Sakura II

SAKURA UCHIHA

DISCLAIMER:

Naruto pertenece a Kishimoto y esta historia, "Sakura", es una adaptación de la película de Disney que salió en el año de 1998.

Favor de NO plagiar la historia y si algún día gustas hacer una adaptación, puedes hacerlo siempre cuando me menciones en tu historia.

ACLARACIONES:

(bla) *bla = notas de autora.

bla, bla= flashback y onomatopeyas.

"bla, bla"=POV de personajes.

🌸🌸🌸🌸= cambios de escena/escenario

Advertencia: este capítulo estará algo HOT 🔥🔥🔥🔥🔥🔥

EN EL CAPÍTULO ANTERIOR...

Sakura miraba a todas partes, tratando de encontrar un milagro, pero desgraciadamente no había uno, así que sin pensarlo, una lágrima rodó de sus ojos hasta perderse en la copa que sostenía que su futuro abuelo le había dado.

Kakashi miraba toda la escena desde la estatua.

—Tengo que impedirlo, pero qué puedo hacer sin soy un fantasma. Nadie me ve.

—Al juntar este nudo —decía el emperador mientras amarraba con un lazo las copas de ambos futuros novios —, no solo juntamos dos vidas, sino también dos reinos. Así que yo declaro que... ¡Aaaah! —gritó espantado Ōnoki pues alguien había lanzado un shuriken impidiendo que el rey siguiera casando a los jóvenes de ahí —. ¿Pero quién se atrevió a lanzar esto?

—¡Yo! —se escuchó una voz a lo lejos haciendo que Sakura volteara y cuando vio al dueño de esa voz, su corazón no pudo con la alegría que sentía en esos momentos.

—¡Sasuke-kun! —dijo ella con lágrimas en los ojos, viendo cómo su amado había vuelto de la muerte. Sin duda alguna el milagro que ella había esperado, llegó justo en el momento.

CONTINUACIÓN...

—¡Wohoo! ¡Sasuke al rescate! Qué suerte tienen porque yo ya iba a entrar en acción—dijo Kakashi.

Sakura al ver a Sasuke salió corriendo y se aventó hacia los brazos de su amado.

—Sasuke, estás vivo —dijo ella con lágrimas en los ojos, pues era tanta su emoción que no pudo contenerlas.

—Claro, no querrías una boda sin mí —dijo con una sonrisa ladina.

—General, esto es un ultraje —interrumpió el emperador Ōnoki —, usted debe de irse ahora —ordenaba él.

—¡No me iré de aquí! —dijo con voz autoritaria.

—¡Ah! ¿Qué haces? —le preguntaba Sakura mientras se escondía tras él.

—No lo sé... improvisando.

—Usted no puede deshonrar esta ceremonia.

—¡Rayos! Va a encerrar al Uchiha. ¿Dónde está ese dragón dorado cuando lo necesitas? —dijo el peligris desesperado —¿Cómo voy a...? Aaaah... —decía mientras observaba la estatua tras de él —. Se me prendió el incienso.

—Mi señor, amo a Sakura, y aunque conozco sus reglas, si me acepta, quiero casarme con ella... ahora —dijo él mientras agarraba las manos de su amada.

—¿Qué? ¿Mi hermosa flor de cerezo ya estaba comprometida? —dijo Lee con su voz a punto de quebrarse.

—¡No, claro que no! ¡Qué insolencia! ¡Guardias! —gritaba el emperador mientras ordenaba a los guardianes para que sujetaran a Sasuke.