Capítulo seis.

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"-Jihoon, ¿me oyes? -balbuceó una voz casi inaudible. Sonaba triste.
-¿Eh? -soltó Jihoon un tanto confuso, ¿De dónde venía la voz?
-Jihoon, Jihoon, sálvame. -susurró una voz a su oído. Jihoon quería moverse y ver al portador de la voz, pero una extraña fuerza no le dejaba moverse.
-¿Salvarte? ¿De qué? -dijo intentando no parecer asustado.
-Jihoon, por favor, ayúdame, no puedo más. "

Y de repente un fuerte estruendo se escucho en la habitación, Jihoon frotó sus ojos con cansancio. Tras eso los abrió, viendo a Jisoo en una posición un tanto extraña.

- ¿Eh...Qué se supone que haces? -preguntó Jihoon. La situación era bastante graciosa; Jisoo se encontraba en ropa interior, subido a una escalera al borde de la ventana de la habitación de Jihoon con un ojo morado y una manzana en su mano derecha.
-Verás... Intentaba hacerte el desayuno. -dijo Jisoo avergonzado.
- ¿En ropa interior? Como no me hagas unos huevos revueltos... -bromeó Jihoon.
- ¡No seas tan sucio! Simplemente mi horóscopo decía que por la mañana lo mejor era vestir como Dios te trajo al mundo, ya que eso traía suerte. -dijo Jisoo con toda la naturalidad.
- Voy a olvidar el hecho de que un ángel crea lo que dice un horóscopo, y de que encima crea que ha venido al mundo en calzoncillos; pero, ¿y el ojo morado? -dijo Jihoon con sarcasmo.
- Las escaleras de esta época son terribles, tan pronto te subes, tan pronto te caes. -suspiró Jisoo.
- ¿No has pensado en usar tus alas? -dijo Jihoon perdiendo la fe en su "ángel guardián".
-Oh, no había pensado eso...

Interrumpiendo la conversación, el timbre sonó, haciendo que Jihoon saliera disparado a abrir la puerta.

-Hola, somos los Kwon, recientemente vimos que te mudaste aquí y queríamos darte la bienvenida. -soltó una señora mayor que inmediatamente reconoció como la amable madre de Soonyoung.

Un sentimiento mezclado entre culpa y tristeza se inundó en su interior. Nunca pensó en Soonyoung, nunca pensó en su familia y mucho menos en cómo se sintieron en el accidente que provocó la muerte de Jihoon y Soonyoung. Nunca pensó en la repercusión.

-Oh, muchísimas gracias, ¿quieren pasar? -dijo Jihoon con una falsa sonrisa.
-Bueno, si no es molestia. -dijo la abuela de Soonyoung.

Rápidamente les dejó pasar, indicando que podían pasar.

- Toma Jihoon, dales esto. -dijo Jisoo entregándole una tarta de manzana recién hecha. Al fin y al cabo, las manzanas eran para eso.

Con rapidez, cogió la tarta de manzana, y volvió al comedor, tropezando con la alfombra y cayendo al suelo con la tarta de manzana incluida.
Avergonzado, se disculpó, haciendo que la madre de Soonyoung soltará una pequeña risita. Su risa y la de Soonyoung eran iguales, siempre lo fueron.
-Kwon Eunjin, ¿de qué te ríes? -soltó la abuela de Soonyoung avergonzada por el comportamiento de su hija.
-Perdón, pero me recordó a alguien que no veo en mucho tiempo. -se disculpó ella. La señora Kwon siempre fue muy amable y juvenil, cuando Jihoon iba a la casa de Soonyoung, ella siempre tenía una sonrisa. Ella sonrió hasta cuando el padre de Soonyoung murió, siempre se mantuvo positiva ante ése tema. "Ahora estará en el cielo" decía.

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Éste capítulo ha tenido más humor que de costumbre, pero me apetecía hacer una situación así.
Gracias por leer, bonitxs.

Insomniᥲ. ⚰️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora