PSIQUE [BNHA]

Hábitos. [KiriBaku]

▶Pareja: KiriBaku
▶Temática: romance,  comedia
▶Occ

Bakugo Katsuki podía ser un tema de qué hablar, su fuerte carácter,  la forma que se movía en batalla, su poder y claramente su cuerpo,  pero había algo más que le encantaba hablar a Kirishima de su novio: sus hábitos.

Habían pasado alrededor de dos meses desde que Bakugo por fin le había dado el sí a la relación,  fue realmente difícil en un comienzo,  y aunque Bakugo no le repudió cuándo se le confesó las cosas realmente cambiaron de golpe entre ellos. Bakugo no le dejaba estar en su habitación cuándo se estaba cambiando, no le dejaba tocarle demasiado,  tampoco irrumpia en su habitación,  no se apoyaba en él cuándo leían o jugaban cómo antes, claramente se notaba incómodo.

ーPero, tú sufriras ー

Fue la respuesta que tuvo de Bakugo cuándo le preguntó sí tenía asco de su persona, la preocupación que Bakugo sintió hacía él sólo habían logrado conmoverlo al punto de las lágrimas,  así llorando por primera vez frente a él.

Luego de un mes, cuándo por fin había tomado la decisión de darse por vencido fue que el suceso sucedió.  Sin querer, cuando estaba yendo a la cafetería a la hora de almuerzo pudo notar la cabellera  rubia de su mejor amigo entre los pasillos de las escaleras, pensó saludar, llevarlo con él,  pero Bakugo no estaba sólo,  justo en ese momento una chica se le estaba confesando y esa realidad le espantó. Comenzó a evitarlo,  y el rubio a buscarlo.

Fue un tira y afloja que duró por lo menos una semana, hasta que Bakugo se hartó y de un puñetazo lo derribó para luego secuestrarlo a su habitación. 

Ese día durmieron abrazados, Bakugo no le dijo nada, pero toda la noche sus brazos le rodearon. Esa noche nuevamente lloró,  porque lo entendió,  Bakugo le necesitaba.

ー¿Quieres intentar salir conmigo? ー

Preguntó en la mañana cuando sus ojos se abrieron y notaron que Bakugo le observaba desde la altura, no tuvo una respuesta verbal pero Bakugo tampoco negó la posibilidad. Desde ese momento se convirtieron en ese algo más.

Bakugo era vergonzoso,  no le gustaban mucho las muestras de afecto,  menos en público,  pero Kirishima aprendió a notar cómo Bakugo siempre se interponia entre él y alguien más si estaban muy cerca, casi siempre lo insultaba, y fue eso lo que le hizo notar sus celos, Bakugo era un celoso de primera.

Su segundo hábito eran los momentos que buscaba su calor, habían muchas veces que se quedaban jugando o viendo una película en la sala común,  siendo casi todas las veces dónde Bakugo le cruzaba las piernas por encima para tenerlo cerca y robar parte de su calor, porque era un friolento.

Su tercer hábito,  y uno de los más lindos era la búsqueda de contacto. Al caminar siempre sus hombros se rozaban, también sus manos, y cuándo estaba seguro que nadie les miraba decidía tomarla, era tan lindo que Kirishima no podía evitar sonreír como idiota cada vez que sucedía.

Otro hábito muy extraño era su forma de dormir, había sido testigo del mal dormir que tenía Bakugo al dormir en solitario, mas de una vez lo encontró en el suelo en las mañanas, pero cuando dormían juntos Bakugo normalmente le daba la espalda siendo Kirishima quién le abrazaba, y aunque Bakugo tenía mal dormir siempre despertaba abrazando su pecho, siempre en la misma posición.

Otro hábito que le hizo reír fue la forma tan varonil que tenía para lavarse los dientes,  le causaba gracia que tuvieran que ir a comprar casi siempre cepillos de dientes juntos porque los destrozaban.

Un hábito que se guardaría hasta la tumba era la admiración que poseían los ojos de Bakugo cuando veía a un héroe en la privacidad de su habitación y cómo fruncia inmediatamente el ceño cuando alguien lo notaba.

ーNh.. I need pee ー

Y allí estaba otro hábito de Bakugo, ese hábito que sólo surgía cuándo en medio de la noche necesitaba orinar, siempre lo decía y casi siempre en cualquier idioma que estuviera en el momento. Luego se ponía en pie y muy adormilado iba al baño para volver a acostarse a su lado y abrazar su torso, incluso habían veces que le metía las piernas entre las de él,  porque tenía frío y buscaba su calor en momentos cómo ese; porque para Bakugo, tener a Kirishima durmiendo a su lado ya era un hábito.