Los Ángeles vuelan

Capítulo 3:

Maratón 2/3

Volví caminando a la 'guarida' de Damian. Los hombres me gritaban cosas horribles.

-Aquí estan tus cosas-

-Genial-miro el paquete- no pidio mucho, verdad?-

-No-comence a caminar para volver al departamento-

-Nos mudaremos-me pare en seco-

-¿Qué?-voltee-

-Nos iremos Inglaterra-no negue nada, mientras más lejos del pasado mejor-

-Esta bien-

-Prepara tus cosas-continuo- nos iremos mañana-asentí-

Cuando llegue al departamento comence a empacar. Abigail ya había terminado con su cliente así que no me preocupaba salir de mi 'habitación'. Guarde mi ropa y una de mis cajas personales. 

-Apúrate-grito Abigail-

-Que te follen-le enseñe mi dedo del medio-

-Ya lo han hecho, niña- sonrió burlona-

-Perra-

-Idiota-

-Zorra-

-Estúpida-

-Entregada-ella serró su boca, sonreí victoriosa y salí de mi habitación-

-Ok, tienes todo listo-señale mis maletas-Perfecto, escucha niña-me dijo firme-Tienes todo pagado, iras a la Belmont Preparatory School, tienes un departamento en el centro de Londres, entendido?-asentí-Bien, tu vuelo sale en una hora, mejor te vas ya-

-¿Y ustedes?- wow, fue raro que allá preguntado por ellos-

-Iremos en el siguente vuelo, viviremos en otro lugar-sonreí, esto sera perfecto-

Camine hacia un taxi, que me dirijo al Aeropuerto. No debía despedirme de nadie, así que solo me encamine al avión, me senté y mire por la ventana. Quede profundamente dormida, cuando desperté solo faltaban unos minutos para aterrizar. Me asome a la ventanilla para poder observar Londres. Es hermosa. Cuando baje del avión una suave y acogedora brisa me abofeteo causando que mi cabello caiga hacia atrás. Suspire y baje.

Tome mi mochila y la recargue en mi hombro, tome mis maletas y me acerque a un taxi, me dirijo a mi nueva casa. Era perfecta, ni grande ni pequeña. Tenía una habitación, con una cama matrimonial, un baño en la habitación, cocina y la sala juntos, era perfecta. Mis ansias por conocer Londres no podían esperar más tiempo. 

Me bañe y luego me vestí [http://www.polyvore.com/cgi/set?id=96671350&.locale=es] Tome mi bolso y salí del departamento, la misma brisa golpeo mi rostro causando que sonriera como idiota. La noche estaba adornada por millones de luces, persona tras persona caminaba sonriente. Entre a un starbucks, un chico me atendio. 

-Hola- salude, él levanto la mirada de su cuaderno y me sonrio-

Grandes ojos esmeralda, penetrantes. Labios carmesí, piel palida y su cabello era completamente ruloso y despeinado. Tuve la gran necesidad de tocar esos rulos. Parecía Oscar de Pecezuelos. Era sexy...demasiado.

-Hola- sonrio- ¿qué vas a ordenar?-

-Solo un cafe, por favor-conteste y sonreí-

-En un rato estara listo-asentí y busque una mesa con la mirada.-

Me hacerque a una pequeña mesa para dos al lado de una gran ventana. Mi celular sono, era un mensaje de Damian.

'Estamos en (tal calle), ahora viviremos ahí. No te creas que por estar en país diferente no seguiras con tus trabajitos. El lunes comienzas la nueva preparatoria'

-Grandioso- murmure sarcastica-

-¿Qué es grandioso?-pregunto el chico que me atendio, puso el cafe en la mesa-

-Oh..nada-lo mire- comenzare la preparatoria el lunes-

-¿A cuál iras?-pregunto-

-Belmont-comente dejandome caer un poco en la silla, iba a hablar pero lo interrumpieron-

-¡Harry!-ambos dirigimos la mirada a la castaña que había gritado su nombre- ¡Tienes clientes!-

-¡Ire en un segundo!- devolvio en grito, lance una risita-¿Belmont?- asentí- tengo suerte-

-¿Por qué?-

-Ya veras-guiño su ojo- son quince cincuenta- entregue el dinero-

Él me miro detenidamente, buscando imperfecciones. Sonrio de manera satisfecha luego de su expedición por mi rostro. 

-¡Harry!- esta vez grito un hombre de unos cuarenta años-¡deja de coquetear y vuelve aquí!