Capítulo 13

617 40 14
                                    


Punto de vista Panchito

Hoy es el día en que José vuelve a Brasil, lo ayudo a empacar, entre sus cosas veo su pajarilla la que me pongo y él la ajusto, yo ajusto la suya y en eso él me hace cosquillas, voy a extrañarlo. Él recibe una llamada al celular, yo sigo empacando y cuando él vuelve solo ayuda. José anda todo desanimado, sus ojos están caídos, supongo que él también está deprimido, pero no sé puede hacer nada. Una vez fuera del aeropuerto, pude ver que él andaba viendo por última vez el paisaje de este país, le toqué el hombro para luego decir su nombre, él voltea y le toco el pico para luego reírme, pero él no ríe.

Nos sentamos a esperar, trataba de alegrar el ambiente, pero José solo me sonreía falsamente, intenté besarlo, pero él se niega a hacerlo y se conforma con recargarse sobre mi brazo. Pasan unos minutos y le ayudo a llevarle las maletas al avión, él se sube encima del carrito de maletas y me mira sonriéndome, yo estoy enfadado porque me hace más pesado el trabajo.

-voy a extrañarte- me dijo.

-yo también, pero nos volveremos a ver- le dije con una sonrisa.

Él solo se deprime, una vez llegado la hora de abordar, yo me despido de él abrazándolo, él hace lo mismo para luego susurrarme al oído.

-no pienso seguir con esto- me susurró.

- ¿De que hablas? – le pregunté.

-ya no quiero seguir saliendo contigo- me respondió apartándose un poco.

- ¿bromeas? – le pregunté, asustado y con una sonrisa.

-no, haz como si nada de esto hubiese pasado- me respondió.

-si es sobre las relaciones a larga distancia, puede solucionarse gracias a la tecnología de hoy en día- le dije.

-no es eso, yo nunca te ame, solo te use como experimento- me dijo.

- no es cierto, aquellos momentos no fueron mentiras, solo no quieres admitirlo- le dije- ¿Qué sucede?

-nada, solo no quiero seguir más con esto- me dijo con la mirada baja.

- dime lo que te sucede, dímelo por favor, tú no eres así- le dije sujetándolo de los brazos.

-solo acéptalo y déjame ir- expresó para luego zafarse e irse.

Él se va sin dar vuelta atrás, yo extiendo la mano, intento gritarle, pero por alguna razón mi voz no sale. Siento que todo se torna oscuro como si él fuese aquello que ilumina mi vida. Las personas murmuran, pero yo no les hago caso, solo quiero que él vuelva. Trato de sonreír pero me es inútil, se supone que soy el optimista pero esto no tiene nada bueno. Me tiro de rodillas al suelo para luego soltar en llanto suplicando por que José regrese. La gente pregunta por mí, pero yo los ignoró. Siento un dolor fuerte en el pecho, quiero que vuelvas, por favor, vuelve. 

Amor extranjeroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora