Capitulo III: The day we met 1/2

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-ándale rosita fresita, nos vamos a divertir-

-aparte no tenemos clases ya y debemos disfrutar el verano-

Natalia y Oscar me miraban atentamente, estábamos en la plaza cercana a la casa de Oscar de donde veníamos, ya después de una semana de nuestro "incidente" con el alcohol, se nos había antojado ir a por unos helados y nos pareció bien para el calor infernal de esta ciudad, mis amigos se encontraban sentados uno junto al otro, mientras yo estaba frente a ellos, habíamos adoptado esa pose después de que Oscar dijo que sería buena idea ir a la playa cercana a la ciudad, quedaba a unas 2 horas, pero mis amigos se habían olvidado de mi mini fobia al océano, desde que a los 5 años un muy descuidado Juan, mejor conocido como mi padre, casi me pierde dejando que el océano me llevara en una de esas donas para flotar en el mar, ¡SERIA PARTE DEL OCEANO!, y mi papá estaba más distraído comiendo que prestando atención a su hija, lo bueno que mi hermano se dio cuenta y por eso estoy aquí, Oscar había propuesto que pidiéramos permiso para quedarnos 2 días en una casa de playa que tenían sus papás, quería que fuéramos así como en la películas, una noche loca en la playa, pero solo teníamos 15 y prácticamente teníamos que pedir permiso hasta para ir al baño, tal vez no tan exagerado, pero nuestros padres tenían límites.

-Es imposible que nos dejen ¿ya pensaron eso?- murmure mientras volvía la atención a mi helado de pistache con menta, veía como se iba derritiendo, no escuche nada de parte de mis amigos así que voltee y Natalia tenía una mirada de "estas bien pendejo Oscar " mientras miraba a el rubio el cual solo tenía una mueca.

-Buenooo...-murmuro Oscar mientras sorbia de su café helado-creo que nos aterrizaste- pero si intentamos tal vez-frunció el ceño e hizo un puchero para terminar con un- si estoy bien pendejo obvio no nos van a dejar-

-ya valió riata- gruño nata mientras se concentraba en comerse su helado.

-podríamos ¿ir a las albercas?-sugerí mientras sacaba mi celular para checar donde había unas no tan llenas en temporada de verano que era casi imposible.

-Weeey, tienes razón-sonrió satisfecho Oscar mientras seguía bebiendo ahora un semblante más feliz-voy a invitar a un amigo, deberían invitar a Anna- nos miró a través de esos ojos tan ocurrentes, y es que Anna era una vecina de Natalia, nos caía bien pero ella era de las típicas niñas "quiero un novio si no me muero", vivía para la vanidad y los chicos, fuera de eso era ¿amigable?

-suena bien-sonrió forzado Natalia y es que no le caía tan bien, el pero aquí, es que Oscar se la llevaba súper bien con ella por ser "arpías" juntos, Oscar en el último año entro en su etapa "gay perra" donde no se dejaba pisotear por nadie y estaba bien pero criticaba más de la cuenta, un día quiso hacerlo con nosotros y nuestro "estilo lesbiano" pero le paramos las palabras y le pegamos uno que otro golpe.

-entonces así quedamos, yo le diré a mi amigo, que espero una de ustedes lo atrape ya que está bien bueno- nos guiño un ojo mientras se reía-y ustedes le avisan a Anna banana de mi parte plis.

-bueno, entonces hay que planearlo bien y listo-

Mire a mi amiga y asentí con lo que dijo, aun no sabíamos con quién iríamos y es que las albercas más cercanas estaban a unos 40 minutos en auto.

-le diré a mi hermana y su novio no se preocupen- la hermana de Oscar Amelia tenía ya 23 años y estaba casada, ella era nuestra cómplice en muchas ocurrencias y es que amaba al desastroso de Oscar.

-listo entonces hay que pedir permiso y ya-

Mis amigos asintieron a lo que dije y así terminamos neutra conversación del plan a las albercas, quedamos en ir el sábado ye estábamos a martes, no faltaría mucho y respecto al permiso tampoco habría problema si iríamos con Amelia, ya habíamos quedado a su cuidado otras veces y los papas de Natalia y los míos confiaban totalmente en ella.

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