Bounce Back (jaydick)

30.

"Va a seguir doliendo pajarito, pero si lo superas con tu alfa, ambos podrán levantarse" -Michael dijo mientras el otro rubio tomaba su mano despacio-.

"Además, es tu alfa, y te ama, con todo y lo que hagas o no hagas" -El menor asintió, lo sabía.

Constantine seguía en silencio, y volvió a suspirar mirando el televisor, sintió el aroma triste del alfa sin poder evitarlo y se giró ligeramente a verlo.

"No es tu culpa, no pienses que es tu culpa, jamás creas eso, no es tuya ni de tu bonito omega" -Constantine por fin habló sorprendiendo a su acompañante, Jason se giró despacio para verle serio-. "Tampoco es de los ángeles, puede que si del bastardo al que mataste, que por cierto, el tiro en el centro de la cabeza fue perfecto" -Suspiró-. "Pero así es como tenían que ser las cosas, por algo es que no serás padre aún, puede que en un futuro si, ¿Batman adoptó a todos sus hijos no? No hay nada de malo en eso, además, tu omega te necesita"

"Él no quiere saber nada de mi" -Jason habló con la voz ligeramente ronca sorprendiendo al rubio alfa-.

"Tu preciosidad no debe de querer saber nada de nadie, perdió a sus bebés, no va a poder superarlo en un buen tiempo, eran sus hijos, está roto, igual que tú, conozco esa mirada" -El menor suspiró sentándose mejor-. "No es tu culpa, deja de pensar eso, las cosas a veces pasan sin que las queramos. Así que come algo niño, y deja de pensar ideas suicidas"

"¿Cómo sabes que pienso eso?"

"Porque si no lo hicieras, algo realmente estaría mal en ti" -El menor asintió, el rubio alfa tenía razón, aunque odiara admitirlo-. "Mereces ser feliz, y tu omega también, no dejes de pensar eso" -Constantine se puso de pie caminando a la cocina, pero dejó a Jason pensando seriamente en lo que acaba de decirle, suspiró profundo y admitió mentalmente que tenía razón-.

Jason se levantó del sofá subiendo las escaleras, iba a caminar al cuarto de su omega, pero notó su propio aroma y prefirió entrar a su habitación, se dio una larga ducha de agua tibia analizando sus opciones, y aunque tenía varias alternativas, sabía que lo mejor era hablar con Richard.

Pasó por su cabeza irse, no volver y a veces enviarle mensajes a su familia para que supieran que estaba bien, pero se dio cuenta de que no soportaría una vida alejada del omega. ¿Por qué debería hacerlo? Ellos estaban hechos para estar juntos le pesara a quien tuviera que pesarle, merecían ser felices aunque sea en esta vida.

El alfa salió de la ducha mirándose en el espejo, y se preguntó si podía verse peor, realmente se veía mal, cansado, incluso amarillo, los huesos se comenzaban a marcar en sus rostro, y los trabajados abdominales no relucían como hace un mes, Jason se preguntó si su omega estaría mejor, no lo había visto, no se atrevió a hacerlo ni cuando Alfred se lo pidió, no quería que lo rechazara de nuevo. No él.

Así que se colocó unos ajustados jeans que al parecer ya no le quedaban tan ajustados, y una playera roja de manga larga. Suspiró profundo después de volver a secar su cabello y salió de la habitación para dirigirse a la del omega. Se arrepintió al escuchar aún las voces de los ángeles y mejor volvió a bajar las escaleras.

Damian estaba en la sala, el joven alfa se sorprendió al ver a Todd limpio, en otra ocasión hubiera hecho un mal comentario. Por el momento sólo le regalo una ligera sonrisa.

"Veo que aceptaste seguir mi consejo" -Constantine entró de nuevo a la sala esta vez con una taza de café en la mano, le sonrió al alfa más chico y se sentó frente a la mesita-. "Extrañaba el café de Alfred, de todas las dimensiones, nadie prepara el café como ese beta"

"Gracias por el cumplido, señor" -Dijo Alfred pasando de largo a la baticueva-.

"¿Por qué habías tomado del café de Alfred antes? Mi padre jamás invita a nadie a beber nada a men-" -El joven alfa frunció el ceño, y miró a Jason, por primera vez en meses, el alfa sonrió ligeramente divertido-. "Buen momento para recuperar tu sentido del humor, Todd, al menos ya no apestas a gato muerto"