Promesa| Fanfic Namjin

Mientes.

Su corazón estaba lleno de tantas emociones que justo ahora no podría ni describir la mitad ¿Por qué había sido ese beso? La pregunta rondaba demasiado en su cabeza no podía concentrarse demasiado en el contacto de ambos labios pero aún así le encantaba sentir esa sensación en su cuerpo.

—Umh...—

Estaba realmente confundido pero no quería escuchar alguna respuesta, no necesitaba que aquel momento fuese arruinado por palabras sin sentido, aunque se fuese mañana quería quedarse con ese recuerdo para siempre, quería seguir con ese recuerdo en su mente.

  — Eso... No quiero decir nada, al menos por ahora. Iré por algo de comida, vuelvo en unos minutos con algo caliente para que te alivies un poco, quítate esa ropa mojada no quiero que empeores aún más.— 

Aunque quisiera, sus cuerdas vocales no podían hacer ningún sonido, solo quedaba asentir a lo que el mayor le había dicho. Se retiró su ropa que aun seguía mojada por aquella noche para después seguir durmiendo, no quería  levantarse de aquella cama, quería seguir durmiendo, escuchó un leve golpeteo se giró para darle a la puerta no quería verle para ponerse rojo debía ser fuerte aunque sea un poco. La puerta se abrió no iba a durar mucho cerrada y eso lo sabía.

  — Jin, traje algo de comida. Debes comer y tomar tus medicinas después.— 

Dejó la comida en una pequeña mesa, estaba caliente así que podría esperar un poco para que se enfriara, se acostó al lado de aquel joven abrazándolo por la cintura el momento era simplemente hermoso.

— ¿Debería decírtelo? Realmente no lo sé, no sé si debería o callarlo unos meses más.—

No quería girar no quería enfrentarse a las palabras que le dijera aquel joven, no debía llorar sea cual sea lo que fuese a escuchar debía ser fuerte.

  — Umg... Dime.— 

No expresaba ninguna emoción en las palabras que decía, felicidad o tristeza. Solo se escuchaba  su calmada respiración tocando aquella almohada que abrazaba con fuerza esperando a que dijera algo que no le doliese, no sabía aun de que se tratase pero sabía que sería algo que no le agradaría mucho.

  — ¿Cómo comenzar esto? Es difícil. No es algo que no me cueste decirlo, me duele el pecho de tan solo pensar que harás ¿Te harás? ¿Te alejarás de mí?—

El corazón de ambos chicos latía con fuerza, mientras azotaba con la misma fuerza el tórax. 

  — No lo sé... Te conozco desde hace tantos años que dudo que te des la vuelta y jamás vuelvas conmigo, que te alejes sin decir ninguna palabra. No puedo... Imaginarme el tiempo sin ti, la vida que juramos que tendríamos juntos se rompiera tan fácilmente. El motivo de tantas palabras bonitas es para decir  simplemente que me gustas desde hace un tiempo y ya no puedo más con esto...—

Estaba siendo consumido por la felicidad no podía creer que aquellas palabras fuesen verdad, dentro de él quería  creer que era una mentira. Que nada de esto era real.

  — Mientes. Solo lo dices para que me sienta mejor,— 

Se negaba a aceptarlo, una parte de él sentía que lo que estaba escuchando era mentira, que solamente estaba siendo mimado.

— Si mintiera no me hubiera tomado meses decirlo.— 

Meses, esa palabra lo había destrozado por completo ¿Por qué tenían que ser meses y no días? Entonces no era de él de quien se había enamorado si no del verdadero Jin pero ¿Y eso que importaba? El día que había tomado su mano era él, el que recibió el beso era él, no Jin. Partee de ese amor también le correspondía.   

  — Tú también me gustas...— 

— Pero eso no significa que somos novios Jin. No quiero pedírtelo de manera tan vaga. —

Asintió el menor, seguía aun sin verle no quería mostrar su vergüenza ante él.

  — Tengamos una cita hoy. Quiero salir contigo tomado de la mano—  

Sabía que pedirle algo a NamJoon era casi imposible que aceptase pero hoy lo aceptó sin dudarlo.

  — Entonces voy a arreglarme cariño. Vuelvo en una hora por ti.— 

El mayor salió de su habitación dispuesto a cambiarse, mientras el chico estaba tan emocionado que seguía sin creerlo, después de tantos años imaginándolo. Saldría con el chico que había capturado su atención desde el momento que le vio. Ahora solo quedaría esperar esas horas para poder irse con él como la bonita pareja que serían.