Mi Preciada Droga.

Capitulo 6: Cigarrillo.

Daniel.-

Me desperté, he hice mi rutina de siempre, hoy estaba sólo en mi casa o departamento, lo que sea.

Me bañe, me vestí, tome mi jugo, las llaves de mi auto y mi celular, tenía prisa ya que se me hacia tarde, si... Otra vez.

Conduje hacia el instituto, mientras manejó les voy a narrar lo que paso en la casa de los Greng's.

Comimos, la mama de Bobby y Dallas pregunto que como nos había ido, Bobby le contó sobre su "vocabulario" y el reporte que le dieron, Dallas sobré la chica nueva, ósea Sam y yo sobre mi reporte y Sam.

Su mama nos dijo "Ay muchachos" y reímos, por que eso no es el regaño que te esperas de una madre.

¿De qué hablaba de Sam? De qué la salve de Jason Doosan.

Soy todo un héroe.

¿Y adivinen que? Jason es el ex-novio/novio de Samantha Starker Black.

No esta nada confirmado de que si ya han roto o no, por eso es ex-novio/novio, término largó pero que se le va hacer.

Y todavía no se cuál es la historia de que son o no son pareja y el por que, si Sam se supone que es nueva y el es un viejo alumno repulsivo cara de rata.

¿Celos? ¿Me están llamando celoso? Mátenme si lo estoy, me esta carcomiendo.

Ah si, se me olvidaba, no se por que le dije "Ángel", sólo salió de mi boca, así.. Puff, salió, solito, sin aviso.

Me estaciones y vi a mis conejillos de indias los vi hablando, apague mi auto y salí y me dirigí hacia ellos.

-Valla, 10 minutos antes de que comenzarán las clases, bien hecho Daniel. -Dijo Mack.

-Mickael Greng, por favor cierra la boca. -Le dije.

-¿Alguien está de mal humor hoy? -Dijo Dallas.

-Presiento que este será un buen día. -Me encogí de hombros y metí mis manos al bolsillo del pantalón.

-Carajo, ¡odió estos uniformes! Me hacen ver in atractivo. -Dijo Bobby apenas llegando.

-¿Qué no se supone que vienes con tu hermano? -Le dijo Mack sacando una cajetilla de cigarrillos.

-Si pero un señor tenía un carrito que vendía churros, ¿quieren uno?

-No, se me antoja mejor un cigarrillo. -Le arrebaté la cajetilla a Mack y prendí uno.

Aspire el humo en boca y lo exhale, puro placer desvaneciendo se.

-Será mejor que se fumen eso rápido, ya tenemos que entrar. -Nos palmeo Dallas y comenzamos a caminar.

Termine lo más rápido que pude con mi cigarrillo y mire a Mack que caminaba todo normal.

-¿Y tu cigarrillo?

-Terminado, experiencia. -Me guiñó un ojo.

-Ojalá te lo ayas metido por el culo. -Le dijo Bobby y Dallas no evito reír.

Aspire profundamente mi cigarrillo, exhale el humo y lo lance hacia mi derecha.

-Auch, mierda. -Chillaron.

Me gire y vi que era Sam, tallando se su pierna.

Mi cigarrillo le callo en su pierna, ay Daniel, ¿por qué no se lo arrojaste a otra persona? no a Sam.

Me dirigí hacia ella.

-¿Estas bien?

Ella empezó a toser y volvió a su postura normal.

-Dios, tu aliento. -Dijo y me miro.

-Ay por dios, Nicols.

-También me sorprende verte. -Le dije y le sonreí.

-¿Acaso no te lavas los dientes en las mañanas? -Me dijo y comenzó a caminar, la seguí.

-Si.

-¿Entonces por que tu aliento huele como sí hubieras comido petróleo? -Me miro y se echo a reír.

-¿Tal vez por que me he fumado un cigarrillo?

-¿Ósea que tu cigarrillo cayo en pierna? -Se señalo.

-No, tu pierna cayo en mi cigarrillo. -Ella arqueó una ceja.

-¿Mataste todo sabes? No me gustan los cigarros, los asqueo, me enfermiza. -Entramos al instituto y la acompañe a su casillero.

Teníamos la misma clase a primera hora así que no había problema.

-¿A qué te refieres?

-Me comenzabas a caer bien, a pesar de lo que he escuchado, aparte de tu manía de actuar con las chicas para que caigan rendidas a tus pies, tenis que rematar con que fumas.

-Si te refieres a que si fumo para ser más atractivo, no es así. -Le rete.

-¿Entonces por que? -Cerro su casillero.

-Por mi propia decisión.

-Okay, pero tu tendrás que pagar la crema para la costra en mi pierna por tu cigarro.

-¿Quieres que te sobé? -La agarre de las caderas y ella se espantó.

-Malpensado. -Me golpeo con su libro en mi pecho y yo le sonreí.

Entramos a la clase de lenguaje y me senté en mi lugar y Sam alado de mi, ella acomodó sus cosas y se recargó en el pequeño escritorio para dos.

-Pensé que no te caía bien y ahora estas rendida a mis pies. -Dije irónico.

-¿Disculpa?

-Te sentaste en mi mesa cielo.

-Para tu información, es la única mesa vacía en toda el aula genio. -Formo una sonrisa cínica y presto atención a la clase.

-Se que me amas. -Sonreí satisfecho.

Estaba tan aburrido, el profesor Ben estaba explicando sobre como llego la lengua francesa a nuestra país y la verdad me estaba muriendo de sueño, que por lo visto, Bobby ya se quedo dormido.

Gire mi cabeza y la vi, prestando atención, parpadeó un par de veces y no notaba mi presencia.

Mi mirada se fue hacia sus piernas que, dios.. Que piernas. Y vi la marca de mi cigarrillo.

Rose mi dedo por la parte y ella se sobresalto, llamando la atención de todos.

Ahogue una carcajada.

-¿Señorita Black, le sucede algo? -Le pregunto el profesor Ben.

-No, no es nada. -Y Ben se volteó.

Su mirada se conectó con la mía.

-¿Qué acabas de hacer? -Me susurro.

-Sanando te la herida. -Mire sus ojos.

Sus ojos, sus ojos tan grandes con esas pestañas que agh, te derriten.

-Esa no es la forma en la que acordamos.

-Tu y yo no acordamos nada. -Otra ves le rete.

-¿No has pensado en comprar mentas después de que fumes?

-¿No te han dicho que tus labios se ven apetitosos? -Le devolví la pregunta.

-¿O chicles?

-¿Y tus ojos penetrantes? -Le sonreía y su mirada era retadora.

-No te preocupes, puedo seguir todo el día. -Me fulmino con la mirada y bufo.