CAPITULO 34

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-Gracias por acceder a compartir habitación-. Dijo Camila para romper el silencio-.

-Era peligroso que tuvieras que salir a buscar hotel a esta hora por Nueva York-. Contestó abriendo su maleta para sacar su pijama-.

-¿Sólo por eso?-. Preguntó acercándose sensualmente-. Lauren la miró e intento con todas sus fuerzas mantenerse y no caer en sus encantos.

-Sólo por eso, además yo dormiré en el sofá-. Contestó desviando la mirada-.

-Lauren no, eres grande y ese sofá es pequeño, dormirás muy incomoda, si alguien duerme ahí voy a ser yo-. Le dijo segura aunque lo único que quisiera era dormir con ella-.

-Por supuesto que no, tú no dormirás ahí-. Se rehusó de inmediato-.

-¿Por qué yo no puedo y tú sí?-. Cuestionó la latina con una mano en la cadera-.

-Porque una chica como tú no debe dormir en un sofá-. Respondió-.Camila le dio una sonrisa, Lauren siempre era tan amable.

-Aunque es muy caballeroso de tú parte, esta habitación es tuya así que no voy a dejar que duermas en el sofá-. Expresó obstinada-.

-No seas...-.

-¿Podemos compartir la cama? Es grande y yo no...yo no intentaré nada, lo prometo-. Se comprometió la latina-. Lauren la miró a los ojos para ver si estaba siendo sincera.

-Está bien-. Aceptó, tomó su pijama y entró al baño para cambiarse-. Camila hizo lo mismo sólo que ella se cambio de ropa ahí, para apresurarse en meterse a la cama por el lado derecho ya que sabía que Lauren prefería el izquierdo. La chica de ojos verdes salió y se acostó junto a su latina. La situación era algo tensa, Camila estaba en su lado de la cama con todas las ganas de acercarse un poco más, pero no quería molestar a Lauren y producir algún tipo de discusión, así que mejor se giró para dormir.

-Buenas noches, que descanses -. Se despidió la latina-. Lauren por otro lado también quería acercarse, abrazarla, sentir ese calor que sólo su latina era capaz de darle. De a poco fue corriéndose hasta estar a centímetros de Camila, se apegó más a su espalda, y colocó su brazo atrayéndola por la cintura.

-Duerme bien-. Susurró depositando un beso en su cabello-. Camila sonrió al tenerla así, abrazándola, protegiéndola cómo cada vez que dormían juntas. Claro que así iba a poder dormir bien. 

Cuando Lauren abrió los ojos estaba sola en esa gran cama, pero escuchaba a lo lejos el sonido del agua de la ducha corriendo. Sonrió inconscientemente, le gustaba saber que Camila estaba a sólo unos cuantos metros de ella. Si bien estaba desconcertada cuando vio a su latina en el avión con el pasar de las horas le gustaba la idea, que Camila la haya perseguido hasta Nueva York, le daba la esperanza de que algo más sentía por ella.

-Has despertado-. Dijo Camila saliendo del baño con un corto vestido azul y secándose el cabello con una toalla-.

-¿Te levantaste hace mucho?-. Preguntó Lauren reincorporándose en la cama y evitando recorrer a Camila que lucia muy sexy con ese pequeño vestido-.

-No tanto, lo suficiente para darme una ducha y pedir el desayuno-. Contestó-.

-Entonces me iré a duchar, deben estar por subirlo y tenemos que estar a las 10 en Columbia-. Expresó levantándose-. 

Camila al contrario de Lauren no le importo mirarla descaradamente, recorrió esas piernas que dejaban a la vista los pequeños short que usaba para dormir, y esa camiseta que le permitía ver parte de su abdomen. Pero lo que capto toda su atención fue su entrepierna, de la que se podía observar cómo el miembro de Lauren estaba semierecto. Un calor inundó de repente el cuerpo de Camila, trago saliva e intento con todas sus fuerzas dejar de mirar pero no podía, los días que habían pasado sin poder hacerle el amor, eran demasiados para su gusto.

INALCANZABLE CAMREN G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora