Fool, U Care, oK? ►TaeJin★ (+18)

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Nunca sabía cómo, pero lo lograba. Ese beso se comenzó a descontrolar los sentidos de ambos nuevamente; Jin sabía que las sensaciones que él le causaba no eran para nada correctas a tan corto tiempo.

¿Pero qué era lo correcto?

¿Qué se supone que debía hacer Jin si todo lo que le provoca el menor es maravilloso?

Los besos de Taehyung eran algo que jamás había experimentado.

Lástima que siempre los pensamientos le atacaban. Seokjin sabía que no lo iba a tener por siempre, y eso es algo que le preocupaba y le aterraba. A Taehyung se le notaba a más de diez kilómetros de distancia que jamás aceptaría una relación de él, porque eso le había quedado claro que quizá Tae no quisiera formalizarse. O por lo menos no con él.

Le quería, quería estar a su lado, sin embargo la idea de que Taehyung se cansara de él era completamente horrible. Quizá él estaba siendo exagerado, porque su donsaeng jamás le ha dicho que no a la idea de estar con él en algo más "formal"... Bueno, Seokjin ni siquiera había preguntado algo similar, no más que pedir su opinión de el amor.

Pero... Está bien disfrutar mientras dure.

Las manos de Taehyung ya paseaban en el torso de el de hombros anchos, y los jadeos de este ya estaban presentes en la habitación. Los largos dedos acariciaban suavemente los pezones de Seokjin. La boca del castaño comenzó a bajar rápidamente por la mandíbula y cuello de su contrario, dando leves lamidas.

Taehyung miró el rostro extaciado de su hyung, y se quedó saboreando la expresión.

—¿O-ocurre algo?— cuestionó Jin. Como acto seguido pudo ver como el chico que solía tener sonrisa cuadrada se metió debajo de su playera y comenzó a morder la sensible piel de su torso. —¡Ah! Ah, a-amo, eso... Eso duele ¡Mhn!

A el más joven de la situación no le importaban en lo más mínimo las quejas, él sólo quería seguir marcando la deliciosa y suave piel de Seokjin.

Quiero asfixiarme entre
las sábanas de nuestra cama.

El juego previo era algo que Taehyung jamás había ocupado con Jin. Las veces anteriores a las que habían estado intimando, Taehyung le castigaba no permitiéndole correrse o en durante la felación que le ofrecía Jin, este ponía una resistencia a eyacular bastante increíble.

Pero esta vez el castaño de mente perversa tenía algo diferente en mente.

—Quiero que me masturbes, Jin.— dijo en un tono burlesco el menor.

—¿A-ah? ¡Yah, Tae-

—¿Quién?

—Amo... Y-yo... nunca he hecho tal cosa.— respondió avergonzado el rubio. Hubo un silencio que a Seokjin incomodó bastante, aunque fue corto. —¿Qué pasa?

Taehyung explotó a risas, sin quitarse encima de el de cabello rubio. Jin se quedó sorprendido por la reacción tan extraña, y en realidad le ofendía bastante que se estuviese carcajeando.

—Ah, aah, que buen chiste, ahh...— poco a poco la risa iba siendo calmada, y el rostro de Jin cada vez más comenzaba a mostrar enojo. —Espera... ¿No lo dices de juego? ¿Es verdad?— ahí Taehyung se percató de que posiblemente la había cagado.

—Sí, es verdad. Jamás lo he hecho en mi patética vida, gracias.— Seokjin optó por tratar de salir de entre las piernas de el menor.