una vez un muchacho llego a la luna, se dice que su vida en la tierra era demasiado triste, quizas porque estaba enfermo, se dice que uso una escalera muy muy larga para trepar, que se aferro con sus manos a las estrellas y uso sus puntas para llegar hasta ahi, se dice que ese joven era alguien que con un poco de esperanza logro alcanzar el espacio...
fueron dias largos, el hombre en la luna cantaba y jugaba con las estrellas fugaces, recorria cielos desconocidos mientras unia las constelaciones...pero poco a poco comenzo a entender que la luna era demasiado grande...demasiado para una sola persona...
"oh gran diosa esperanza, si tan solo tuviera un amigo...es lo unico que te pido..." susurro una noche mientras entrelazaba sus manos a la altura de su pecho con una sonrisa boba, acurrucandose en un crater para poder conciliar el sueño.
la diosa esperanza era demasiado indecisa, pero tambien era justa, asi fue que un dia llego flotando en un puñado de globos un pequeño payaso, uno que portaba una mascara de porcelana de roja sonrisa, una mascara con pequeñas grietas...
"auxilio! que alguien me ayude! mis globos van a explotar!!" exclamo el carnavalezco ser mientras se aferraba a los hilos coloridos, aquellos globos no podian resistir la estratosfera y estaban volviendose inestables.
el hombre lunar no dudo ni un segundo en acudir al llamado, extendiendo sus brazos en el justo momento en que los globos colapsaron y atrapando al pequeño payaso, quien presa del miedo lo abrazo con fuerza.
"el mundo es realmente doloroso" se excuso una vez ya mas tranquilo, "la tierra es un lugar horrible donde la gente tiene feos gustos de helado...es por eso que decidi flotar hasta aqui"
no contento con esa explicacion de su historia, el hombre lunar pregunto de nuevo al dia siguiente.
"el mundo es realmente doloroso" prosiguio con su tono alegre, "es que me parece injusto que solo halla dos colores de manzanas!"
...seguia sin ser suficiente...
dia tras dia el hombre lunar preguntaba, recibiendo todo tipo de respuestas extrafalarias que nada tenian que ver con nada, mientras observaba como pequeños pedacitos de porcelana caian de la mascara, levantando un poco de polvo que desaparecia en instantes.
el hombra lunar estaba cansado de jugar a ser tonto, pero aquella compañia le era demasiado calida, por primera vez podia sentir el calor de otra mano humana, pasando sus dias entre bromas cortas y largos silencios que a nadie incomodaban...parecian ser felices...pero en las noches lloraban...
"quitate la mascara, la porcelana te esta lastimando" alego mientras extendia su mano hacia el distraido payaso, quien con su careta teñida con pequeñas manchas carmesi negaba reprimiendo quejidos de dolor.
"quitate la mascara" insistio otra vez; "no hay nada que temer...estas seguro conmigo..."
y entonces fue ese momento en que todo se detuvo, en que esas pequeñas manos palidas retiraron la mascara de porcelana, la que por dentro estaba escamada, la que le arranco un grito de dolor mientras algunas partes de piel se cortaban dejando sanguinolentos girones, y esos enormes ojos purpuras llenos de lagrimas buscaban contencion en un hombre alto y atonito...
"...el mundo es...realmente doloroso...por eso quise venir a morir solo aqui...pero tu estabas aqui...¿por que estas ayudandome?" respondio a la pregunta diaria con la verdad, sus lagrimas cristalinas se mezclaban con la sangre en su rostro y rodaban hacia el blanco atuendo.
"todo estara bien, curaremos esas heridas, la esperanza estara de nuestro lado" el hombre lunar acurruco al payaso entre sus brazos, aun si su camisa se manchaba, luego limpio sus heridas y las vendo con cuidado, decorandolas con polvo de estrellas y hermosos destellos de galaxia.
pasaron jornadas enteras hablando de las cosas que el payaso temia, desembolsando viejos miedos que esa mascara traia consigo, dando miles y miles de vueltas en las cosas, como si fuera una lucha tonta para ver quien tenia razon!
...pero...aunque hablaran y hablaran, nunca llegaban a nada...siempre era el mismo vacio para ambos...
"¿y si bajas?" el hombre lunar sugirio con una sonrisa confiada, haciendo que el mas pequeño se estremeciera.
"no hay manera!! no puedo regresar, es imposible!! yo-" el discurso fue acallado cuando el mas alto coloco su dedo indice en aquellos pequeños labios.
"...solo es imposible si tu lo ves asi...hagamos que lo imposible sea posible..." exclamo con una sonrisa brillante, dandole todas sus fuerzas y animos para que pudiera atreverse a bajar de nuevo a la tierra, dandole una chance de animarse a vivir de nuevo...aun si era dificil...aun si le causaba dolor a veces...el mundo no podia ser perfecto pero se podia volver hermoso!
clavo la escalera en la parte mas baja de la luna, la estiro lo mas que pudo, pero las alturas eran diferentes y el pequeño payaso no podia alcanzarla, fue por eso que el hombre lunar decidio estirarse y sostener la escalera, ayudandolo a descender aun si eso implicaba un riesgo grande...quizas porque podia ver un rayo de esperanza en aquel pequeño ser, quizas porque se habia vuelto su esperanza despues de todo...
escalon tras escalon, el payasito fue alejandose hasta poder aferrarse con sus manos a la escalera, sonriendole honestamente a aquel muchacho que le estaba posibilitando el regreso a ese mundo al que decidian darle otra chance.
...silencio...
...la luna se volvio silenciosa mientras el muchacho se sentaba mirando hacia abajo, hacia la tierra, con una sonrisa tonta al ver a la nada misma de un planeta que ya no era su hogar...
...debia estar feliz...el habia ayudado a alguien...habia dado todo de si para brindarle alegria...
...entonces...¿por que sus lagrimas no dejaban de salir?...
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El Payaso y El Hombre En La Luna (Oumota/Oneshot)
Fanfiction•••...erase una vez, un joven que subio a la luna...•••