¡Hola pasado! (En edición)

Solo por verte feliz

 —Vaya, Tracy será valiente —dice Daphne mirando a su amiga abrazando a sus hijos, en especial a Dylan que le lleva una cabeza al menos.

—Nuestro mejor lado sale en los peores momentos —le responde su hermana mirando a sus hijos bromear con otros chicos del futuro, en especial ve como Emma se ríe con Rose.

En el escenario observan que un niño se pone de pie, cuando está delante de todos se quita la capucha revelando a un niño de unos ocho años, castaño, unas cuantas pecas, sin unos dientes y con dulces ojos azules.

—Hola a todos, mi nombre es Alex —el niño sonríe en dirección a la mesa de Slytherin que le provoca a cierta rubia un increíble calor en su corazón. —Tengo siete años, casi ocho, voy a la escuela, tengo muchos amigos y no juego nada que involucre una escoba —susurra rascándose la cabeza.

Y es cuando Pansy se levanta de golpe gritando de alegría.

—Lo sabía, sabía quién era tu padre.

—Eres muy lista madrina —Pansy se sorprende inmensamente cuando le dice que es su madrina.

—¿Sabes quiénes son sus padres? —le pregunta Theo mirando al niño sin encontrar muy bien algún rasgo que le ilumine y le diga, oh sí, ese es su padre.

—Es obvio mi querido Theo —le responde la azabache —pero dejaré que mi ahijado termine.

—Gracias tía —el pequeño se voltea hacia la mesa de los invitados —les dije que ella me ama a mí.

—¡Eso no es verdad! —gritan en la mesa de los encapuchados.

—Sí, como sea. Bueno si bien no juego quidditch me gusta mucho soccer y bueno, mi padrino es Harry Potter.

—Ya perdí la cuenta de los ahijados que tengo —dice el azabache sonriendo a su nuevo ahijado.

—Lo sabemos tío y aun así nos amas —le dicen todos sus ahijados.

—Y bueno, es hora de decir los nombres de mis papás —el pequeño toma aire y cierra con fuerza los ojos —Mi nombre completo es Christian Alexander Longbottom Greengrass.

Ay muchas reacciones en la sala, unos cuantos gritos ahogados, unas risas incrédulas, pero todas son calladas por el portazo que se escucha porque alguien ha salido del gran comedor sin querer pasar desapercibidos.

—¡¿Yo con Longbottom?! —grita Daphne antes de reírse a carcajadas solo que no son de burla, son histéricas como cuando tienes un colapso mental. No, no es posible, no, para nada. —Un momento —dice deteniéndose abruptamente. —¿Tengo cuatro hijos? ¡CUATRO!

Sin decir más se desmaya en brazos de Theo que para su suerte tiene buenos reflejos, sino se hubiera dado un buen golpe.

—¿Entonces Frank y Alice son mis sobrinos? —pregunta Astoria a Emma.