Space Between Us [Mysticshock]

Capítulo 14

Un poco más tranquila, Darcy tocó la puerta de la habitación en donde estaba Wong, esta puerta estaba abierta, pero ella no quería abusar.

–¿Se puede? -Wong solo le hizo un gesto para que entrara- Yo no deseo molestar, créame que esa es mi última intención al estar aquí. Pero realmente me gustaría saber si hice algo malo, algo que le molestó o le ofendió. -Wong le miraba sin decir nada- Yo sé que usted es un hombre de muy pocas palabras, pero que no me diga nada me hace sentir mal. Me hace creer que estoy haciendo cosas que no debo y no sé cuales podrían ser. -Él seguía sin responder.- Déjeme decirle algo, yo solo quiero ayudar, poner mi granito de arena.

–¿Ayudar? ¿Con qué?

–Pues, con lo que está pasando, con las pesadillas de Stephen. No sé qué podría hacer, pero no me quiero quedar con los brazos cruzados. Aunque él muchas veces no se merezca que le ayuden, tampoco se merece lo que le está pasando.

–¿Y acaso usted sabe lo que realmente está pasando?

–Pues no, creo que ni él sabe exactamente lo que está pasando, pero de igual forma quiero ayudar. -Wong negaba al oírle hablar-

–No puede hacerlo, estas cosas van más allá del plano terrenal. Es muy peligroso para alguien que no tenga la preparación adecuada.

–Estoy consiente de que no soy una deidad, que no tengo poderes o alguna habilidad especial, pero tiene que haber algo que esta pobre mortal pueda hacer. -Dijo ella con ánimo-

–Ahora que lo dice, sí hay algo que puede hacer. Tanto por su bien, como por el de Strange, lo mejor que puede hacer es alejarse. -La cara de entusiasmo de Darcy había cambiado-

–¿Qué? ¿Cómo que alejarme?

–Se estaría salvando usted misma y lo estaría ayudando a él.

–Pero… Cuando usted dice alejarme es ¿Alejarme de aquí o de la vida de Stephen? -Preguntó un poco consternada-

–Usted sabe muy bien la respuesta.

–¡Vamos! Señor Wong, no puede decirme algo así. Yo pensé que le caía bien.

–Y me cae bien, es por eso que le doy este consejo. Claramente no me gustaría hacerlo, pero hay cosas que están a la vista  y están mal. Evite que todo se salga de control, hágalo por usted, por él si es que de verdad siente algo grande.-Wong tomó dos libros que tenia en la mesa y se los llevó de la habitación. Darcy trago fuerte, no esperaba algo como eso ¿De verdad estaba haciendo las cosas mal al estar con Stephen?

Stephen por su lado, estaba metido de lleno en esos viejos libros con hechizos y conjuros, todo ese asunto le estaba empezando a consumir. Y es que este era uno de los principales problemas en Stephen Strange, cuando algo se le mete en la cabeza no descansa hasta resolverlo, se convertía en una asignatura pendiente que le podía llevar al grado de obsesionarse. Y ahí estaba, leyendo y releyéndolo cada una de aquellas paginas, no tenia mucha información sobre esta entidad, Nightmare, pero quería estar preparado para cualquier cosa que pudiese pasar más adelante. Habían pasado varios minutos, casi una media hora, cuando encontró un conjuro que no llevaba nombre, ni utilidad, o descripción alguna. Lo iba leyendo mentalmente, pero mientras lo hacia, iba sintiendo como todo el ambiente se volvía mas pesado, el aire estaba un poco mas denso y poco a poco sentía que todo se iba oscureciendo. Pero sin importar esto, él no dejaba de leer, hasta que una fuerte energía le apartó del libro, fue tan fuerte que le empujó algunos metros hacia atrás. El golpe le había hecho cerrar los ojos, pero al abrirlos, estos ya no eran del color azul, sino de un negro brillante. Esto obviamente él no lo veía; lo que sí veía eran esas sombras por doquier, la habitación estaba en penumbras, la poca luz que se veía era la que entraba por la ventana desde la calle, así que claramente podía ver aquellas sombras revoloteando por toda la habitación. Al contrario a lo que ocurrió en Park Avenue, esta vez no podía hacer nada, se sentía atrapado por esa oscuridad, sin embargo como si de un estallido se tratara, aquellas sombras se materializaron. Ya no eran simples sombras, eran figuras humanoides, pero sin ningún detalle, ni rostro ni nada. Por lo menos tres de estas figuras saltaron hacia él, pero seguía en ese estado de perdición, las entidades seguían atacándole, y fue ahí cuando pareció caer en sí, su mente y su cuerpo, mas no sus ojos, estos seguían oscuros. Al no poder conjurar, empezó a atacar cuerpo a cuerpo a cuerpo a las pequeñas pesadillas. Estas tenían bastante fuerza, muchísima más de lo que podrían mostrar sus delgados y esqueléticos cuerpos. Estas criaturas estaban sobre él, rasgaban su ropa y aruñaban su cuerpo. Stephen como pudo tomo un estilo de cuchillo que estaba en la pared, y empezó a apuñalar a estas cosas. Cuando lo hacia, estas chillaban de una forma espeluznante. Pero ¿Qué pasaba con la gente que estaba afuera de esa habitación? ¿Es que acaso no escuchaban lo que estaba pasando? Pues parecía que no. Llegó un momento en el que la puerta se abrió y en donde pudo observar que por el pasillo revoloteaban sombras, pero uno de estos seres entró y fue directo hacia él. Con el instrumento que llevaba en su mano, Stephen intentó alejarle, pero este no lo hacía, hasta que él pasó ese artefacto filoso por toda el área abdominal. A diferencia de los demás, este no chilló, ni se desvaneció ni nada por el estilo, solo cayó lentamente en sus brazos. Stephen nuevamente sintió aquel golpe de hacia un momento, solo que no le movió del lugar, solo le hizo recobrar la noción del tiempo, del espacio, de todo, incluyendo sus propios ojos. Pero cuál fue su sorpresa al caer en sí, pues no habían sombras, no habían criaturas ni entidades, nada. Pero en sus brazos estaba Darcy, inconsciente y con una gran herida en si abdomen.