Capítulo 1

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Los brazos de Derek me rodean la cintura mientras deja un beso en mi cuello, yo sonrío pero no soy capaz de hacer nada más. Llevo con este perfecto hombre un año, y como una pareja normal hemos tenido nuestros problemas pero los hemos superado con éxito y hemos sido muy felices. Si hemos porque desde hace unos meses yo ya no me siento igual, no siento ese amor que sentía al principio solo cariño. Suspiro y disimuladamente me libero del agarre de Derek y me acerco a hablar con Scott. La manada está mejor que nunca, desde que nos enfrentamos a Kate en su forma de mujer-jaguar nos hemos vuelto más unidos, ahora funcionamos como un reloj suizo.

- ¿Que pasa hermano?- Pregunta Scott poniendo una mano en mi hombro yo le sonrío mientras siento como la mirada de Derek quema mi espalda.

- ¿Podemos hablar?- Le pregunto serio, él frunce el ceño y asiente mientras vamos hacia el patio trasero de la mansión Hale. Desde hace cosa de medio año la reformaron y ahora vive aquí la mitad de la manada.

- ¿Que pasa Stiles?- Me pregunta serio, yo trago saliva y aparto la mirada, me siento en la hierba y él me imita.

- ¿Como supiste que ya no sentías lo mismo por Allison?- Le pregunto mientras arranco hierbas del suelo, su mano se posa un mi rodilla y yo subo la mirada para mirarle a los ojos. Su ceño está fruncido y la boca es una tensa línea.

- ¿Derek te ha hecho algo?- Pregunta dejándome desconcertado ¿En serio creen a Derek capaz de hacerme algo? Eso es una estupidez.- Por que puedo...- Continúa hablando mientras hace crujir sus dedos, yo niego y vuelvo a mirar el suelo.

- No, ni mucho menos.- Le digo mientras me recuesto en sus piernas, su mano va directamente a mi pelo y acariciaba suavemente.- Es más creo que el que va a sufrir es él.- Susurro cerrando los ojos, la mano se detiene y yo miro a Scott otra vez me está mirando con el ceño fruncido. Suspiro y me vuelvo a sentar pero esta vez quedando cara a cara.- Es que yo no sé lo que siento por él, no lo quiero igual que al principio, ya no me siento cómodo follando con él, ya no me provocan esas mariposas cuando lo veo.- Niego mientras caen algunas lágrimas de mis ojos, Scott apoya su mano en mi pierna y se acerca para abrazarme.- Y aunque no me creas me duele no quererle de la misma manera que él me quiere a mí.- Mi cuerpo a empezar a dar pequeños espasmo mientras suelto sollozos.

- Stiles si te sientes así no puedes seguir con él, porque vos estas haciendo daño a los dos, tu te estas negando la posibilidad de encontrar a quien verdaderamente te ame y a él lo estas haciendo vivir una mentira.- Me dice sin soltar el abrazo, yo dejo salir otro sollozo y me aferro a él como si fuera un salvavidas.

- Pero no puedo, soy un cobarde, que no quiere hacerle daño.- Susurro aflojando mi agarre.- Un cobarde que pone la felicidad de su pareja a la suya.- Rio irónicamente, Scott me mira con una mueca. Me levanto y sacudo mis pantalones.- Me voy a despejarme al bosque, diles que quiero estar solo y no dejes que él venga a buscarme.- Le digo antes de perderme entre los árboles. 

Suspiro mientras ando con cuidado de no caerme, porque yo soy un simple humano que se relaciono con lobos. Soy un tonto, no puede ser que me pase esto a mí. Con lo que me costó llamar la atención de Derek, miles de rechazos, miles de malas miradas, de ceños fruncidos y cuando consigue que todo vaya bien aparece este sentimiento. Esta presión en el pecho que muchas veces no me deja ni respirar, cuando él está a mi alrededor todo pasa más lento y no es lo mismo ¡Joder! Quiero volver a quererlo como lo quería antes, quiero a volver a contar los minutos para verlo, que su colonia haga que mis piernas tiemblan ¿Tanto pido? Un sollozo se escucha por todo el bosque y miro sorprendido a donde estoy, me he alejado demasiado porque no reconozco esta zona del bosque. Suspiro y limpio las lagrimas que caen de mis ojos y golpeo el árbol que está a mi derecha, y vuelvo a golpearlo tantas veces como la rabia que siento hacia mí se esfuma. Miro mis nudillos y están sangrando con algunas astillas clavadas en ellos. ¿Tanta rabia tengo dentro? Necesito separarme unos cuantos días de todo esto. Camino por donde he venido, a ver si por casualidad he andado en línea recta. Creo que voy aprovechar el viaje a Virginia para ver la base de Quantico para despejar mi cabeza, mi idea era irme con Derek y pasar ahí una semana pero me voy a ir solo. La mansión Hale toma forma delante de mis ojos y sonrío, al parecer si que he ido en línea recta. Antes ni siquiera de abrir la puerta escucho los gritos furiosos de Derek hacia Scott preguntando por mí, suspiro y entro consiguiendo que la fiera se calme. Derek se acerca corriendo y me abraza mientras esconde su cabeza en mi cuello, la presión en el pecho vuelve a parecer cuando recibo la mirada de Scott.

- ¿Dónde estabas?- Pregunta separándose mí mirando si tengo alguna herida, al ver mis mano me mira asustado y las coge con delicadeza.- ¿Que ha pasado? ¿Estas bien?- Aparto mi mano y él me mira sorprendido.

- Sí, solo le he pegado un poco a un árbol.- Le digo mientras voy hacia el lavabo bajo la atenta mirada de todos. Entro y me lavo bien las manos dejando que el escozor recorra todo mi ser, es lo mínimo que me merezco. La puerta se abre y Derek entra preocupado mientras me ve con las mano debajo del grifo.

- Déjame que te cure las manos.- Me dice mientras me obliga a sentarme en la tapa del váter, suspiro y extiendo ambas manos mientras los nudillos comienzan otra vez a sangrar. Él busca el botiquín y empieza a echar alcohol mientras absorbe el dolor con la otra.- No entiendo porque te has hecho esto.- Me dice, yo aparto la mirada y muerdo mi labio mientras niego.

- No es importante, frustración supongo.- Le miento mientras controlo mi corazón porque sé que lo está escuchando, él asiente sin mirarme y empieza a vendar mis manos.- Derek he estado pensando y al viaje a la base de Quantico voy a ir solo.- Él me mira con el ceño fruncido, yo trago saliva y aparto la mirada de sus ojos verdes.- Necesito despejar mi cabeza y para conseguirlo tengo que estar solo.- Él suspira y asiente mientras acaba de vender mi mano izquierda.

- Esta bien, por una parte me va mejor.- Yo lo miro con el ceño fruncido y él sonríe antes de darme un casto beso en los labios.- Esa semana vuelve mi tío y quería estar aquí para recibirle.- Me dice ilusionado, yo asiento y le sonrío. Hace mucho tiempo que no veo a Peter, desde que me ofreció la mordida no le he vuelto a ver, si que me enterado que ha estado por aquí pero yo nunca he coincidido con él. Acaricio la mejilla de Derek y él se acerca para besarme, le sigo el beso pero no siento nada, es como cuando te besas con un desconocido en una discoteca. Me separo y veo la ilusión y el amor en sus ojos y me hace sentir mal, no es justo para él.

Salgo del lavabo y la mirada molesta de Scott llega juntamente con una negación de cabeza. Trago saliva y paso por su lado sin hacerle caso para dirigirse hacia mi casa, necesito alejarme un poco de la manada.

- Te estas equivocando.- Susurra molesto mientras paso por su lado, yo resoplo y me subo a mi Jeep para irme a casa. Necesito hablar con Jordan. Mi padre y Jordan se casaron hace cosa de medio año y la verdad es que me a sorprendido para bien la convivencia con él, es como un padre y eso me reconforta. Acelero cuando ya no estoy a la vista del coche de policía y llego antes de tiempo a mi casa. Al abrir me doy cuenta que la charla tendrá que esperar, porque ninguno están en casa. Suspiro y subo a mi habitación pero antes de subir ni siquiera un escalón Ares sale corriendo de mi cuarto y se lanza sobre mí.

- ¿Hola chico, me has echado de menos? - Le pregunto mientras el lobo olisquea mi ropa. Ares es un lobo que su manada abandono en la entrada de Beacon Hills y que Derek encontró malherido, por eso una de sus patas no responde bien a depende de qué ejercicio. A este grandote me lo quedo yo en casa porque la gran parte del tiempo estamos aquí así se nos hacía más fácil cuidarlo. Al captar el olor de Derek empieza a mover la cola feliz y yo le acaricio la cabeza.- No esta papi Derek, mañana te llevaré con él.- Le digo al lobo consiguiendo que se baje de encima mío, subo mientras el lobo me sigue feliz. Quedarme con este animal es lo mejor que podría haber hecho nunca, y por otra parte es otra cosa que me mantiene atado a Der.

El destino es complicado (Steter)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora