"Serendipity" [Pausada indefinidamente]

Dos realidades

El señor Kim mando a llamar a Aron y Baekho a su despacho. El ama de llaves insistía que tenía que hablar con él antes, pues debía de comunicarle del regreso de Minhyun y, más importante aún, de Jonghyun pero él la ignoró completamente, tenía asuntos pendientes con estos dos muchachos.

-Soy un hombre ocupado pero no tonto- dijo nada más cerrar la puerta de su despacho.

-¿Creis que no sé las fechorías que hacéis a mis espaldas?- continuó sin entender los acusados de que se trataba- Os doy un techo, comida ¿Y me pagáis así?.

-Disculpe señor Kim pero no sé de qué nos está hablando- preguntó Aron.

-¿No sabes de qué estoy hablando? -dijo acercándose de forma amenazante- hablo del dinero que me han estado robando.

-¿Qué dinero?- contestaron ambos a la vez, intentando parecer tranquilos aunque el palidez de sus caras los delataba.

-¡El dinero que habéis estado escondiendo a mis espaldas!¡Mi dinero!- decía mientras se podía observar la ira contenida.

No sabían cómo pero finalmente el señor Kim se había dado cuenta de que no le entregaban todo el dinero que ganaban robando. El señor Kim estaba furioso levantaba sus manos de un lado a otro, soltaba veneno en forma de insulto hacia los dos huérfanos, estos ni intentaron defenderse pues sabía que cualquier respuesta alteraría aún al señor Kim. Sin embargo, el completo mutismo por parte de estos lo había encendido aún más. Estaba a punto de levantarles la mano cuando alguien interrumpió en el despacho.

-¿Jonghyun?- dijo el señor Kim, quizás era una alucinación pensó.

-¡Sorpresa! Estoy de vuelta- dijo el mencionado con sus sonrisa más encantadora.

-¿Qué haces aquí, Jonghyun? ¿Por qué no me dijiste nada?-dijo en un tono más calmado mientras bajaba su mano y dirigía su movimiento a acariciar la cabeza de Aron- Como ves estaba ocupado con mis huerfanitos.

-Lo siento, papá por no avisarte-bajo su mirada ahora ya no tan seguro de su decisión- pero no estaba seguro si estarías de acuerdo con mi vuelta.

-Obvio no estoy contento con que no me comunicaras que volvías pero mi hijo siempre es recibido en su casa-

Jonghyun creyó en sus palabras, pensando que de verdad su padre estaba contento con su llegada. Sin embargo, eso estaba muy lejos de la realidad, el señor Kim no mostró su real enfado porque quería ocultar lo que realmente  hacía con Baekho y Aron, si de milagro no fue atrapado por su hijo pegando a uno de estos. Se despidió lo más pronto posible de su hijo, debía resolver primero el 'asunto' con los huérfanos, después se encargaría de su hijo.

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Desde lo alto de la escalera, Jonghyun había visto a Ren junto al resto de los chicos cuando Son Eun los condujo hacia sus habitaciones. Corrió hacia el fondo del pasillo de la planta alta donde estaba la escalera de servicio, bajó por ésta y atravesó la cocina, recorrió el pasillo que comunicaba directamente con el ala de servicio, sin tener que pasar por la sala, y avanzó hacia el patio cubierto. Desde allí se asomó por la ventana interna hacia el cuarto de las chicos , y vio cómo Ren se empezaba a desvestir, mientras una chico acostado de estatura mucho más alta y de la misma edad o eso parecía, le hablaba aunque Ren no parecía prestarle mucha atención. Jonghyun vio más de cerca al chico alto y lo reconoció era Minhyun, un huérfano que había estado en la mansión hace unos años pero que un día desapareció sin más.

Jonghyun sentía que no debía seguir mirando al rubio que se desvestía sin saber que estaba siendo observado, pero una puerta corrediza que comunicaba ambas habitaciones se abrió, y entraron los huérfanos que antes había visto en el despacho de su padre. Estos sin saber de la presencia de Jonghyun sacaron de debajo de las baldosas de suelo y de los recovecos de la pared pequeñas bolsas que parecían contener dinero. Jonghyun se extraño, era normal que los huérfanos tuvieran sus propios ahorros pero porque la necesidad de esconderlo a tal extremo, no es que estuvieran cometiendo un crimen, incluso su padre estaría orgulloso de que los chicos supieran administrar el dinero que les daba y no lo malgastarán.

Rápidamente sacaron el dinero de las bolsas, empezaron a contar la cantidad y no entendió muy bien pero le decían a Ren que debían esconder el dinero antes de que lo descubriera el señor Kim. Ren no pidió ninguna explicación y les sugirió lugares donde podrían esconder el dinero. Repartieron el dinero, incluyendo a Ren, y Aron les dió órdenes a los tres chicos de dónde esconder el dinero. 

Jonghyun si bien no sabía muy bien para qué había bajado, sólo tuvo el impulso de ver a Ren. Pero ahora estaba rodeado del resto de los chicos, y él no quería presentarse ante ellos; lo incomodaba ser el niño rico de la casa. Y sin llegar a entender la realidad de la situación decidió marcharse.

Baekho se había encargado de tener al tanto a Ren de lo que estaba pasando, de lo cruel que había jurado ser el señor Kim si encontraba ese dinero que ellos negaban ocultar. Intentaba hablar de ello con naturalidad pero la angustia sobrevolaba sus rostros. Le decían que no era la primera vez que el señor Kim los amenazaba y que nada grave les había pasado. No podían expresarlo con palabras pero todos sabían que eran víctimas sometidas, sin muchas oportunidades de rebelarse. 

Aron le contó que allí tenían casa y comida asegurada. A cambio, tenían que hacer esos trabajos para Bartolomé. Lo más fácil era trabajar en la fábrica de bolsos y pedir limosna. El más difícil, robar. Además, le contaron que de cada botín que conseguían, el señor Kim separaba una pequeña parte para ellos y lo 'depositaba' en la cuenta bancaria de cada uno. Y cuando fueran mayores de edad, tendrían una buena cantidad de dinero en el banco como para realizar algún emprendimiento. Pero que hace poco habían descubierto que todo eso era mentira, no existía tal cuenta bancaria y todo el dinero se lo quedaba el señor Kim. Por eso, habían estado escondiendo parte del dinero que conseguían pero este los habían descubierto, por suerte solo eran sospechas de él, no había encontrado pruebas exactas así que solo debían ser cuidadosos a partir de ahora.

Si Jonghyun se hubiera quedado un poco más, hubiera oído muchas de estas revelaciones impensadas en la conversación que tuvo lugar en la habitación porque en la mansión Kim habían dos realidades.