El Reto De 30 Días

[Día 8] Doctor y paciente.

- Doctor Chanyeol, su hermana Seulgi y su pequeño sobrino Baekhyun están aquí, ¿les digo que pueden pasar?. -Decía mi secretaria y enfermera Joy a través del teléfono desde donde se encontraba ella en su escritorio.

Presioné el botón del aparato para responderle mientras dejaba algunos papeles de trabajo a un lado.

- Sí Joy, diles que pasen, y gracias.

- Muy bien. -Colgó.

La puerta de mi consultorio se abrió dejando entrar a un travieso Baekhyun de 6 años y a su madre, que es mi hermana mayor Seulgi.

Me puse rápidamente de pie para caminar hasta ellos.

- ¡Tío Channie!. -Corrió hacia mi con sus bracitos hacia arriba para que lo cargara.

- ¡Hey Baekkie!. -Sonreí y me agaché para alzarlo en mis brazos y ponerme derecho de nuevo.

- ¿Como está mi sobrino favorito?. -Le dí un beso en su mejilla regordeta y sonrosada.

- Estoy feliz porqué Mami dijo que vendriamos a verte. Y soy tu único sobrino, ¿lo olvidas?. -Estiró su boquita como patito.

- Ohww, claro que no lo olvido, y aún que tuviera otros sobrinos, tú  seguirias cuando mi favorito. -Baek sonrió mostrando sus dientitos y se aferró a mi cuello en un abrazo.

- Hermanito menor. -Me llamó Seulgi, y levanté la mirada a ella. - ¿Puedo pedirte un favor?.

- Sí, claro, dime.

- Bueno, debo ir a trabajar ahora mismo, y me preguntaba si puedo dejar a Baek contigo, solo por un rato hasta que su padre salga de trabajar y venga por él. De paso, me gustaría que le hicieras una revisión y le pongas una vacuna contra la gripe, ya sabes, porqué el invierno de acerca y para estar prevenidos.

Quedé pensativo por unos segundos y ví como ella hacía un puchero para que aceptara.

Suspiré y asentí. No me quedaba de otra, además de que sus pucheros eran mis puntos débiles desde que éramos niños.

- Está bien, tendré que mover mis horarios pendientes para otro momento. Y deja de hacer esos pucheros, ya estás grande. -Le saqué la lengua jugando y ella chilló contenta.

- ¡Gracias!, ahora si me voy, o se me hará tarde. -Ella se acercó a Baekhyun mientras aún estaba en mis brazos y repartió miles de besos en su carita provocándole cosquillas al pequeño.

- Nos vemos mi vida, tu papá vendrá por ti luego del trabajo. Portate bien con el tío Chanyeol y no lo hagas enojar, sabes lo gruñón que se pone cuando lo molestan.

- Sí Mami. -Obedeció.

- Oye, yo no soy gruñón...-La miré entre cerrando los ojos.

- Sí lo eres, y no es normal que el hermano menor sea gruñón~.

- Ya, como sea. -Rodé los ojos.

Cuando Seulgi se fue, caminé hasta la camilla de cuero negro que se encontraba cerca de la pared y senté allí a mi sobrino.

- Ok, vamos a hacerle una revisión a mi tierno sobrino para ver como se encuentra de salud.

- Yo estoy bien tío Channie, yo soy un niño muy fuerte, hasta soy el niño más fuerte de mi clase. -Se cruzaba de brazos y tenía la cabeza con una sonrisa.

- Oh claro que sí pequeño, eso no lo dudo. Pero ya escuchaste a mamá, debemos hacerle caso, además, es por tu bien, no queremos que el niño más fuerte de su clase atrape un resfrío y se debilite, ¿no?.