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Llegamos al centro comercial y nos reencontramos con Amaia y Alfred. Entramos en un par de tiendas todos juntos pero era un caos.

- Oye y si nos separamos en grupos? Así vamos mas rápido

- Si, mejor chicos y chicas y cada uno entra en sus tiendas.

- Vale, pues quedamos a las 14.00 en frente de la pizzería

- Perfecto, nos vemos!

Raoul, Alfred y Cepeda se fueron para un lado y nosotras para otro.

Fue muy incomodo porque sabía que Miriam me estaba evitando. Cada vez que me ponía a su lado rápidamente se movía o hacia un movimiento extraño para alejarse. Cuando daba mi opinión ni si quiera me miraba y si contestaba era borde.

Estuvimos por todo tipo de tiendas hasta que terminamos en el Primark.

- Miriam y yo subimos a la parte de decoración un momento, no os mováis mucho.

- Vale

- Pero si no me voy a comprar nada, yo quiero ropa.

Pero no contesté, solo le agarré de la mano hasta llevarla a la parte de decoración.

- ¿Qué te pasa?

- Que te pasa a ti

- A mi nada

- ¿Porque me evitas Miriam?

Lo solté porque no quería dar más vueltas al tema.

- Mira, me dijiste que estaba todo bien entre nosotras pero me parece que no es así.

- Creo que me estas obligando a tener algún tipo de relación contigo y la verdad es que no me apetece para nada. Que te dijera que estaba todo bien no significa que nos comportemos como mejores amigas.- Me estaba contestando muy borde y no sabía por qué

- No te estoy pidiendo ser mejores amigas... Simplemente que me hables cuando te digo algo.

No dijo nada. Me estaba empezando a mosquear e intentaba tranquilizarme.

- Creo que aquí la única que está intentando arreglar las cosas soy yo y me parece que eso quiere decir que a ti no te importa nuestra relación.

- Ana, si me importa.

- Pues no lo parece

- Es que no es tan fácil.

- Ya lo sé.

- ¿Te puedo preguntar algo?

- Claro

- Antes de que entre nosotras pasara algo, ¿habías tenido algo con Mimi?

- ¿El mismo día?

- Antes de lo nuestro, me da igual cuando.

- Miriam, ya lo sabes.

- ¿Sentías por ella lo mismo que sentías por mi?

- Era diversión

- ¿Lo suyo o lo mío?

- Chicas, vamos ya a la pizzería que nos están esperando.

Era Aitana.

Una vez en la pizzería nos sentamos en la mesa mas grande. Intenté no sentarme cerca de Miriam, pero fue imposible. Terminamos en diagonal.

- Miriam, a que pizza en gallego se dice hassamba?

La cara que le puso Miriam fue de lo mas adorable. Se notaba mucho cuando mentía así que cuando dijo que si y después se empezó a partir de risa no me extrañó. Me encantaba cuando se reía.

Me pillo mirándola, otra vez y simplemente me sonrió y bebió de su vaso. Yo me limité a bajar la mirada para seguir comiendo mi hassamba.

- Cepeda y yo vamos a fumar, vienes Ana?

- No, no he terminado.

- Ay, yo quiero terminar de ver tiendas. ¿Aitana me acompañas?

- Claro

- ¿Alguien quiere un helado?

- Yo. Te invito.

Perfecto, Amaia y Alfred también se iban.

- Yo espero a que Ana terminé.

Me podría haber esperado esa respuesta de todos menos de ella. Una vez se fueron todos, la leona empezó la conversación.

- Oye, canaria...

- Dime

- Es cierto que me comporté mal, no tenía por qué contestarte de esa manera. Pero es que por mucho que te dijera todo aquello la última vez.

- Al grano, por favor.

- Joder, Ana, que me importas y no te quiero perder.

Casi me atraganto. ¿Había escuchado bien? Miriam Rodríguez me acababa de decir que le importaba. No me dio tiempo a contestarle porque se levantó de la mesa.

- Voy al baño, no tardes.

Y no tardé. Bebí lo último que me quedaba de cerveza y fui directa al lavabo. Demasiado directa porque metí el portazo del siglo.

- ¿Ana?

Miré que no hubiera nadie, aunque igualmente me habría dado igual. Miriam estaba a punto de entrar al baño. La verdad es que en ese momento mi intención era besarle, pero no lo hice.

- Quería avisarte de que ya he terminado

- ¿Por eso entras tan rápido?

- Si.

Cuando salimos de la pizzería nos encontramos con Aitana y Nerea.

- ¿Adivináis quien va a venir?

Aitana no paraba de saltar a nuestro alrededor

- ¡Mimi y Ricky!

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