CAPITULO 2. LOS DIJES

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Miércoles 14 de marzo del 20XX

Estaba esperando a que terminase la hora de lengua para que nos vayamos a educación física. Mientras esperaba jugaba con el lápiz agarrándose de la punta y, agitándolo, haciendo que en mi punto de vista, se viera elástico.
Al escuchar el timbre, empecé a guardar las cosas, agarré mi mochila y me fui del salón. Tuve que irme caminando con Melody hasta el club, en donde hacíamos educación física.
Todo iba tranquilo, hasta que más adelante vimos a dos chicos de nuestro curso yendo hacia el mismo lugar que nosotras.

-Esa sería mi quinta canción favorita- le dijo a su amigo

-Rafa, no entiendo de lo que se trata la canción así que, digamos que te entendí y que me interesó tu charla.- le dijo tratando de cortar el tema.

-que aguafiestas que sos, rubia. -termino de decirle y miro para adelante. El era Rafael, o como. Le dicen, Rafa. El más "bruto de la clase", con su cabellera negra, piel morenita y ojos marrones tirando a verdes oscuros. El otro chico era Pablo, el tenía el pelo rubio princesa, de piel blanquita y ojos azul marino.

-que valor tienes de decirme "aguafiestas" ¿Eh? Te podría pegar- le dijo a Rafa en broma.

-OBVIAMENTE tengo valor.

-siento tan chiquito eres bastante rudo, hobbit.

-¡¡¡CALLATE!!! -fue lo último que dijo, hasta que le pega no tan fuerte en el brazo.

Después de hacer las actividades de educación física, nos vamos todos por caminos separados. Miraba para adelante tranquila, hasta que piso algo, levanto el pie y veo un dije con su cadena. Me resultaba muy familiar. Lo agarro y lo empiezo a mirar, atrás y adelante. Era un dije normal, sólo que adelante tenía. Una figura que nunca había.visto en dijes, era como un seis acostado, igual que la figura que había soñado. No me pareció desagradable, así que decidí ponérselo y conservarlo.

Después de ese día, en la escuela, termino escuchando que varios compañeros de mi clase habían encontrado dices parecidos al mío, sólo que con figuras diferentes, por ejemplo; Melody encontró uno con una "H" sólo que media curveada.
Lucas también había encontrado uno, sólo que era como una "V" pero también curveada.
Más de mis compañeros se me acercaban a contarme que habían encontrado nuevamente lo mismo. Rafael, había encontrado uno con forma de una flecha, Pablo, con forma de un seis pero con un látigo que salía del final de ese seis, no le entendí muy bien, pero en mi cabeza tenía una referencia de eso. Y por último Leiza, una chica de pelo larguísimo pelirrojo oscuro, morena de ojos celestes, me dijo que ella había encontrado hace dos días uno con dos palitos, uno arriba y otro abajo, con una especie de "U" al revés, en el centro de ellas, tampoco le entendí bien, pero algo guardado tenía en mi cabeza.

No entendía nada, tenía varias preguntas, ¿Por qué estaban tirados por ahí? ¿Quién los desecharía? ¿Fue coincidencia que todos los hemos encontrado el mismo día? ¿Porque esas figuras y letras? ¿Acaso le pertenecían a alguien?, no se, sinceramente no se.

Martes 27 de Marzo del 20XX

Después de todo este tema con los dijes, decidí no preocuparme por eso, ya que me parecía una estupidez, así que decidí actuar normal y todo salió bien, ya que como era recreo, raramente nos dieron unos refrescos gratis, así que nos los tomamos tranquilamente. La profesora de prácticas del lenguaje tuvo la maravillosa idea de hacer una obra para la muestra de arte, varios dijeron que no, pero algunos querían, como yo, no me negaría para nada.

Estando en el salón de actos, la profe ya tenías los guiones hechos, nos dio personajes y lo único que teníamos que hacer era actuar. A mi me tocó ser la guerrera, la guardianes de la princesa que era Leiza. Comencé a decir mi línea, ya que era mi parte:

-"lo siento mi princesa, no puedo dejar que se vaya sol---un dolor en mi cabeza me interrumpió, pero no era un dolor cualquiera, este dolía bastante.

Suelto los guiones haciendo que se caigan al suelo y me agarró la cabeza, lagrimeaba.
¡¿Qué me está pasando?! Duele mucho, me mareo, siento que el aire se me va, sentía que me desmayaba, nauseas. Todos trataban de ayudarme, u otros sólo quedaron en shock mientras me.miraban sufrir, pero el dolor era demasiado fuerte hasta que al mirar pasará abajo, veo que el dije que encontré estaba brillando, en ese momento, me desmaye.

miraban sufrir, pero el dolor era demasiado fuerte hasta que al mirar pasará abajo, veo que el dije que encontré estaba brillando, en ese momento, me desmaye

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Punto de vista: Melody

Después de ver caer al suelo a Daría, me empecé a alterar demasiado. Habíamos ayudado a llevarla a la enfermería y la acostamos. ¡¡Estaba muy alterada!! No podía calmarme, necesitaba ayuda, por eso, fui corriendo a buscar a mis amigos: Rafa, Pablo, Tomás, Lucas, Ángel y Noa.
Al llegar al curso, estaban ahí, todos reunidos sentados charlando, me quedé pensando como estaban todos reunidos ahí de repente, pero no importaba eso ahora.

-¡¡¡CHICOS!!! -grite desesperada interrumpiendo su charla.

-¿Qué pasa? ¿Otra vez alteradita por algo, corazón?- Me dijo Ángel. Aquella chica morocha con las puntas rubias, tez blanca y ojos verdes.

-¡¡Necesito su ayuda!! Es que...¡¡Es que!!- Me interrumpe algo, no sabía que era pero al tocar el hombro de Ángel, sentí un mareo. Al mirar a los demás, vi que me miraban algo preocupados.

-eh, ¿Mel estas bien?- pregunto Tomás. Aquel chico de rulos, pelo marrón oscuro, piel vampiro y ojos celestes. ¿Ayuda de que? Termina lo que queres decir Mel- Me dijo preocupado, pero no podía hablar, el dolor no me dejaba, empecé a tambalearme un poco en el lugar.

-¿Mel? -Dijo Noa. Aquel chico encorvado, pelo marrón, ojos verdes y piel blanca. No entendía bien que sucedía, encima, para mejorar la situación, sin ninguna razón, se apagaron las luces.

Todos se empezaron a alterar.

-No pierdan la calma, no es tan....tan....ah.. -esas fueron, por ahora, las últimas palabras de Lucas, oír que al terminar de hablar, se desmayó. Todos comenzaron nuevamente a altersrse mucho más y lo peor, era que uno por uno caían, mientras los miraba asustada, cuando siento que mi cuerpo ya no tenía fuerzas, sin saber que había pasado, me desmaye.

[Continuará]

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