Capítulo IX - "Dear diary"

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CAPÍTULO IX:

Tomé las llaves del auto, me despedí de María, y emprendí camino a la casa de mis padres, quería olvidar lo sucedido con Harry y por fin dar un paso hacia adelante para olvidarlo. Después de 20 minutos en la autopista llegué a la gran casa, la cual era más grande que la mía, sonreí al verla, tenía años sin venir aquí, a la casa en la cual crecí; me bajé del auto, saqué mis llaves de la casa de mis padres, y abrí la gran puerta.

- ¿Buenas? ¿Hay alguien en casa?

Nadie respondió.

- Mamá, hiciste buenos cambios con los inmuebles - dije mientras cerraba la puerta -

- ¿Valerie? - sentí una voz masculina que decía mi nombre y esa no era la voz de mi padre -

Me di vuelta y ahí estaba Christopher, mi hermano, mi guapo hermano tengo que admitirlo, había sacado los ojos de mi madre de un hermoso color azul zafiro y el pelo más oscuro que el mío, el tenía 26 años, sólo me llevaba 3, al verlo quedé atónita y corrió hacia mi para cargarme.

- ¡Valerie, estás hermosa! - dijo mi hermano mientras veía mis ojos llorosos -

- Eres un estúpido.. Me dejaste por 2 años - hice un puchero -

- Pero princesa, aquí estoy - me regaló pequeños besos en la mejilla -

Así es, mi hermano y yo teníamos la relación más hermosa, aunque siempre existieron peleas a la final nos reconciliabamos, yo era su consentida, su todo, hasta que se casó con Keira Knightley, mi querida cuñada, ella no me caía mal si no que por ella Christopher dejó de consentirme como antes.

- ¿Donde está mi cuñada? - salté de la emoción -

- Ella está en la cocina con mamá - me sonrió nervioso -

Corrí por el largo pasillo que dirigía hacia la cocina y me encontré a mi cuñada, al momento de abrazarla pude notar que algo impedía que me acercara a ella, al bajar la mirada lo noté ¡IBA A SER TÍA!.

- OH MI DIOS! - grité muy fuerte - seré tía - empecé a saltar y a gritar como una niña -

- Si pequeña, serás tía - me dijo Keira -

- Y de unos hermosos gemelos - escuché la voz de mi hermano -

Vi a mi hermano que se asomaba por el marco de la cocina, el tenía una hermosa sonrisa dibujada en sus labios, mis ojos se hicieron agua, mi hermano ya estaba casado y a punto de tener un bebé, bueno dos bebés.

- No, no, no llores por favor - mi hermano me abrazó -

- ¿Que no llore? ¿Cómo coño quieres que no llore?

- Eh, las groserias Valerie - me reclamó mi madre -

- Es la emoción madre - le lancé un beso - 

Mi hermano me mantuvo abrazada mientras yo acariciaba la gran panza de mi cuñada, que hermoso era.

- Valerie, atrás tu padre te espera - dijo mi madre -

- Voy para allá. Y ustedes - le dije a la panza - no nazcan aún.

Mi hermano empezó a reírse, resulta que sus bebés eran varones, ya tenían 8 meses y medio, si, no los ocultó por mucho. Caminé hacia el gran patio donde pude ver que mi padre no estaba solo, si no con Harry, me detuve y pensé: "¿Qué carajos hacía Harry aquí en la casa de mis padres? ¿A caso vino a preguntar por mi? No, no lo creo, averiguemoslo"

- Hola padre - le regalé mi mejor sonrisa -

- Reina, ven aquí - abrió sus brazos haciendo que fuera hasta el para abrazarlo, en una de sus manos tenía un trago de Whisky al igual que Harry -

Enemigos por siempre ¿o no?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora