con un buenos días, que puedo decir no soy una chica que tenga muchos amigos y mejor así para no tener problema. Me siento en el medio para poder entender mejor al maestro.

Al rato de unos minutos, llega los demás estudiantes y detrás el maestro, el cual es un poco viejo ya debería estar pensionado en vez de estar dando clase. Las clases transcurren normales como siempre, ya hasta me aburre, pero lo que no sale de mi mente es como esas personas llegaron a encontrar, en verdad que no entiendo, y más que mi padre quiere mandar con una persona que apenas conozco.


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Hey chicos espero que este libro les esté gustando tanto como a mí y es propio mío.

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